Resistencia Asakawa

La casa de Yoh Asakawa por lo general es silenciosa salvo por el sonido que suele hacer el piano mientras el dueño de dicha comienza a tocar, o los gritos de una egocéntrica carnicera. O en navidad cuando la familia de su hermano mayor va de visita.

Huele a limpio casi todo el tiempo, es una casa que esta llena de libros por todos lados, por lo general Rene e Yoh hacen sus juegos de sangre en el sótano de esta casa, por lo general, no siempre.

Una casa algo grande para una persona, pero eso es por que esa persona es alta y no gusta de las habitaciones pequeñas, por lo general las puertas están cerradas pero algunas ventanas abiertas.

Esta algo mas alejada de las demas casas y a su alrededor abundan muchos arboles y plantas.

"Yoh!!! Ya llegue..." Rene entra por la ventana del segundo piso de la casa de Yoh. Al cuarto que deberia ser su estudio. Pero no habia nadie. Se incorpora tras su hazaña y husmea un poco entre losnpapeles en el escritorio antes de hacer su caminio a la puerta y despues al pasillo pqra volver a gritarle. "YOH YA LLEGUE!!!Traeme un Te, no?"

Hoy era un día perfecto para sentarse a tocar el piano, hasta que escucho el ruido en su oficina y después los gritos, le daban ganas de irse y su la otra creyera que no estuvo ahí pero eso sería más problemático, por lo que obto por servir una taza de te y dejarlo en la mesa que tenía cerca, si la otra lo quería que fuera por él.

Se sentó una vez más en el piano y comenzó a tocar, René escucharía descubriendo donde estaba después de todo.

Se detuvo por un segundo escuchando el silencio muerto del hogar de Yoh.
Hacia un frio inhumano a en el segundo piso de la casa, cosa que llevo a Rene a pensar por unos breves segundos que la casa estaba desierta.

Pero no era así, escucho un pequeño ruido del piano que la trajo de vuelta al pasillo desierto y oscuro en el que se encontraba en ese momento.

-"YOH estath abajoooo??- Pregunto jugando con una mala imitación de un acento español mientras se aproximaba a pasos curiosos hacia las escaleras principales que le llevarían a donde su amigo se encontraba, o por lo menos un poco cerca de.

Escucho el llamado de su amiga y suspiro un poco, para seguir tocando la marcha turca, no le gustaba gritar en su casa ¿quien mas podría ser?" aveces le sorprendía lo extraña que era la chica.

Hasta que la vio aparecer se detuvo y miro el te en la mesa junto a un sillon indicando se sentara - ¿que quieres?- fueron sus palabras en un tono suave para seguir tocando ahora una versión en piano de Bullet Train.

No le molestaba la compañía de la chica, hasta que se pusiera a fastidiar demasiado, y solo tenía que dejarla ahí, las probabilidades de que la chica le encontrara con lo silencioso que era eran muy vagas

Sonrio para ella misma una mueca torcida que autodenomino felizidad. La casa de Yoh era relativamente nueva por lo cual no deberia ser problema andar por sus pasillos sin ruido alguno, pero Rene no podia bajar los escalones sin ese horrible sonido de madera sufriendo bajo peso. Le era imposible a Rene no hacer ruido en la casa de Yoh era como si todo lo que ella tocase gritara en panico cuando se acercaba, o seria que la casa de Yoh era un tumba en silencio? Llegando a la planta baja vio a Yoh sentado en el piano tocando tan sutil sus movimiento como pluma al viento. Sonrio a su gesto del te y el aciento que le ofrecio. Se golpeo el pie con un sofa de madera y mantuvo la boca cerrada para evitar salir el chillido debsu meñique mutilado. "Que haremos hoy Yoh?" Pregunto alsando la voz sobre el oiano aunque realmente no era necesario. Tomo la taza de Te de la mesita y se sento sobre ella cruzando las piernas luchando un komento por no perder el balance antes de acomodarbsu veatido corto como si posase para un retrato. "De que es?"

Siguio tocando mientras la escuchaba atentamente, incluso el golpe que seguro se metió la chica.

