Minjah

Recuerdo del primer mensaje :

-Naa, para nada, mi primo eligió la cosa mas ostentosa que había, pero a mi me gusta mas este y no, ni siquiera lo había pensado- comento con una mueca de cansancio de solo recordar a Dima cuando estábamos con lo del disfraz y dejando el arma descansara en mi espalda -Gracias- le digo con una sonrisa agradecido por sus palabras.

Él no conoce a Mia, ella es una persona muy amable, y seguro que se preguntará a donde he ido sin decirle nada. Pero en parte agradezco no tener que estar sentado con ellos. Si él se ha dado cuenta, tal vez iba a conseguir delatarme delante de ella y no quiero eso -Elijah- me presento cuando lo pregunta.
-Mmmm, ok- no sé si me agrada eso, obviooo no quiero que vaya a jugar con Mia, pero si van en serio definitivamente mis posibilidades son cero -Es mi amiga, claro que me preocupa- digo con la mirada baja.
Lo sigo de nuevo por el lugar, pero sigo tratando no perder de vista la mesa de Mia, y pongo aun mas atención cuando estamos en la mesa.
-La otra niña ya no está- comento un poco alarmado, ¿por que los dejó solos? solo me desanimo al verlos solos -Es tu amigo, no hablarías mal de él- suspiro por lo que me dice sobre ese “Ilkin” -Tal vez…- supongo debería darle el beneficio de la duda, pero ahora siento más celos que otra cosa.

-¿que? no ¡oye!- reclamo porque ha soltado mi cabello, ¿que le pasa? es demasiado confianzudo -como sea… aun si me veo mejor, no lo notará la persona que me gustaría lo notara- suspiro resignado y estiro mi mano para quitar la liga de mi cabello -un comando no iría a una misión con el cabello suelto para verse bien- comento ahora hablando del disfraz en si.

Ya que solo veo la espalda de sus amigos, no reconozco quienes son, pero parecen pareja, porque el otro le habla al oido al mas bajito. Cuando Saki me ve, me acerco mas decidido, al menos así ya no interrumpo.
-Pero debiste avisarme, me preocupé un poco- admito que me sentía nervioso por lo mucho que estaba tardando, no pensé que se fuera a encontrar con amigos en este lugar, pero creo que ha sido mi error no considerar esa posibilidad -¿en serio? eres tan despistado- solo bromeo, o creo que lo he hecho, sigo sin ser el mejor para esas cosas, pero él ya conoce mi sentido del humor y creo que comienza a entenderlo, porque lo que he dicho ha salido en un tono mucho más serio del que la mayoría lo dice.
Me giro cuando parece me presentará a sus conocidos.
-Oh, si… claro- contesto un poco distraído porque obviamente he reconocido a la persona que está junto al chico -¿como estás?- saludo a chico, y solo ignoro a Min -Claro, hola- digo sin nada de entusiasmo cuando me presenta al amigo… creo que hace mucho tiempo mi voz no tenía tal grado de frialdad al hablar a alguien. Ni debería reaccionar así, lo veo seguido en la facultad, pero desde que terminamos aquel proyecto juntos, no hemos vuelvo a intercambiar palabra, siempre es mas fácil ignorarlo y seguir concentrado en mis asuntos, pero ahora no puedo hacer eso porque es Saki quien nos presenta. Esté chico no es la persona por quien me dejó, ¿ahora está con alguien más? no me importa… ¿pero, por que está con él? supongo que cualquier persona está bien para él, menos yo. Bajo la mirada al suelo, no tengo ganas de verlo con otro de sus amantes. Siento nauseas y mi cabeza como si fuera a estallar.
-lindos trajes- no me sorprende ver a Min con un disfraz de este tipo, es muy obvio para sus gustos.

