Issues (Ilya)

Hoy fue uno de esos días en que tuve que visitar a mi madre. Honestamente no es nada agradable, pero mi hermano y su padre no son tan nefastos como ella, no puedo decir que me la pasé tan mal. Sin embargo, luego de un rato ella comenzó con sus comentarios y a mencionar cosas sobre mi padre, y realmente es cuando yo pierdo un poco esa tolerancia que le tengo. Pero no quiero crear un ambiente incómodo, más del que ella se encarga de formar, por eso le dije que tenía que trabajar y me despedí de ellos luego de unas horas.
Cuando salí de su casa, le envié un mensaje a Hannu. Ya es casi una costumbre. A veces son solo caritas, o “ten un lindo día”, entre otros textos cortos pero que no ocultan el cariño que siento por él. Creo que las cosas van bien entre nosotros, a pesar de que él todavía no se siente listo, no soy alguien impaciente.
-Qué hay -llegué a la cafetería de uno de mis amigos y me senté en la barra. Pedí un café y algo dulce para acompañarlo, comí con mi madre pero muy poco, ella tiene tanta habilidad para eso como para cuidar niños- hola, pequeño, ¿cómo estás? -saludé a Ilya de rápido al verlo ocupado, y mientras tomaba el café, me puse a platicar con el dueño y nos desviamos hacia temas de hace muchos años, me gusta mucho frecuentar este lugar, pero, últimamente me siento un poco incómodo al hacerlo. El primer día que vi al exnovio de Hannu aquí, me sentí molesto, pero no dije nada hasta unas visitas después, aunque solo pregunté si habían contratado a alguien y ya el dueño me contó que estaba aquí gracias a Ilya. Pero afortunadamente hoy no está, supongo que salió antes y me alegro por eso. No puedo evitar cierto desagrado hacia él, a pesar de no actuar imprudente, eso no quiere decir que pueda ignorar por completo ese hecho.
-Hey, ¿ese es amigo tuyo? -la noche cayó sin darnos cuenta, tuve que consumir otro café y una bebida para quedarme y no verme tan mal.
-Lleva ahí un rato, ¿cierto? -asentí y de nuevo miramos afuera al tipo que estaba al otro lado de la acera. Hace un momento se vio muy entusiasmado al despedirse y agradecerle a Ilya- creo que lo está esperando -el dueño es mayor que yo, creo que por eso siente esa necesidad por cuidar mucho a sus empleados, y con ese chico al ser el menor es aún más precavido.
Llegó la hora de cerrar y me hicieron salir por la parte trasera. Les ayudé a recoger ya que me encontraba allí, y como salí antes que ellos, decidí esperar al pequeño, además le prometi al jefe que echaría un ojo.
-Ilya -luego de unos cinco minutos le llamé y apagué el cigarro que estaba fumando- ¿por dónde te vas? Ya es algo tarde -le sonreí- ¿por qué no nos vamos juntos? También debo tomar el metro -comenzamos a caminar hacia la acera principal. El tipo no dudó y se acerco, y le regalé una sonrisa cuando me saludó, aunque la suya fue muy falsa.

Saki:

En tan poco tiempo me he acostumbrado a la presencia de Min en el trabajo, de alguna manera se ha convertido en mi mejor amigo, él sabe mi secreto y lo ha guardado, por eso he aprendido a tenerle confianza. La verdad es que al principio no me agradaba mucho, pero solo basta conocerlo un poco mejor. A veces es un poco egoísta, pero trato de ayudarlo a cambiar eso. Por eso ahora que ha tenido día libre, el lugar se siente un poco diferente, me he acostumbrado a su presencia.
Me despido de un cliente con una sonrisa, ha tomado solo un café y lo ha tomado muy lento, seguro ya estaba frío para cuando se ha ido, pero me ha dejado una propina muy grande, incluso es mayor que el pago por lo que consumió.

Sigo con el trabajo durante el día, lo que menos me gusta es limpiar las mesas, a veces no entiendo como comen las personas para dejar tal desastre. Llevo unos platos a la cocina y regreso.
-¡Saki!- exclamo emocionado al verlo y me he acercado corriendo hasta estar a su lado. No he podido ocultar mi emoción, seguro que Min se burlaría de mi si estuviera aquí -Bien, ¿y tú?- me gustaría quedarme a platicar con él, conocerlo un poquito más, pero tengo que seguir trabajando y la mirada de mi jefe me lo confirma -voy a seguir con lo mío- comento un poco apenado y me dirijo a la mesa que no he terminado de limpiar. Atiendo a los clientes que entran y me toca atenderlos, pareciera que ahora que Saki ha llegado no puedo tener ni un momento para descansar, eso me pone un poco triste.
Me acerco a la barra para tomar un bebida que han pedido en una mesa y saki me hace una pregunta y miro a donde dice.
Saki es na persona muy amable, se ha quedado a ayudarnos, pero ni siquiera ahora que estamos cerrando tengo la oportunidad de hablar con él. Cuando termino con lo que me corresponde me voy a cambiar, cuando salgo veo que Saki ya no está, ni siquiera me pude despedir.
Pero al salir lo veo a justamente a él, y vuelvo a sonreir cuando me habla.
-Pensé que te habías ido- su pregunta me toma por sorpresa, y luego su sugerencia de ir juntos, mi sonrisa no podría ser más grande -¿Lo dices en serio?- no puedo ocultar mi entusiasmo -bueno, si, yo tomo el metro en la estación que está cerca- le explico.