- ¿Que quieres hacer?- regreso la pregunta en otra pregunta, aun tenia a un sujeto en el sótano esperando a que hicieran algo, pero aun no le decía a la mas baja . - Es veneno- se burlo sin el tono adecuado para detenerse y mirarla ahí sentada en un vestido oscuro, solo la miro sin decir nada y se levanto a buscar entre los estantes un libro - Es té de manzanilla y perejil- le contesto

-Conocí a un hombre ayer, que es alérgico al perejil- comenzó a contarle mientras abría un libro - y con miedo a las arañas- agrego- tiene 47 años ¿quieres saber algo mas de él?- Sabía que Rene gustaba de saber algo de las personas que dañaba, pero a él le gustaba jugar con esa información, aveces.

Aun que su vos era monotona y su rostro de igual manera algo dentro de el se entretenía.

Rene tomo una respiracion honda acercando la taza de Te a su naris para absorber su aroma. "Huele bien.." Respondio alsando una ceja ante la poca informacion que levanto curiosidad en su mirada. "Cuentame, que le pasa a este señor cuanto toma perejil?" Pregunto sin aber tomado un sorbo, debatiendo si deberia guardarlo para esa cierta persona. Se perdio un momento en su cabeza y lentamente su boxa tomo una sonrisa perversa y torcida, se reflejaba de sus ojos todo lo que imaginaba hacerle al hombre con aracnofobia.

Se pregunto quien era, como lucia. Que otras cosas lo aterrorizaban. Que tan blanda era su carne, cuanto gritaria al ver su sangre derramarse. Sintio una fasinacion hacia el sujeto del cual aun mo sabia ni el nombre.
-Dime Yoh, puefo conocer a tu nuevo amigo?- Su mirada era perdida al hacer eata pregunta y su voz temblo un poco dejando salir su emocion havia una posible victima nueva.

-Se hincha y tiene problemas para respirar, ayer le he dado por accidente - si claro, Yoh nunca cometía esos errores- pan de perejil y eso ha pasado.- contó para seguir buscando algo en el libro que tenía

-No, aun no, primero hay que organizar tu presentación con él, y esas cosas - explico cerrando y acercandose a el escritorio cerca, abriendo una caja sancando una pecera con tarantulas - Esta es mi invitación- explico mientras le presentaba a los aracnidos a la perversa chica - Su nombre es Kaito Yagami, y creo que lo conoces- comento dudando un poco - Estropeo una de tus carnes asadas una ves, y no volviste a ver a cierto niño- le informo por si la otra no recordaba.

-Me he puesto a pensar en que cosas de Peregil podriamos preparar, por eso he hecho el té y mas cosas.-

La sonrisa de Rene desaparecio y una vil mueca de disgusto atraveso su rostro volviendo sus ojos frios. -Si lo volvi a ver...- Lo corrige con una voz fria. -Seguro te mencione que tueve que vender carne tierna por una semana...El hijo de puta lo dejo en la partr trasera de la carniceria, tuve que meterlo rapido antes de que los demas niños vieran, mi carnicero lo vio y bueno... penso que yo lo hqbia traido...- Un gruñido se formaba en su garganta como si estuviera por estayar y gritar en rabia. No lo hizo solo miro a Yoh y sus tarantulas, la taza de te que tenia en su mano y tomo un sorbo. -Le voy a regresar el favor...- Su sonrisa habia vuelto y el gruñido se habia disipado.
-En sierta parte de Africa Yoh hay cierta especie de araña que entra en el cuerpo de su victima. Vive entre el musculo y la piel por lo que puedes ver su forma caminar bajo la piel, hasta quenel huesped muere de infecion o la araña se come algo importante... cuanto crees tardar en traerme algunas???-

Escucho a la otra, y bueno, una persona normal se asustaria o diria un "lo siento" - Que mala fuiste al venderlo, creí que ellos te importaban- comento para tapar las arañas una vez mas y caminar por ahí, sus pies solo hacían ese sonido que se debe al estar descalzos.

-No lo se, exagerando una semana, puedo decirle a mi editor que quiero conocerla para escribir algo de ellas- comento pensando en el pretexto para pedirlas - pero si hago eso tendras que esperar a que escriba antes de hacerle algo, eso te dara un mes para tenerlo aun con vida- le medio explico para no meterse en problemas después. - Aunque...si están en algun zoologico aquí te las puedo dar hoy en la noche- agrego, pero no creía que fuera así.