-Eso es porque trabajo en una cafetería, se lo que es tener que soportar a personas desagradables como clientes, por eso no quise ser una más de esas personas- le explico, porque a veces a mi me cuesta ser tolerante con algunas personas, y eso que seguro no trato ni la cuarta parte de las personas que él ha tenido que atender hoy.
-Solo el menor, se llama Dmitry. Andy también vino, aunque el ya salió hace unos años me parecer- comento pensando en mis primos. Acerco de nuevo la botella, esta vez de verdad estoy tratando de tomar lento.

Un escalofrío me recorre cuando se acerca a hablarme al oido y aunque es a alejado hago un intento de empujarlo.
-cállate- me quejo tallando mi oreja, creo que este tipo también disfruta de molestarme, ¿como es que atraigo a las personas así?
Sonrío porque a Saki le gusta mi disfraz, él es una persona tan genial que escuchar algo así de él se siente bastante bien.
Me río porque al final ellos solos se presentan, mis modales son pésimos, pero parece que se agradan y tal vez con Saki aquí, Min Yoo deje de molestarme. Miro al chico que recién llega, es amigo de Saki, así que le sonrío.
-Hola, bien gracias- pero aunque llegó un poco animado ahora parece muy serio -¿Oye estás bien? te ves pálido- comento un poco preocupado -toma asiento, y toma un poco de agua- empujo mi vaso para que pueda tomarle.

Ohh, así que trabaja. No da esa impresión, pero entonces tiene mucho sentido, tuvo empatia con el mesero.
-Trabajas, eh… qué bien -eso me puso a pensar si yo debería buscar un trabajo. Pero es imposible. No sé quién podría darle trabajo a alguien como yo, y la universidad apenas me deja tiempo para ver  a Asb.

Lo miré con atención, y puse una cara extraña cuando mencionó los nombres de sus familiares. Es algo pequeño el mundo, demasiado.
-Oh… -me reí por lo absurdo de todo esto. Pensar que el primo de Andy está enamorado de la novia de Ilkin, me dan ganas de reír más fuerte- entonces eres primo de Andy -no termino de comprender cómo es que se dio una coincidencia tan rara. Pero al menos tengo la seguridad que no lo dejarán… No, creo que todo lo contrario. Andy se vuelve alguien irresponsable en este tipo de ambientes, y el otro tipo es peor. Pero si termina en un estado muy problemático, sabré a quien llamar- Andy es amigo mío. Gracioso, ¿no? -igual y de esa forma él se sienta más en confianza conmigo.

Quiero disculparme con él. No sé pero lo molesto, y al poco rato me hace sentir culpable. y luego de nuevo quiero molestarlo.
Al final no dije nada y el otro chico terminó sentándose con nosotros, incluso se presentó.
-Min Yoo -le ofrecí mi mano y me giré a ver a Eli, ¿de qué diablos se ríe? Parece más feliz desde que el chico este se acerco a nosotros. Y no lo noto, pero terminé sonriendo por ver su reacción. Pero la llegada de alguien más ha llamado mi atención. Y mi sonrisa se fue. Sentí una presión en el pecho, y mi cara se tornó completamente seria.
Mordí mi labio y fruncí el ceño. Esto es completamente incómodo, y siento que mi cuerpo reacciona a los nervios.
-Hola -desde ese día no hablamos, solemos ignorarnos en la universidad pero ahora es más complicado. Sigue molesto, parece que eso no cambiará no importa cuánto tiempo pase. Pero no puedo culparlo, yo tampoco puedo darle un saludo casual- gracias -¿a qué viene su comentario? No despegué mi vista de él. Espera… ¿acaso ellos…? Miré hacia un lado. No puede ser, de todas las malditas cosas que podrían pasar hoy, tiene que ser esto. Y me molesta, no tengo ganas de verlo con un nuevo novio- lindo traje el tuyo -pensaba decir su nombre, pero recordé que le molesta. Pero ahora más que nunca quiero hacerlo.