Una persona se nos ha acercado y lo miro por un momento.
-Oh, es usted- digo al reconocer al hombre de la mañana -ya cerramos, ¿necesitaba algo?- le pregunto amable.
-¿Ya vas a casa?- me pregunta, y me confunde un poco.
-Si, lo siento, pero puede venir el día de mañana- ¿Será que le ha gustado tanto el café? tal vez por eso pagó tanto.
-¿Te irás solo?- niego con la cabeza -¿te vas con él? -señala a Saki y yo asiento. Él hombre parece un poco nervioso -ah, es que he notado que tomamos la misma ruta todos los días, pensé que podíamos ir juntos, pero tal vez otro día. Adíos- el hombre toca mi cabeza y sin dar mucha oportunidad se comienza a alejar.
-Vaya, que señor tan amable- comento a Saki mientras miro al hombre alejarse -¿Nos vamos?- tomamos nuestra ruta hacia el subterráneo, pero me detengo y miro hacia atrás, tengo una sensación rara -Juraría que había alguien atrás- comento cuando retomamos el camino.

uniforme:

Ilya:

El pequeño siempre trae una sonrisa en su cara, supongo que por eso algunas personas les gusta venir aquí. Es bastante tierno y muy amable.
-Muy bien, gracias -aunque no tuve mucho tiempo de platicar con él, parece que hay más clientes de lo usual- anda, que sino el jefe comenzará a molestar -lo ultimo lo susurré y me reí. Me gustan las personas positivas como él, siento que a aquellos que han tenido un mal día, siempre les sienta bien ver la cara de alguien así.
No sé porqué le impresiona tanto que nos vayamos juntos, supongo que porque tendrá  unos minutos que salí.
-Quise esperarte, como creo que tomamos el mismo camino pensé que era buena idea -le di una palmadita en el hombro y comenzamos a caminar- ¿cómo iba a no serlo? -me reí por la manera en que reaccionó- ¿te sientes muy cansado? Hubo bastantes clientes -lo dije con un poco de asombro. No son muchas personas trabajando allí, y sin embargo están muy bien organizados.
El hombre se acercó a nosotros apenas nos vio y le saludé con una sonrisa, pero claro que me ha ignorado porque toda su atención está en Ilya. Ha sido muy directo con su pregunta, y el pequeño parece que no entiende sus intenciones, porque incluso le ha dicho que puede volver mañana y preguntado si necesita algo. Y wow, ha notado que toman el mismo camino. Yo lo deduje porque es la estación más cercana, pero ese tipo seguro que sí lo ha visto irse algunas veces. Me alegro de haber estado cuando por fin se animó a acercarse. No quiero pensar tan mal de él, puede que en serio sea una buena persona y solo se sienta emocionado por hablar un poco más con Ilya, pero también parece un acosador.
-Sí -miré al hombre alejarse y volví la mirada a Ilya con una sonrisa- claro. Entonces, ¿cómo has ido en la escuela? Eres genial, pequeño, no debe ser fácil hacer ambas cosas -mientras vamos platicando él menciona que alguien nos sigue, y nos detenemos un momento para mirar atrás, y nuevamente retomar nuestro camino- creo que mejor tomamos otro camino, ¿o tienes mucha prisa por llegar? Aunque es por nuestra seguridad, por las dudas -al final nos desviamos, y le dije que pasáramos a un super de 24 horas a comprar- oye, Ilya, ¿te llevas bien con los clientes? -lo pregunté de la manera más amable, no quiero asustarlo, pero este hombre no está actuando como alguien simplemente amigable- eres muy amigable, ¿siempre te encuentras con clientes a la salida? Que te saludan y esas cosas -tomé unos dulces de menta para hacer algo de tiempo- toma lo que quieras, al final te hice venir acá -pagamos y salimos luego de algunos minutos, el hombre no se ve, pero todavía no puedo bajar la guardia.

Levanto mis brazos como para presumir mis músculos.
-No estoy cansado- río luego de mi penoso gesto, pero no me siento cansado, aunque creo que no suelo notarlo hasta que llego a casa y me acuesto, pero mi trabajo no es tan pesado, solo llevo platos de un lado a otro, así que no lo considero un trabajo pesado.
-Pues no soy tan bueno en la escuela, es que todavía tengo muchos problemas con el idioma- rasco mi cabeza y río un poco nervioso por mi situación académica. Hasta ahora no he reprobado, pero he sacado calificaciones muy bajas excepto en inglés.
-¿En serio?- me muestro un poco alarmado cuando dice lo de nuestra seguridad, ¿será que alguien nos quiere asaltar? -Si, tomemos otro camino- comento mirando hacia atrás de nuevo.

