Vuelve [Dacy]

La fiesta de hoy fue como cada año, muy estresante. Los preparativos anteriores, el revisar que las cosas estuvieran en orden hoy y saludar a cada uno de los invitados, a eso sumandole que nosotros teníamos que presentarnos como la familia perfecta y feliz, aun si nuestros dos hijos ni se dirigían la mirada.
Cenamos normalmente, pude ver a Lu y algunos amigos de Andy. Lu apenas me saludó y se alejó de nuestra mesa, y Andy y Dima se dispersaron cuando la cena terminó. Mitya y yo pasamos la mayor parte de la fiesta tomados de la mano, cariñosos y esos protocolos que cada año llevamos a cabo. Parece que hoy su humor era bueno, no sentí ese cariño tan falso, pero, todavía no se siente como antes.
-Subiré, me duele un poco la cabeza -me despedí de un beso de Mitya, él me dijo que volviera y solo asentí, pero probablemente termine dormida. Aquí ya nadie me necesita, al menos los invitados están divirtiéndose.

Llegando a mi habitación tomé mi celular para enviar un mensaje a Leigh, a veces creo que lo abrumo al contarle todo, por eso esta vez solo le dije que estaba a punto de dormir y le deseé buenas noches. Elsalir con él es muy extraño, pero no sé si se puede considerar mi amante, prácticamente hacemos lo mismo que antes, solo que ahora nos besamos y pasamos más tiempo juntos. Pero él todavía está enamorado de esa persona, y yo no puedo deslindarme fácilmente de Mitya.
Dejé el teléfono en el buró y me recosté, tengo que cambiarme de ropa, pero puede que Mitya me llame para despedir a alguien si es que preguntan por mí, esas personas no son muy prudentes.
-Qué cansansio -me quedé unos minutos acostada. Lu no me habló, a pesar de que intenté hacerle plática en cuanto lo vi, me respondió muy cortante con el mismo buen humor de siempre y se alejó. Tal vez sea lo mejor, aunque lo extraño. Pensé que si comenzaba salir con mis amistades no le tomaría tanta importancia, pero nada ha cambiado. Me agrada salir con Takumi y Leigh, son buenas personas y de repente olvido todas mis preocupaciones. Pero la compañía de Lu no era un método desesperado, recién es que lo comprendo.

Luego de un rato de ver TV me levanté para ir a ver si Dima o Ilya habían llegado, quiero pedirles que digan abajo que nadie me moleste ya, porque si llamo a Mitya para eso no le va a importar y querrá que siga acompañando a los invitados.
-Cielo -toqué un par de veces pero nadie contesto, y usé la llave electrónica del cuarto de Dima, si Ilya subió, seguro estará aquí a pesar de haber rentado una habitación para él. Al entrar vi la TV prendida, creo que está en el baño. Seguramente es Ilya, Dima no es fanático de ver la televisión- amor, ¿estás bien? -dejé la llave en uno de los muebles luego de cerrar la puerta y me dirigí al baño, pero me detuve cuando la persona salió- oh, hola -sonreí inconscientemente, y me quedé unos segundos sin saber qué hacer- ¿y Dima? -si él está aquí dima también debería, pero obviamente no están ambos en el sanitario. Regrese a la cama y me senté, ni siquiera me quité el vestido de noche- ¿cómo has estado? Tanto tiempo sin hablar contigo -intenté actuar normal, pero no puedo negar la sensación en mi pecho, los latidos acelerados y mis manos moviéndose con nerviosismo.

Dasha:

Recámara:

Llevo un rato viendo al televisión, pero es aburrido, debí traer al menos una consola portátil para esto, pero no lo pensé bien. Suspiro resignado y vuelvo a mandar un mensaje a Hana, no quiero ser tan pesado, pero lo soy un poquito. Le pregunté si ya estaba dormida y me dice que no, así que le marco.
-Hola- saludo animado cuando contesta -estoy en una cama enorme, en una habitación de lujo, mirando comerciales de productos que seguro no sirven. ¿Tú que haces?- platicamos un poquito más, le cuento algunas cosas de la aburrida fiesta, pero sé que es un poco tarde y no tardará en ir a dormir porque mañana trabaja -solo quería decirte que te extraño. Tal vez mañana pueda pasar a verte para que almorcemos juntos- le sugiero, con ella he perdido un poco el miedo a lanzarme y ver que ocurre -Bueno ya te dejo dormir, nos vemos. Descansa y que tengas dulces sueños- doy un beso tronado al micrófono del celular, me río un poco bobo y termino la llamada.