Volteo a ver a Eli por el comentario, ¿no pudo ser más discreto? Tomé mi cerveza y di un trago largo. Me sabe más amarga que hace un rato.
-¿Quieren ordenar algo? Llamaré al mesero -debo actuar normal. No, diablos, no puedo. Mi voz suena molesta. No me gusta verlo con otra persona. Aunque ellos pueden solo ser amigos, Hannu es un tipo sociable- ¿quieres otra? -me dirigí a Eli, no sé si seguirá tomando, no me importa. Mi cabeza es un lío ahora, hace un rato pensé en Hannu, pero en serio no quería verlo. No estoy listo, diablos, no creo que algún día lo esté. No hasta que elimine por completo lo que siento por él.

Me alegra que no se haya enojado. Quería darle tiempo con sus amigos, pero parece que fue demasiado.
-Lo siento -me disculpé sonriendo- en serio que estaba a punto de avisarte. Mira, tengo el teléfono en la mano -saqué mi celular rápidamente y me reí. Al menos no se molesta porque me quedé aquí. O eso pensé, porque su cara cambió de repente cuando presenté a los chicos. Quiero preguntar que pasa, y entonces observo al moreno y la manera en que se hablan. Conmigo fue muy amable, pero entre ellos parece haber algo de tensión. Ellos se conocen, ¿cierto? No dije nada, me limité a observarlos. No quiero parecer posesivo o celoso, en vez de eso, me preocupa que Hannu esté incómodo.
-¿Quieres sentarte o prefieres regresar? -lo miré preocupado y le hablé un poco más bajo.  Me doy una idea de quién podría ser, pero también puede que solo sea alguien que le cae muy mal, solo que Hannu no es suele comportarse así. Y luego vino ese comentario por parte de ambos. Me siento incómodo por la atmósfera que se formó de repente.

Elijah suelta un comentario y sonrío por su inocencia al preocuparse por Hannu.
-¿Te sientes mareado? -desde que lo conocí en ocasiones lo siento muy frágil- tal vez deberías sentarte un momento -tomé su mano y le sonreí. No sé cómo hacerlo sentir mejor, pero quiero que sepa que no lo dejaré solo y si quiere irse, o quedarse, tiene todo mi apoyo- no, muchas gracias -respondí con la amabilidad de siempre- ¿tú quieres algo? -no sé qué debería hacer. Normalmente una persona decidiría irse, pero no sé realmente qué pasa entre ellos. Y también soy del tipo que pefiere dejar la decisión en sus manos. Creo que se trata de esa persona de la que me ha hablado, y al parecer, todavía tienen cosas que resolver. Me sentí un poco cabizbajo, pero prometí darle el tiempo necesario. Por fortuna soy bueno ocultando mis emociones.

Suelto una pequeña carcajada por las tonterías de Saki, he aprendido a conocer un poco más su carácter, y aunque no le puedo seguir el ritmo a todo, ya entiendo un poco más su sentido del humor.
-Que tonto- digo aun riendo por broma. Creo que me he vuelto una persona un poco mas risueña desde que él entró en mi vida.

Desvío la mirada cuando Min dice lo de mi traje, es mi manera de rechazar lo que me dice.
-gracias- le agradezco solo por meros modales, pero me he tardado un poco en contestar porque en el fondo deseaba no hacerlo.
El pequeño se preocupa por mi, y obviamente Saki también -No es nada importante- le digo a Saki y Elijah, pero siento algo de nauseas, y mi cabeza duele, pensé que podría manejar esto, pero al parecer me equivoqué, no tengo tanto control de mi como desearía. Cuando Saki toma mi mano, termino sentado. Debería irme, pero mis piernas no reaccionan y lo peor es que Min actúa de esa manera. Su tono de voz pasé mucho tiempo aprendiendo a reconocerlo porque quería entenderlo, saber acundo estaba feliz o preocupado, cada estado de ánimo, la manera en que usaba las palabras, lo conozco demasiado bien para mi gusto -¿Por qué estás molestos? - he preguntado casi en automático por su tono de voz, sé supone que a mi ya no me importa ¿por que me preocupo de si está enojado? tal vez es que le molesta mi presencia, me he vuelto tan indeseable para él al grado de molestarle mi presencia -Quiero decir, yo no quiero nada, solo tomaré un poco de agua- comento tomando el vaso que me ofreció Elijah. Tomo el agua un poco rápido, tanto como la temperatura me lo permite.
Ya no entiendo nada, quiero sacarlo de mi mente, pero aunque me lo he propuesto, parece que aun siento algo. Esto está mal, no hay razón para seguir sintiendo nada, lo nuestro a terminado, no hay posibilidad de nada más. Si ya ha llegado a su fin, ¿por que aun me duele?