-Es mi trabajo ser amable- le explico porque no entiendo bien porque pregunta eso -Pues si son clientes frecuentes es porque viven por la zona, y si, al salir, si nos encontramos nos saludamos- camino todo el tiempo cerca de él, pero no intento tomar nada, no quiero gastar mi dinero en estas cosas, sé que no es un gasto excesivo, pero prefiero ahorrar cada centavo que pueda -No gracias, estoy bien así- respondo amable a su oferta, pero no necesito un dulce como recompensa por esto. Ya estoy pasando más tiempo a su lado, y creo que con eso me basta. Lo observo mientras le cobran, el es muy apuesto, tiene una mirada especial, no por el color o algo así, por la forma en que mira, se siente como si fuera alguien muy maduro.
Ha pagado y me ha tomado un par de segundos salir de mi pequeño trance porque alguien me empuja un poco para que lo deje pasar a la caja y comienzo a caminar con la cara toda roja de la vergüenza.

Salimos y no puedo evitar mirar a todos lados tratando de ver si hay alguien sospechoso, pero seguro que por la manera en que mi cabeza gira de un lado a otro, yo soy el más sospechoso en este momento.
-por cierto ¿tú como has estado?- le pregunto porque él me ha hecho platica, pero yo solo me he limitado a responder, creo que he sido un poco grosero.

-Ya veo. Te enseñaría, pero siendo honestos, la escuela tampoco fue lo mío -me burlé de mí mismo. Yo siempre fui muy perezoso, y pensar no me gustaba mucho, siempre se me dio más lo práctico. Las cosas que he aprendido es por llevarlas a cabo, eso de la teoría no me sirve mucho- pero ya te acostumbraras con el tiempo. En sí ya es bastante sorprendente que puedas hablar otro idioma aparte del tuyo, eres increíble, Ilya -yo con esfuerzo sé el mío, y este chico a pesar de todo se ve que se esfuerza. No debe ser fácil llegar a un país diferente y tener que adaptarte a su cultura, idioma y todo eso. Yo nunca he viajado, pero creo que debe ser complicado.
Definitivamente no lo notó. No quiero alarmarlo a lo tonto, pero no siempre tendrá alguien que lo acompañe, debe mantenerse alerta por si acaso.
-Oh, ya veo. Ese hombre de hace un rato, ¿no te pareció un poco raro? -toqué el tema de poco a poco, porque aunque ahora estoy seguro que no juzgue injustamente, me sienta mal al plantearselo como un acosador- hay personas que podrían malinterpretar tu amabilidad -luego de salir del super lo noté un poco nervioso- ¿yo? Pues bien. Trabajando de aquí allá, saliendo con amigos, lo de siempre -unas cuadras más adelante me detuve un momento y tomé su brazo para que se parara también- lo siento, eso que dije allí dentro pudo sonar muy mal -deshice mi agarre y solté mi cabello para comenzar a jugar con la liga- es que, siendo honestos, él llevaba mucho rato allí afuera, al jefe y a mí nos pareció un poco extraño -le miré y sonreí. Estoy hablando tranquilamente. No sé si él está acostumbrado a lidiar con acosadores- ¿te ha pasado antes algo así? No sé sus intenciones del hombre, pero deberías tener cuidado, ¿de acuerdo? -llevé mi mano a su cabeza e hice una caricia- puede que no sea mala persona, tal vez me estoy preocupando demasiado -ahora reí nervioso. Supuestamente no quería asustarlo pero terminé diciendo lo que pienso. Pero es mejor así, porque él podrá estar más alerta la próxima vez que lo espere fuera- pero, mi intención no es asustarte, solo creo que deberías mantenerte alerta. Sabes, incluso nosotros los hombres podemos sufrir un asalto de ese tipo. Recuerdo que una vez me encontraba parado en un parque esperando un amigo, eran pasadas las once de la noche. Llevaba el cabello suelto y de repente un tipo me tomó de la cintura y me dijo algo como… ¿esperas a alguien, linda? Entonces me giré rápido y lo miré extraño -imité el movimiento e incluso la expresión- al final quien salió más sorprendido fue él -comencé a reír. A mí no me molesta lidiar con esas cosas, porque si lo requiere, tengo la fuerza para defenderme- pero no es algo que quieras experimentar. Siempre es mejor mantenerte alerta y si tienes alguien que te acompañe, es mejor. No me gustaría que te pasara algo -no lo considero débil, es más bien por su carácter que sé alguien podría aprovecharse de él.

Me siento apenado de que diga esas cosas, no es para tanto, no es como que sea un gran logro lo que yo hago, trabajar y estudiar, y saber más de un idioma. Mi familia no era adinerada, pero mamá tenía muy buena educación y buscó que yo recibiera un poco de eso.
-es porque desde más pequeño lo he aprendido, por mis primos- le explico para que no piense que soy un genio o algo por el estilo.