- O podrías pensar otra cosa- por que seguro no era la unica idea en la cabeza de su amiga.

-Él esta en el hospital ahora, me he disculpado con él por lo que paso, y a vista de todos, si muere, sería cosa de algún loco o loca que se molesto por que me hizo salir de casa- no era novedad para Rene que Yoh culpara a sus fans locos de las cosas, por que entre algo, era cierto que varios si hacían algunas de las cosas que el pelinegro narraba.

Rene refunfuño en voz baja al escuchar que tomaria tanto tiempo. -Bueno podemos hacer algo mas... supongo...- Sonrio. -Sabes tiene rato que no experimentamos, y sinlo traemos y solo jugamos un rato? Si tengo algunas cosillas que quiero hacer...- Dijo tomando otro sorbo de te. -Esta muy rico el te por cierto... mmm que te parece si lo amarramos a cuatro esquinas, le arrancamos una uña a la vez... imagina Yoh su tierna carne en vivo sangrando donde solia estar su uña... y las caras que hara cuanda atravescamos esa carne tierna con una aguja, desoues un clavo... para al ginal cortale el dedo, cocinarlo frente a el y hacerlo comerlo...- Su mirada estaba perdida en un mundo de fantasias en la que vivia feliz. -Podriamos pelarle la piel con un pelapapas, y sazonarlo con un poco de saly limon, me traigo unas cuantas ratas de laboratorio para que trabajen por nosotros cuando no estemos... Yo digo que un mez... y luuego regresarle el favor, un bate de beisbol con aceitr de automovil decorado con vidrios rotos, aver si le gusta que le hagan comonle hizo al niño...- Su mente regreso repentinamente a el comentario que Yoh le habia hecho sobr la carne. -De hecho Yoh, recuerdas ese kilo de asada qie nos comimos el Viernes despues de tu firma de autografos? Esa era el...-

Yoh se puso a anotar las ideas locas de su amiga, ¿por que? por que eran buenas, mal dichas, pero si él podía darles sentido podría escribirlas.

Anoto cada una con cuidado, hasta que la otra pareció volver a la tierra, y el comentario le hizo soltar la pluma, y el cuaderno se lo lanzo a la otra a la cabeza, comenzo a caminar por la habitación, pues YOh no era de los que gritaban, alcanzo otro libro, que era curiosamente la divina comedia "el cielo" y se lo lanzo a la chica.

La maldad era ella. se dejo caer al suelo a hacer un drama silencioso, le había hecho comer a ese niño.

-¿por lo menos lavaste bien esa carne?- tenia que preguntar...

Rene esquivo la libreta pero la Divina Comedia le dio tan fuerte que perdio el balanse. La mesilla sobre la cual estaba sentada tambaleo y Rene callo hacia atras. De alguna manera logro mantener la taza equilibradanpara que el te no se callera y la taza no se rompiera, Yoh era especial con su porcelana.
-Oshe pero que?- Se pregunto unos segundo porque el se habiabpuesto tan agresivo, luego capto que lo que habia hecho estaba moralmente incorrecto para muchos. -Ah ya, bueno si estaba bien lavada... supongo y bien cocinada... porque? Te supo rara?- Pregunto con miedo de que su carne asada no hubiera sido de su gusto. Luego recordo que su carne asada era genial y seble paso. -Oye Yoh en la tarde que alimente a los niños quieres salir a un antro? Tengo ganas de torturar a un extraño en un baño maloliente...-

se quedo acostado hecho bolita en el suelo de madera - Me has hecho comer a una persona...que asco- siguió quejándose- hay un ser humano en mi ahora- siguió quejándose al borde de llorar - Que horror- se quedo en silencio a sufrir solo en su cabeza, escucho la petición- Sabes que odio el ruido de esos lugares. Seducelo y tráelo a morir y ya- comento, pues era muy raro que él saliera de la comodidad de su casa y mas por un lugar con tanto ruido.

No quería decirle aun a la chica que ya tenía a alguien en su sotano y menos ahora que le dijo eso...