Tal vez debería solo irme, pero por si algo ocurre, creo que mejor me quedo aquí, que Dima sepa que si me necesita solo puede llegar y ya. Me levanto para ir al baño, comienzo a tener un poco de sueño. Pero al menos parece que las cosas no han salido mal.
Escucho que alguien entra y estoy por salir, pero escucho su voz, ¿por qué tenía que ser ella?
Respiro profundo un par de veces, como para armarme de valor, hace un rato la saludé, pero me alejé casi de inmediato, sigo bastante avergonzado por lo que hice, no puedo ni mirarla a los ojos.
Al fin abro la puerta y la miro, ella sonríe, no debería hacerlo, casi que me siento peor. ¿Será una sonrisa de lastima?
-Hola Dash- le saludo -Salió hace un rato, si quieres lo voy a buscar- parece una excusa, y lo es, ¿quien necesita andar buscando estos días? si ya se cuenta con celulares, solo hay que llamarle y listo.
-¿Yo? ah pues bien, todo tranquilo. Normal, como siempre- río un poco nervioso, pero bueno, siempre fui demasiado bobo con ella, así que no es que esté tan diferente a lo de costumbre -¿y tú que cuentas?- le pregunto, y coloco mis manos en mis caderas, obviamente estoy un poco tenso, ni siquiera me he movido mas que un par de pasos fuera del baño.
Ella hoy se ve muy guapa, pero solo es una apreciación de su belleza, solo eso, nada más que eso. Solo estoy siendo objetivo… bueno si, también me intimida un poco lo bonita que se ve, pero solo un poco, así que no puedo mirarla a los ojos por la vergüenza que siento por lo que hice esa vez, y no puedo mirarla de reojo porque me pone un poquito nervioso que esté usando ese atuendo.

Luciel:

Desde la fiesta lo note, no ha traído esos lentes llamativos que siempre usa, y se ha peinado diferente. En general, su aspecto luce diferente. Tal vez se deba a la chica que ahora aparece en sus fotos. Debo verme ridícula mirando sus redes sociales para ver qué es de su vida, desde que ya no hablamos tanto, es la única manera de saber que se encuentra bien.
-Amm, pues solo venía a revisar que estuviera aquí. Pensaba que Ilya ya había subido y estaría aquí, pero veo que no… -me reí nerviosa y miré alrededor, en la fiesta lo vi acompañado de los amigos de Andy, seguramente está con ellos, él no lo dejaría solo. Desde que se fue ellos se han vuelto más cercanos, eso me da un poco más de calma.

-¿Yo? Pues… nada -reí más fuerte, es obvio que hay un ambiente incómodo. Miré al suelo aún con la sonrisa en mi cara. ¿Qué debería decir? ¿Tal vez preguntar por su novia? No, cómo va a ser eso, solo me vería como una persona insensible luego de lo que ocurrió. Pero de verdad quisiera saber, más allá del “sí, y tú”- ya no has ido más a casa -lo solté de repente, y mi cara comenzó a sentirse caliente. Es por el miedo que tengo a su respuesta.. El dijo que necesitaba tiempo, pero han pasado varios meses. Yo no quería que se alejara, pero en ese momento no sabía qué hacer… en ese momento…- deberías pasarte más seguido, ahora que Andy no está se siente más solitario -sí, puedo usar eso como una excusa- pero cuéntame, ¿cómo ha ido el trabajo? ¿Sigues yendo a la universidad? -rápidamente cambié el tema. Sé que su anterior “bien” fue para no tener una plática más larga, pero no supe qué más decir- ¿has hecho algo interesante? yo me la vivo trabajando y en casa -me quejé riendo, quiero escuchar que me hable de su chica, tal vez así podremos pasar esa página. Pero una parte de mí no quiere saber por esa razón. No puedo olvidarlo, soy tan tonta, tengo treinta y mi percepción cambió totalmente solo porque nos besamos, pero él fue la segunda persona en hacerlo, y no es cualquiera.

-No, solo yo. Dima bajó hace rato- ahora repito lo que ya he dicho, pero solo intento llenar los silencios para no sentirme más incomodo.

Claro que no he ido, no tengo cara para enfrentarla, fui un tonto, no puedo creer que me deje llevar tan fácil, como un idiota.
-No, es que. Bueno, he tenido mucho trabajo y las tareas me están matando- nada más que pretextos, siempre he sido me han molestado esos universitarios que usan de pretexto sus estudios para decir que no tienen tiempo de hacer otras cosas. Yo pienso que si no tienen tiempo, entonces seguro que pierden demasiado haciendo otras cosas.
-¿Qué?- pregunto un poco contrariado, ¿por qué pide algo como eso? ¿no es un poco cruel? es lo mismo que con Niki, solo tengo que ser el amigo y conformarme con eso -Claro, tal vez luego vaya a ver a Dima- bajo la mirada, no quiero ser grosero con ella, pero ya no quiero seguir con ese papel en la vida de las mujeres que me gustan.
-Bien, ando probando un juego de plataformas, un poco básico pero parece entretenido. Y la universidad, pues igual que siempre- bajo la mirada, todo se siente tan forzado, nada como antes de que metiera la pata.
-Pues, lo de siempre. Y bueno, yo estoy saliendo con alguien, así que ya no tienes que preocuparte por lo que pasó esa vez. Se que fue un error, de verdad lo siento. Yo no dejo de sentirme apenado por eso- admito bajando la mirada y hago la reverencia más grande que me permite mi poca elasticidad -lo siento mucho- permanezco en esa posición, porque me ha dolido un poco la espalda de lo rápido que ha sido mi movimiento -auch, auch, auch- me quejo llevando mi mano a mi espalda baja y trato de levantarme por fin.