Me quedo pensativo por un momento, y pienso en esa persona que menciona.
-Es una persona amable- comento por lo de que se iba a ofrecer a acompañarme, no es algo que cualquiera haría así por alguien que apenas conoce color=#ffffff]-¿Mal interpretar mi amabilidad? ¿por qué lo dices?-[/color] no entiendo bien su comentario, porque tengo que ser amable por el trabajo, no quiero ser un mal empleado.
-Ah que bien, suena a que te has divertido- comento un poquito envidioso, porque sé que al ser menor, yo no puedo pasar tanto tiempo con él y salir a los lugares que sale con otras personas.
-¿Lo dices en serio? yo no sabía- me siento confundido, yo no había notado eso, entonces creo que si es un poco raro -creo que tal vez si es un poco extraño- si me han pasado cosas así. Con esa pregunta suya me pongo un poco nervioso, recuerdo esos días en la escuela donde era víctima del acoso de tantos, yo era como la diversión del grupo -Si, lo tendré- aunque digo eso, sigo un poco preocupado, porque en esos casos, yo soy de las personas que se paralizan. Niego con la cabeza cuando dice que se está preocupando demasiado -Está bien, si no me dijeras, yo… no lo habría notado- suspiro un poco desanimado por lo tonto que me siento, pero su mano tocando mi cabeza me hace sentir un poco tranquilo. Aunque aun me siento preocupado, me río un poco por la historia que me cuenta, parece absurdo, él es muy masculino, no puedo creer que lo confundirán solo por el cabello.
-Nunca me ha pasado algo así, tal vez debería cortar mi cabello- no me lo quiero cortar porque a mamá le gustaba así, pero no quiero tener que pasar por algo similar a lo de antes -Si, Min suele acompañarme, vivimos en la misma zona, pero hoy tenía descanso- ¿debería contarle a Min? no quiero que se preocupe por mi, o que le vaya a decir algo a ese señor, tal vez solo estoy comenzando a exagerar por mis viejos traumas, tal vez el señor realmente solo es una persona amable. Pero ahora por más que trate de pensar eso, solo lo siento como algo muy extraño, hace un rato no lo notaba, pero ahora no puedo normalizar ese comportamiento.

Rasqué mi cabeza y de nuevo mis manos comenzaron a jugar con las puntas de mi cabello. Como pensé, ni siquiera se le ocurrió que eso pudiera suceder. Y ahora ya no sé cómo explicarlo sin parecer exagerado.
-Si, ¿tú no sales mucho con tus amigos? -desvié el tema para no tener que exponer a ese tipo, que por cómo ha reaccionado Ilya, ya hasta pienso lo mal que le he juzgado y me siento culpable.

Su expresión luce confundida, y solté un suspiro. Al final hice que pensara mal de esa persona. Pero pensándolo bien, es lomejor. No importa si las intenciones de ese hombre no son malas, el modo en que se comporta es muy sospechoso y si llegase a estar a solas con Ilya, tal vez lo haría sentir incómodo. No parece molestarse con las muestras de afecto, yo mismo he acariciado su cabeza también, pero, nosotros nos vemos algunas veces por su trabajo y charlamos un poco, digamos que lo conozco, y él a mí.
-Lo siento por soltarlo de repente -reí nervioso, pero tomé un poco de aire y me tranquilicé. Es eso lo que debo transmitirle, tampoco quiero que se vuelva paranoico al respecto- es porque eres una buena persona, pequeño. Tal vez aquel hombre no quiere algo malo y yo soy un poco… ¿sobreprotector, tal vez? -me reí- pero nunca está de más ser precavido. Además, él debe ser más discreto -puede que sea ese tipo de persona que no sabe cómo transmitir lo que siente a otros o es malo socializando- ¿cortarlo? ¿Ya no te gusta de ese modo? Pero se ve muy bien tu cabello -hice una expresión triste- eso no tiene nada que ver, no hay que fomentar los  estereotipos. Es tu carácter lo que probablemente le atrajo, tienes una linda personalidad -es un cliente frecuente, claro que si Ilya hubiese sido grosero o frío, dudo que ese hombre se le habría acercado con tanta confianza.
La sonrisa que llevaba se hizo rígida, y sentí ese disgusto por todo el cuerpo. Es una sensación un tanto injusta, no me compete elegir a los amigos de Ilya, ni siquiera tengo que ver con el pasado de Hannu, y ponerme celoso de las personas que estuvieron en su vida solo hará que lo nuestro fracase. Pero no me mentiré, ese chico no me agrada. No lo odio, pero saber que está demasiado cerca me hace sentir inseguro.
-El chico nuevo -sonreí de nuevo. No quiero transmitir mis preocupaciones a Ilya- me alegro que tengas con quién caminar de regreso a casa, y también me hace sentir aliviado que no lo hagas solo -me preocupa que algo pudiera pasarle, siento que es la clase de persona de la cuál los demás pueden tomar ventaja- amm, ¿entonces te llevas bien con ese chico? También fueron juntos a la fiesta -no debería preguntar, saber sobre el ex novio de Hannu no me ayudará a sentirme más tranquilo. O tal vez sí. Si lo conociera un poco mejor no repetiría sus errores. A quién engaño, los sentimientos de Hannu no dependen de eso.