Asiento con orgullo, sé que mis tíos han dicho que no tengo que hacerlo, pero yo no quiero sentir que mi vida a cambiado tanto, mis padres no tenían mucho dinero y cuando yo quería cumplirme algún capricho solía tomar trabajos de medio tiempo.
Lo miro con extrañeza ¿en serio es amigo de Andy? pero mi primo es una persona muy amable y responsable, no sé porque pero no imaginaba que tuviera amigos como este tipo, no es que sea malo, pero sus personalidades parecen tan opuestas.
-¿En serio? Andy, un chico alto de cabello negro… - comienzo a describirlo porque tal vez él habla de otro Andy.

Saki y ese chico parece que se llevan bastante bien, sonrío por la manera en que Saki dice lo del celular mientras lo saca de manera tan obvia.
Sonrío cuando el amigo de Saki también habla de nuestros disfraces, me siento bien porque me acomplejaba mucho esta situación, pero parece que solo estaba exagerando, a la gente parece gustarle ser llamativa.

Min Yoo ahora habla diferente ¿qué le pasa? parecía de buen humor todo el rato, quiero decir, es raro, pero de alguna manera agradable, pero ahora da un poco de miedo.
-¿otra? no, todavía tengo- levanto la botella de mi cerveza que aun tiene mas de la mitad.
Me confundo un poco por la pregunta del amigo de Saki; de nuevo no puse atención en el nombre. Observo como Saki cuida de él, es una persona muy amable, siempre lo he notado, pero también muy atenta, debe ser grandioso ser tan buen amigo de él. Nosotros apenas nos conocemos, pero se ha dado la oportunidad de profundizar nuestra relación para ser amigos, pero realmente me gustaría tener de amigo a alguien así.

-Sí, es él. Ojos gris, de traje todo el tiempo y con una cara así -sonreí imitando a Andy, pero él se ve más natural que yo-  dudo que haya dos tipos iguales y que tengan un hermano que se llame igual. El otro es un tipo de pelo largo, con un carácter un poco difícil, ¿no?  -ese par es inconfundible, sobretodo el menor de ellos.

La forma cercana con que se tratan deja en claro el tipo de relación que tienen, y no puedo controlar lo que siento, son celos. Es injusto, y me prometí dejarlo en paz, por eso en las clases que tenemos juntos hago lo posible por ignorarlo. Pero ese ya es un escenario habitual, encontrarlo ahora se siente diferente, sobretodo verlo acompañado.

Me quedé inmóvil por su pregunta, incluso olvidé para qué iba a llamar al mesero, supongo que era mi intento por ignorarlo pero ahora es imposible.
-No estoy enojado -respondí luego de un rato, y miré hacia el suelo. Tengo una suerte de mierda, lo que menos quiero es verlo con otra persona- es solo…  hace mucho que no hablamos, se siente extraño -tomé un poco de aire. Hace un momento me trató muy frío y golpeó mi orgullo, pero me afecta más recibir sus palabras con ese tono de tristeza. Cada vez que lo veo quiero disculparme, pero también quiero abrazarlo. Se sentía bien estar con él. Y ahora, ver que sostiene la mano de alguien más, no me gusta para nada-  supongo que fue así cómo te sentiste  -sonreí y de nuevo miré al suelo.

El mesero se acercó y pedí otra cerveza para mí.
Eli es muy amable con él y con su novio, y siento que debo irme. Lo mínimo que debería hacer es desearle felicidad, pero no puedo, no sería auténtico y la verdad, quiero hablar más con él.