Niego con la cabeza, no es algo de lo que me sienta orgulloso, pero no he podido hacer amigos en la escuela, creo que me da miedo que las cosas se repitan, mucho más ahora que sé que soy… que a mi me gustan… no, yo no quiero volver a perder a un amigo por algo como eso, prefiero quedarme solo con las pocas personas que ya tengo.
-Es prefiero dedicar mi tiempo a trabajar- supongo que tengo más amistades en el trabajo, me llevo bien con todos los demás empleados, aunque a veces me molestan, pero se siente muy diferente a las maneras en que me molestaban antes, ellos solo parece que juegan igual que Min, a él le encanta hacerme enfadar, parece un gusto que todos los de la cafeteria tienen.
-¿Sobreprotector?- no se porque siento que mi corazón comienza a latir más rápido, porque eso que dijo significa que le importo, ¿verdad? -si, tendré cuidado- digo con más entusiasmo del que debería, pero es que aun sigo emocionado de que él se preocupe por mi -¿A ti te gusta así?- bajo la mirada, me siento tan avergonzado ahora. Creo que mi corazón va a salir disparado de mi pecho -gra gracias- nunca me ha gustado que usen esa palabra para describirme, ser lindo, o tener linda personalidad, es una palabra que nunca me ha gustado y ahora estoy emocionado porque él me ha dicho eso.
-¡Si! y no…- me río un poco apenado -Nos conocimos en esa fiesta, es amigo de mi primo, viven juntos. La verdad, aquí entre nos, me caía muy mal al comienzo, pero es buena persona- sonrío un poco, porque me ha gustado poder conocer a Min, pese a como es, y que solemos siempre llevarnos un poco raro, lo aprecio mucho y le he tomado confianza -A su manera siempre termina cuidándome y yo… amm creo que nunca he hecho nada por él, debería regalarle algo. Tú lo viste, ¿que crees que le pueda gustar? seguro algo caro, pero no tengo tanto dinero- me cruzo de brazos pensativo, no me había dado cuenta de lo mucho que ha hecho Min por mi, me siento en deuda y quiera hacer algo para él, pero no quiero hacer algo de lo que se pueda burlar de mi -Saki, a ti… ¿a ti que cosas te gusta que te regalen?- vuelvo a evitar su mirada, me he desviado un poco, Saki es también mi amigo, y él es muy agradable, siempre me hace sentir bien. No es que piense que nosotros podríamos tener algo, no, eso es imposible, tal vez me gusta, pero sé que no tengo oportunidad, por eso me gusta tanto ser su amigo, porque al menos puedo estar un poquito cerca de él.

Lo mire con asombro y luego sonreí. Me parece que para su edad es muy responsable y eso habla muy bien de él.
-Eso es genial -dije con honestidad- pero tampoco es malo divertirse de vez en cuándo. Un día deberíamos ir a dar una vuelta, claro, si te parece bien -el pequeño me cae muy bien, y no sería malo el ser más cercanos. Es un chico honesto y es fácil llevarse con él, y me gusta mucho este tipo de persona. Creo que no hay algún tipo que me desagrade realmente, todos tienen su lado bueno.
Asentí, pero él no parece enojado y eso me alivia. No quiero verme igual de intenso que ese señor.
-Bien bien -al menos lo tomó a bien. Hay personas que podrían decir que no me meta en sus asuntos, y eso me dolería un poco, pero bien merecido lo tendría- ¿mmm? -no comprendí bien al principio- oh, ¡tu cabello! Sí, me encanta el cabello largo, creo que se nota -me reí y señalé mi cabello- y a ti te queda muy bien -no me sorprende que le agrade mi halago. Lo conozco un poco, y además el jefe dice que es una buena persona y buen trabajador, creo que es su consentido, tal vez porque es el menor de todos y los demás también le tienen mucha estima.

Me reí cuando dijo que le caía mal antes ese chico. Yo no lo he tratado además de ese día, tampoco quise preguntarle al jefe por cómo es porque seguro saca sus conclusiones y no, prefiero evitarlo. Y a Hannu… a él solo le pregunté un par de veces, pero nada para conocerlo a fondo. Seguro termino comparando y eso es malo para nuestro comienzo.
-Oh, es bueno eso -buena persona… supongo que sí, no lo sé, no me lo creo mucho. Pero soy consciente que mi juicio sobre él es imparcial, influye mucho la manera en que Hannu se pone cuando habla sobre él o cómo reaccionó ese día. Una buena persona no daña a quien quiere, pero a fin de cuentas es algo que la mayoría hace- ¿yo? -me reí ahora de manera incómoda. ¿Cómo terminó esto así? Pero ver su determinación me hace suspirar y soltar una sonrisa. Haré de cuenta como que no le conozco, y solo se trata del amigo de mi amigo. Sí, tengo que ser una persona madura- mmm pues no lo sé -pero es muy difícil. Viéndolo bien, parece un tipo superficial- dices que cuida de ti y es amable contigo, yo creo que estará bien con cualquier cosa que le regales, son amigos, ¿no? -yo pienso que eso no es necesario, pero si Ilya quiere, creo que sería un lindo detalle- ¿a mí? -no creo que ese chico y yo nos parezcamos- amm, ¿cualquier cosa? -le sonreí- lo siento, lo siento, es que no se me dan mucho esas cosas y no me importan realmente. Pero, uhm… los detalles son lindos. A veces no importa qué tan grande o caro sea, incluso si es algún paseo lo considero lindo. Ya sabes lo que dicen, la intención es lo que cuenta -me encogí de hombros, no soy de ayuda para lo que quiere- qué te parece… ¿qué te parece invitarlo a salir a algún lado? Sabes lo que le gusta, ¿no? Y te servirá también para salir un poco de la rutina. Salir con los amigos es mucho más placentero que los regalos en físico -no sé si funcionará con ese chico, pero incluso la mayoría prefiere pasar tiempo con quienes quiere. Eso me recuerda a Aaren, es un poquito raro y creo que él podría costearse cualquier cosa, aún así se le ve feliz cuando salimos.

-¡Si!- digo con entusiasmo cuando dice que deberías dar una vuelta, no he podido controlar mi emoción porque realmente me gustaría mucho hacer eso --Digo, si, me gustaría- lo bueno que estos días hacen frío y lo rojo de mis mejillas se puede justificar con eso, pero me siento tan apenado que de nuevo bajo la mirada.

Me río por lo que dice del cabello y asiento aceptando que es obvio que le gusta el cabello largo.
-Pero se te ve muy bien- admito y juego un poco con mi fleco tratando de acomodarlo detrás de mi oreja, pero como siempre regresa a mismo lugar -Gracias- él me hace sentir bien conmigo mismo, no me importa si me dice que soy lindo, si lo dice él, me gusta.
Saki no me ayuda mucho, porque no dice nada especifico.
-Si, somos amigos- pero aunque lo digo no se bien si eso aplica con Min, es una persona muy diferente, nunca había conocido a nadie como él -Entonces te gustan los paseos- ¿pero a donde podría invitarlo? yo casi no conozco la ciudad, seguro que no podría hacer algo que lo pueda sorprender -Amm, a él no le gusta mucho ese tipo de cosas, no le gusta mucho caminar o salir a dar paseos- suspiro un poco resignado, pareciera que Min es una persona complicada de complacer -creo que con él sería mucho más fácil comprarle algo- revuelvo mi fleco un poco molesto -voy a terminar preguntándole que le gustaría- digo con resignación.
-Oye Saki, ¿tu quieres ser mi amigo?- mi voz tiembla un poco al preguntarle, me he puesto nervioso. Quiero saber que podemos ser amigos, eso me haría tan feliz, poder decir que somos amigos. Al menos con Saki puedo hablar, porque con Ilkin, ya no puedo, luego de lo que pasó me siento muy avergonzado, cada vez que me saluda, yo le respondo rápido y luego me voy a encerrar a la habitación de Min.

Me reí al ver su entusiasta respuesta y le revolví un poco su cabello.
-Jaja, perfecto. Amm, ¿qué clase de lugares te gustan? ¿O no eres quisquilloso con los sitios? -prefiero escuchar de sus gustos, yo no tengo problema en entrar donde sea. No es algo que vayamos a hacer de inmediato, pero sería lindo pasear. Imagino que ir a un parque de diversiones tal vez le agrade.
-Muchas gracias -me hace sentir feliz que diga eso sobre mi cabello. No soy muy vanidoso con mi forma de vestir o el resto de mi cuerpo, pero mi cabello, bueno, se nota que lo amo- el tuyo es suave -llevé mi mano y acaricié un mechón de la mitad hasta las puntas- oh, ya veo. Sí, me agradan -alejé mi mano y escuché lo que decía sobre su amigo. Siento como si tuviese que decir que él no me agrada mucho, pero el tema con Hannu no tiene que ver con Ilya- pero preguntarle directamente arruinaría la sorpresa, ¿no crees? -me burlé un poquito- ¿qué tal si le preguntas a alguien que lo conozca mejor? -suena como que es alguien muy delicado. Hannu no habla mucho de él, pero sí, luce como un chico selectivo. Conmigo no fue grosero, pero tampoco muy amable, y cuando lo he visto en la cafetería me ignora completamente.