Hannu terminó sentado con nosotros. Una parte de mí quería que se negara y me hiciera regresar a donde sus amigos, pero seguimos aquí con ellos.
-De acuerdo, entonces solo siéntate, ¿tomaste demasiado?  -sé que no es eso, pero no voy a recalcar su actitud frente a ellos, y prefiero dejar que él me lo diga cuando estemos a solas.
Trato de no mostrarme preocupado. Lo ideal es que él actúe con naturalidad, pero sé que no es sencillo. Lo que sí me toma por sorpresa es su pregunta. Pero no intervengo, no es algo que tenga derecho a hacer.

-Oye, se supone que eres menor, ¿está bien que tomes?  -intenté seguir una plática casual, porque desde que el moreno contestó, siento como si Elijah y yo sobraramos. Tal vez sí, tal vez debería darles su espacio. Sé que es absolutamente la peor idea considerando que ellos tuvieron algo, pero si lo único que lo detiene es mi presencia y no sus verdaderos deseos, no hay diferencia. Quiero que cierre ese ciclo, pero puede que aún no sea tiempo. Es obvio que todavía hay algo- creo que después de todo sí pediré algo de comer. ¿Te apetece algo? -pregunté a Hannu-  ¿me acompañas o prefieres quedarte? No tardaré ni dos minutos -debo permanecer calmado. No pongo presión en mi mirada, estoy igual qie siempre aunque debe saber que me doy cuenta. Bueno, me pregunto si realmente noto que me di cuenta.

-No- respondo a Saki, solamente lo estoy haciendo preocupar -lo siento- me disculpo, siento que debo hacerlo, Min me ha afectado demasiado, verlo con otra persona, una que no es quien yo esperaría, eso me ha causado un impacto que no esperaba, tal vez si hubiera sido esa otra persona, sería a lo que estaría preparado, pero no, es alguien nuevo.

Él me contesta, desearía que no lo hubiera hecho, porque siento ese dolor en mi pecho, literalmente un dolor, como si el aire no quisiera entrar.
-Ah…- no se que otra respuesta dar, no debería importarme que respuesta dar, ya no hay ningún asunto, me he humillado lo suficiente la ultima vez, aunque creo que ahora lo he terminado haciendo de nuevo, más aun porque cuando respondió, no pude dejar de mirarlo.
Apreté la mano de Saki por lo que dice.
-No, créeme que no fue así- no puedo creer que se atreva a comprar, ¿Acaso insinúa que esto le he dolido? Saki me ofrece la posibilidad e huir, parece una idea maravillosa, pero no quiero regresar, pero antes de poder aceptar, ya hay un mesero en la mesa.
-Por favor yo no puedo hacer esto- digo cansando e inevitablemente herido por la interacción entre ellos. Me levanto, mis piernas aun se sienten sin fuerza, pero corro al baño, choco con muchas personas pero necesito llegar al baño, me meto a uno de los baños y comienzo a vomitar. No puedo creer que no estuviera preparado para esto, ¡ya no tiene que importarme! no debería importar con quien está, ni la manera en la que habla. Pero aquí estoy, dejando que mis frustraciones salgan en forma de vomito porque no se como manejar lo que siento.

-Oh, cierto- comento recordando que también he mencionado a Dima, pero realmente parece complicado, creo que sería mas fácil creer que es amigo de Dima. Pero de Andy… aunque bueno, Lulu es amigo de ambos y es muy pero muy diferente.