Me fui pensando sobre el tema del chico, y Hannu. Este tiempo que lo he conocido hace que mi cariño por él crezca, y pensar en él me hace sonreír. Tal vez también deberia darle algún detalle, ya imagino la expresión que hará.
-¿Por qué preguntas eso? -el cambio de tema fue muy brusco- me refiero a que no es algo que debas preguntar, pequeño, ¿acaso no es obvia la respuesta? -le sonreí- claro que me gustaría -pero me sorprendió mucho. Me le quedé mirando, Ilya es lindo, y es tierno además. También siento que tiene un corazón muy puro, ¿a quién no le gustaría ser su amigo- seamos amigos entonces. Además, vamos a salir pronto. Estaba pensando… ¿te gustan los parques de diversiones? ¿Qué tal ir al mar a nadar? -me emociona la idea de salir. Me gusta conocer gente nueva, y al chico lo conozco desde hace un rato y es muy agradable.

-Cualquier lugar me gustaría- admito con la misma emoción, soy realmente una persona sencilla y lo que más disfruto es la compañía, y si se trata de Saki será mucho mejor, salir un día juntos, de solo pensarlo me siento emocionado y nervioso. Conocerlo más es algo que quiero hacer desde hace mucho, pero no había podido, solo lo he tratado un poco las veces que viene al trabajo.
Sonrío un poco tímido por lo que dice de mi cabello y bajo la mirada, si lo miro ahora a los ojos creo que mi corazón explotará por esta emoción. Saki me gusta mucho.
Me río cuando dice lo de que se arruinará la sorpresa, pero con Min no sé si sea buena idea. Somos amigos, pero ahora que lo pienso, no sé mucho sobre las cosas que le gustan, de las cosas que no le gustan si, porque siempre se está quejando de algo.
-supongo que podría preguntar - pienso inevitablemente en Ilkin y ello trae de nuevo el recuerdo del beso llevo mi mano hasta la altura de mi boca y sonrío, no sé porque siempre que me acuerdo aparece una sonrisa en mis labios -bueno, como sea… ya pensaré en algo- trato de sacar ese recuerdo de mi cabeza.

Dice que es obvia la respuesta y lo miro emocionado cuando dice que le gustaría. Hoy ha sido un día con mucha suerte para mi.
-¡Todo!- me río porque es obvio que eso no se podrá, pero quiero que hagamos todo lo que menciona y mucho más -Pero no sé nadar- nunca tomé clases de natación y tampoco iba a la playa con mis padres, alguna vez fuimos a algún lago porque a papá le gustaba pescar, pero íbamos a playas -El parque está bien- termino eligiendo, aunque no se si se gastará mucho dinero en eso, nunca les pido dinero a mis tíos, por eso trabajo y ahorro casi todo mi salario, pero asi que tengo algo ahorrado, pero no me gusta tocarlo mucho, pero creo que puedo hacer una excepción si se trata de Saki.

La estación está un poco llena, es la hora, todo el mundo sale del trabajo y va a casa. Entre el mar de gente nos metemos a uno de los vagones. Está muy apretado y termino haciéndome lo más pequeño posible en un rincón. Saki está frente a mi, muy cerca así que trato de mantenerme tranquilo, pero estoy muy nervioso. Él es mi amigo, pero me gusta, desde que sé como soy, me he comenzado a notar mucho más cuando una persona me gusta. Aunque es extraño, porque me sigue costando mucho hablar con niñas bonitas, cada vez que una llega a la cafetería me pongo muy nervioso, con los hombres no me pasa eso, pero si que ya me doy cuenta cuando uno me parece guapo y Saki es muy atractivo y en este momento al estar tan cerca me siento nervioso como cuando una chica linda se me acerca.

Al menos el tema de su amigo quedó cerrado. No quiero ser grosero pero es lo mejor, me siento demasiado curioso y no quiero involucrar a Ilya, o que el otro chico se entere. En ese aspecto lo hago un poco por orgullo, porque antes no temía confrontar a las exparejas de las personas con quienes salía. Creo que por eso me ocasioné muchos problemas y las cosas no funcionaron. Ahora intento contenerme, no es complicado porque el tipo tampoco busca conflicto. Pero si comienzo a ser demasiado curioso, puede que llegue a molestarlo y entonces las cosas pueden salir mal.
-Todo… eso es mucho -me reí- ah, podría enseñarte a nadar si quieres, pero si ya elegiste el parque entonces está bien, ¿vale? -tendré que ver mis días libres. Parecería una promesa al aire, pero yo no suelo ser así, me lo tomo muy en serio y además él se ve emocionado. De verdad no debe salir mucho como para sentirse así por algo tan sencillo- entonces, ¿qué te parece si intercambiamos números? -saqué mi celular y le di pedí su número, y marqué rápido para que también tuviera el mío.