Así que ellos se conocen, ya ni para sorprenderse, creo que la gente rica suele conocerse siempre, Saki no lo es, pero su amigo puede ser que si, y por eso él vino a esta fiesta. Pero si hasta yo pensaba que estaba enojado de repente y ahora dice que no. Me dan ganas de preguntar si han peleado o algo así, pero no lo hago, soy naturalmente un poco metiche, pero algo se siente raro e incomodo, así que no digo nada.
Me río nervioso al ser atrapado por Saki.
-Solo quería probar- rasco mi cabeza -y no he tomado tanto- aun así, dejo la botella en la mesa porque Saki representa una autoridad para mi -Ya no lo haré- digo apenado, yo no quiero que piense mal de mi, espero que su imagen sobre mi no cambie -pero aquí hay meseros, no tienen que ir hasta allá- comento levantado la mano para que uno se acerque --quiero otro poco de agua por favor- le digo al mesero -¿Ustedes?- pregunto para que pidan algo al chico. Él se lleva todo lo vacío y trae
-Oye, ¿aun no estás mareado? has tomado varias y eres el conductor- comento preocupado pues aunque no parezca que toma rápido lleva varias cervezas, yo he necesitado dos para marearme.
Miro confundido al chico que apenas dice algo y se va desapareciendo rápidamente entre las personas.

La conversación ahora se vuelve privada.
-No puedes saberlo -no me gusta que diga eso, él no sabe lo que yo puedo llegar a sentir o no. Siempre intenta leer mis expresiones y ademanes. Y me molesta que sea así, además insinuando que lo nuestro fue algo realmente malo. Mierda, de nuevo lo pienso, y me frustro. Pero esta vez es peor, porque no ha venido él solo. ¿Y qué pasa con su novio? ¿De verdad ellos están juntos? ¿Por qué finge que no se da cuenta? Este niño entiendo que sea algo despistado, pero él… lo sabe, y aún así me trata amable, me irrita.
Ellos interactúan y yo me quedo mirando a Hannu. Debo irme, estas dudas no son buenas. Ha pasado un tiempo, debería ser un ciclo cerrado. Lo hago bien en la universidad, solo tengo que fingir que es uno de esos días.
-¿Qué? Ah -miré la botella de cerveza cuando Eli me habló. No pensé antes de pedirla- no estoy mareado. Mi resistencia no es tan mala como la tuya -le sonreí a Eli. Estoy tratando de actuar como si no me afectara, pero ya he dejado en claro que sí. ¿O debería mostrarlo? Pero para qué, él y yo ya no tenemos arreglo. Pero no quiero que siga con esa impresión. No sé ni qué quiero, por eso odio la idea de encontrarnos.

Lo miré levantarse y en cuestión de segundos, mis pies se movieron en automático.
-Hannu -no presté atención a los otros dos, solo me levanté tras de él, quedando un poco atrás por la congestión de  gente, pero va en dirección al baño. Se siente mal, es mi culpa, mi presencia es lo que menos necesita ahora. Pero no puedo evitar preocuparme. No puedo hacer como si dos años hubieran sido nada, o como si él fuera una molestia. Ojalá fuera así, ojalá lo sintiera como una molestia y sería más fácil dejarlo atrás y seguir con mi vida.
Entré al sanitario, y no es difícil saber dónde está. La gente se queda mirando como idiota a su cubículo, y a pesar de la música, escucho el ruido que hace al vomitar.
Me acerque donde las toallas desechables para manos y arranqué unas cinco, y me metí al cubículo. Mi corazón late muy fuerte, siento una vibración en todo mi cuerpo debido a los nervios que todo esto me provoca. Me agaché a tallar su espalda. Probablemente no soy yo quien quiere aquí, pero no me importa.

-¿Por qué te disculpas? -le acaricié la cabeza y sonreí. Su cambio de humor fue muy radical, y con la conversación que están comenzando, siento que no debo interferir.
No estaría mal de vez en cuando ser el novio celoso que lo arrastra lejos de su exnovio, pero de este modo solo repetiré los errores de antes. Ahora puedo alejarlo de él, pero ¿después? ¿Cuánto tiempo puede estar así? Le prometí darle tiempo para recuperarse, y eso hago. No tengo porqué ahora actuar como un idiota egoísta e inseguro, aunque me sienta un poco mal por ver que aún le importa, él debe ser capaz de negarse, de otro modo solo crearé otro vínculo de dependencia.
-No, está bien. Era un simple comentario, es tu decisión -intento no reaccionar negativamente a lo de ellos y contesto con mi usual humor a Elijah, pero siento la mirada del otro sobre Hannu. Tomo un poco de aire y sonrío. Su mano ha apretado la mía en cuanto volvieron a hablar, eso no es buena señal- ¿Hannu? ¿Quieres volver con ellos? -lo miré preocupado, y cuando el mesero llega desvió un rato la atención- ¿puede traerme un agua mineral? Gracias -Hannu ha comenzado a ponerse pálido, creo que debería llevarmelo- ¿cómo? -no logré escuchar bien lo que dijo, y cuando me doy cuenta me ha soltado y se levantó para irse. Me levanté también para seguirlo, pero el otro tipo ya ha salido disparado tras de él.
Me quedé inmóvil, y recordé cómo se puso la vez anterior, así que di un par de pasos lejos de la mesa, pero de nuevo me paré. Si ellos aún sienten algo por el otro, entonces solo estoy estorbando. Evidentemente él no fue una buena persona para Hannu, pero si todavía lo quiere, entonces no importa lo que haga, no estará completamente conmigo y no tengo derecho de juzgar lo que sea que Hannu quiera. No deseo que lo nuestro se base en mero consuelo, no me importaría serlo, pero sé cómo terminaría esto y quiero hacer las cosas bien esta vez.
No dejé de mirar en dirección a donde se fueron ellos. Me siento mal.
-Lo siento -me senté de nuevo. En mi cabeza hay demasiadas posibles imágenes de ellos, de él- ellos tienen algo pendiente -le explico a Elijah porque parece que no está entendiendo nada- ¿crees que deba interferir? -no sé porqué pido una respuesta a él, sabiendo que es ajeno al problema y faltando al respeto a la confidencialidad de Hannu.

-Y tu no puedes compararlo- hace un momento tenía la boca completamente seca, por eso necesitaba el agua, pero ahora siento como comienzo a salivar más, siento nauseas. No puedo alejar mi ojos de su interacción, de esa preocupación del chico y de la sonrisa de Min para con él.
Saki ha dicho algo pero no he puesto atención, me giro para mirarlo, ¿que ha dicho?  pero con lo del mesero no me da tiempo a preguntar.
Mientras más paso tiempo aquí, pero me siento, por eso he tenido que huir, algo así como instinto de supervivencia. Mi cuerpo se siente débil, pero más allá de eso, necesitaba alejarme.
El esfuerzo de vomitar hace que mis ojos se humedezcan, pero solo es eso, no es que quiera llorar, yo no volveré a llorar por él, me lo prometí.
Siento una mano en mi espalda, soy realmente una persona muy mala.
-Lo siento- me vuelvo a disculpar, tal vez acabo de causar que lo nuestro acabe. Mi vomito se detiene y seco mis ojos con mi brazo y me levanto y bajo al baño, solo para que al girar me encuentre de frente con su rostro. No es Saki… Desvío la mirada ¿acaso se ha preocupado por mi? ha venido a ver como estoy, no, eso no importa, no debe importar, pero aun así siento mi pecho agitado por esa idea -¿Que haces aquí?- pregunto un poco perdido en su mirada. Soy un idiota, me reprendo mentalmente para salir de mi trance causado por su cercanía -no lo hagas por favor, no te acerques, no actúes como si te importara- hago como que lo voy a empujar para salir del reducido espacio en el que estamos, pero no quiero ni tocarlo, ahora hasta ese pequeño acto me parece sería peligroso -Necesito salir- digo esperando a que se haga a un lado.

Ignora las toallas en su mano, solo camino para poder enjuagarme con un poco de agua las manos y mi boca, poco a poco me deshago del sabor desagradable que me quedado, pero solo me estoy poniendo nervioso porque él no sé va, ¿que diablos espera? esto es como una tortura, saber que tal vez aun se preocupa por mi, si siente como si fuera lástima… solo de pensar en estas cosas siento de nuevo nauseas, pero dudo que quede algo que pueda vomitar.