Cuando llegamos al subterráneo había bastante gente. No me extraña, muchos regresan a casa a esta hora. Como pudimos nos escabullimos dentro del vagón y me quedé cerca del pequeño, siento como si se me fuese a perder entre tanta gente. Vamos muy apretados, y con ello noto que alguien quiere tomar ventaja de la situación y se coloca detrás de Ilya.
-Oye, amigo, muévete -le miré mal. No me gusta que las personas se aprovechen de otros por las circunstancias- lo siento, pero creo que es mejor si te quedas cerca de mí -no me gustaría que experimentara algo desagradable justo después de aquel acosador. Por eso le tomé de la mano para acercarlo más a mí y con mi brazo rodeé sus hombros- así nadie podrá empujarte o pegarse demasiado -le sonreí desde arriba y con la otra mano me sostuve del tubo. Un par de personas nos ven mal, y es que entonces capto que la situación puede malinterpretarse, pero… siempre es mejor un par de miradas prejuiciosas que una experiencia traumática.

Me río nervioso y juego con mis dedos, he sido muy obvio con mi emoción, debería controlarme, no quiero ser tan obvio.
-¿De verdad? bueno, tal vez después puedas enseñarme- digo para que en otra ocasión podamos hacer eso. Ohh, si me enseña a nadar entonces iríamos a la playa y entonces el usaría ropa para entrar en el agua, podría verlo sin camisa y con su cabello mojado. Mis pensamientos se están yendo mucho por algunas fantasias y comienzo a avergonzarme solo por culpa de mis propias fantasias.
Acepto lo de cambiar nuestros números, y saco mi celular para que lo hagamos. Esto es muy emocionante, voy a llamar a Min llegando a casa, tengo que contarle todo lo buena que ha sido esta noche. Guarde su número luego de que me marca.

Entre todo el gentío no me doy cuenta de muchas cosas, pero Saki le ha hablado a un tipo que estaba atrás de mi y luego pasa algo increíble, él me abraza. Estoy que muero de los nervios, me siento hasta un poco hipnotizado.
-Si, está bien- no me quejo para nada de tener que estar mas cerca de Saki.
En una de las siguientes estaciones, algunas personas bajan y otras entran y entre todo el alboroto me empujan algunas veces mis manos se aperran a Saki estrujando su ropa, me da pena hacerlo, pero creo que sería más penoso abrazarlo aunque ahora parecía una buena excusa para hacerlo, pero si así ya me estoy volviendo loco de los nervios no me imagino como me voy a poner si lo abrazo, ¡ayyyy! ¡pero tengo tantas ganas de hacerlo! debo mantener la calma, si, debo solo calmarme.
Se acerca la estación, en la que debo bajar, la verdad es que no quiero que esto acabe tan rápido, pero entonces me doy cuenta de algo un poco vergonzoso, poco a poco la gente se va bajando ya no estamos apretados y yo aun sigo cerca de él agarrándome de su ropa.
-¡Ah! ¡Lo siento mucho!- me disculpo demasiado avergonzado y me separo de él y me agarro del tubo.

Este chico es muy accesible. Creo que es malo en parte porque los demás se aprovechan de él, pero también es lindo, y no todas las personas deben ser tan intuitivas, está bien de ese modo siempre y cuando haya quién pueda cuidarle de cosas como esa. Supongo que no le hará sentir muy cómodo, a veces entre hombres nos sentimos con el deber de soportar y mostrarnos fuertes, pero él no parece prejuicioso al respecto, no se ha enojado conmigo por advertirle.
-Puedo enseñarte eso o cualquier otra cosa. Ya sabes,si alguna vez necesitas algo en lo que yo sea bueno, no dudes en pedirlo -le guiñé el ojo amistosamente y sonreí.

No me interesa mucho cómo me vea el resto, porque Ilya se ha portado extrañamente cooperador con esto y me hace tranquilizar. Tengo algunos amigos que no me dejarían hacer esto por ellos, a veces creo que quiero cuidar de mas y llego a incomodar, es una suerte que él no se sienta así. ¿Debería prguntalre? Mejor lo hago cuando bajemos.
Mientras avanzamos gente baja y sube, y el vagón se va haciendo más espacioso, incluso unos asientos quedan libres, Ilya debería sentarse porque por el trabajo debe venir cansado.
-No te preocupes, pequeño -lo miré y me reí, se puso nervioso, ¿será que así se comporta con todo el mundo? Bueno, sí, con las chicas del local suele ser tímido, hasta el jefe se ríe de eso- y acá bajas, ¿cierto? -caminé para salir al anden y le esperé una vez fuera. Tenía que bajarme en dos más adelante de aquí- ¿vives muy lejos a partir de aquí? Si quieres puedo acompañarte hasta tu casa -me siento responsable por él porque es menor de edad, aunque seguro está acostumbrado a viajar solo y de noche- por cierto, lo siento si me tomé demasiadas confianzas contigo allí dentro, espero no estés molesto conmigo -no suelo diculparme por cosas así, pero desde que estoy con Hannu he aprendido que las personas le dan su propia interpretación a las cosas- oye, ¿siempre eres tan tímido? No tienes que avergonzarte, sabes. Recuerda que somos amigos -le di una palmadita en el hombro. ¿Con sus amigos también se comportara así? Pensé que él era bueno haciendo amigos pero es bastante tímido. Raro, porque a la vez es muy transparente.