-Está bien, mejor ya no debería hacerlo- ha sido un gesto de preocupación ¿o no? si eso tiene que ser, Saki es ese tipo de persona que se preocupa por los demás. Se siente bien saber que alguien siente algo así por mi.
Hago una mueca por lo que Min Yoo dice sobre mi resistencia, la verdad es que no sabía que las personas tenían diferentes resistencias, pero me da pena aceptarlo.
-Pues bueno- refunfuño un poco.

Todo se ha tornado un poco más raro… el amigo de Saki se fue, y luego Min Yoo salió detrás de él, ¿que pasa con ellos? son muy raros.
-Ah, pues parece que se pelearon o algo así- comento cuando me dice que tienen algo pendiente, debió ser una pelea fea, porque el ambiente se sentía pesado -¿eh?- la pregunta de Saki me descoloca un poco -¿estás preocupado?- le pregunto porque ahora que lo noto, no parece tan animado como de costumbre -si te preocupa deberías hacerlo, debemos cuidar a las personas que nos importan. Cuando llegó se veía muy alegre platicando contigo. Ese chico Min Yoo es un poco raro, se la pasa molestándome, yo tengo un gran carácter y puedo soportarlo- comento con orgullo de mi mismo --Pero tu amigo parece un poco frágil… Yo no desearía estar solo con una persona que me ha hecho daño- inevitablemente pienso en el que alguna vez fue mi mejor amigo y se volvió en mi atormentador personal, odiaba pasar tiempo con él, me dolía recordar nuestra amistad y la manera en que ahora me trataba. Recordad eso me hace sentir mal, y me pongo de pie, estoy mareado, pero me agarro de la mesa. Tomo la mano de Saki y lo empujo -Ve, ve, a veces queremos ser rescatados pero no nos atrevemos a pedir ayuda, pero cuando alguien llega, uno se siente muy feliz- recuerdo el momento en que Mia me ayudó, así que seguro ese chico sentirá algo parecido.

Se disculpa conmigo, pero me da la impresión que no es a mí a quien quiere decirlo. ¿Por qué tendría que pedirme perdón? Me incorporé para darle un poco de espacio. Está pálido, y no parece feliz de verme.
-Saliste corriendo. Te conozco, y me preocupé por ti -él es una persona sensible. Es extraño, siempre pensé que su personalidad era única y me costó mucho trabajo adaptarme a muchos aspectos de ella. Pero sé que a veces no puede lidiar con la presión y los nervios, solo no creí que yo llegaría ser una razón para que él perdiera el control.
Fruncí el ceño. Sé que es absurdo que me moleste, y tiene todo el derecho de pedirme distancia. Pero no es como si fuera mi culpa este encuentro. Diablos, no hice absolutamente nada ahora, ¡nada!
-Cálmate -dije un poco brusco, y al notar mi tono de voz solté un suspiro- lo siento, no puedo no preocuparme por ti -esta vez hablé más amable. Lo miré preocupado, y le ofrecí las toallas de papel, pero él las ha rechazado.
Exhalé y me moví hacia afuera para dejarlo salir. Sabía que esto pasaría, pero me moví sin pensarlo cuando lo noté muy mal.

Lo miré mientras se enjuagaba. No sé qué debería hacer. Quiero decirle algo, pero nada bueno pasa por mi cabeza. Quiero saber quién es ese tipo, y si ya tiene una pareja, por qué reacciona así al verme. Pero mis preguntas rebotan y termino cuestionando mis propios sentimientos. Me acerqué a él y con una de las toallas limpié la suciedad de su traje cerca de su clavícula.
-Tienes vómito -advertí antes de tocarlo. Cuando terminé tiré el papel en el cesto cercano. Lo miré de nuevo, y rasqué mi cabeza frustrado- estás saliendo con alguien -dije por fin. No reclamé, solo salió de mi boca- no pensé encontrarte aquí -es difícil. Diablos, odio pensar de nuevo sobre si fue bueno o no dejarlo. Tengo que irme, rápido.