No le creo mucho, porque no importa qué tan cansado se sintiera o qué tan ocupado le tuviera el trabajo, siempre iba a casa. A veces allí hacía muchas cosas de la universidad, pero ahora no va más.
-Ya veo, todo un adulto ocupado -traté de sonar normal, como siempre, pero creo que mi voz nerviosa se nota bastante.
Y entonces de repente suelta lo que tanto quería saber. No lo miré, pero sentí una opresión en el pecho, es demasiado incómodo y la verdad hasta me han dado ganas de decirle que ya no me cuente nada. Y esas disculpas que vienen después hacen todo peor. No puedo culparlo, pero es que ni siquiera me dio la oportunidad de pensarlo, aunque aquel día me negué, era obvio que no me había molestado ni mucho menos sido indiferente, pero parece que soy la única dándole vueltas al asunto.
-Está bien, no tienes que disculparte más -levanté la mirada solo cuando se quejó, creo que tenía yo una expresión molesta, pero entonces me acerqué para ver si se encontraba bien- eso te pasa por exagerar -le dije, porque de reojo pude notar su gesto exagerado- me alegro que todo vaya bien en tu vida -le sonreí ahora. Es el amigo de los chicos, casi como mi hijo, se suponía. Entonces debo actuar como tal y apoyarlo.
Le di un golpesito en el hombro y sonreí.
-Mucha suerte con tu novia -me quedé unos segundos mirándolo y tragué saliva- iré abajo, quiero ver cómo está Ilya. Si Dima regresa, dile que pasé a verlo. Que tengas linda noche -me di la vuelta y tomé la llave para salir. Estoy muy incómoda y me siento frustrada, quería verlo y platicar con él, pero creo que no, primero debo aclarar mi cabeza.
Gire la manija de la puerta y no abrió, e intenté varias veces más con un poco de fuerza.
-Caray, estas malditas puertas modernas -lo volteé a ver y reí, y de nuevo miré la manija con una expresión desesperada. Si no estuviera tan nerviosa podría abrir la puerta, me siento todavía más tonta, y mi pecho duele mucho. La solté al fin y me hice a un lado- ¿me ayudas? -le pedí apenada, necesito alejarme de él. Me siento mal, porque él parece continuar con su vida y yo no le he deseado felicidad honestamente.

-Jeje, si- rasco mi mejilla nervioso.

-No exageré- me quejo en tono un poco infantil. Sonrío por sus palabras, ella es una buena mujer, siempre me recibió en su casa y me trato siempre bien. Dudo que alguien como yo haga falta en su vida, menos para hacerla incomoda -Gracias- pero supongo que es lo mejor, si yo permaneciera a su lado, aunque pudiera tratar de ignorar lo que hice, creo que entonces no podría quitarla jamás de ese pedestal en que la he puesto. Incluso ahora me ha puesto nervioso con su sola presencia. Supongo que el primer amor siempre tendrá un gran peso.
-Buenas noches- la sigo con la mirada hasta la puerta, y mi sonrisa poco a poco es va borrando al ver que no sale.
Ella me pide ayuda, así que me levanto y me acerco y trato de hacer lo más simple del mundo, abrir una puerta, pero parece estar trabajada.
-Debe estar fallando la cerradura, llamaré a recepción- me siento en la cama para poder marcar. Un timbre, dos timbres, tres… cauatro. Nadie toma el telefono -No contestan- ¡estamos en cerrados! esta es una situación imposible, ¿qué voy a hacer? platicar es incomodo entre nosotros, y no quiero ponerme nervioso todo el rato por su presencia. Yo ya tengo a una persona que me gusta y no quiero que mi corazón esté divido. Pero creo que mi corazón es necio, porque no quiere olvidar a Dash.
-Habrá que esperar. ¿Te quieres sentar?- digo levantándome para sentarme en uno de esos sillones que están cerca de la ventana. Puede sonar muy tonto, pero yo soy tonto. Y estar sentados en la cama, me hará recordar todo el tiempo lo que pasó. Ese beso, que esta noche está muy presente en mi cabeza. Recargo mi cabeza en el cristal de la ventana y la observo mientras se mueve para acomodarse. Cada uno de sus movimientos está dotado de esa gracia que recuerdo.
-¿Todo va bien con don perfecto? - pregunto de repente, porque creo que eso me ayudará, escucharla hablar de su marido, siempre ayuda a que mi corazón pierda un poco del fuego que siente. Duele, pero es lo mejor para regresar los pies a la tierra -Se veían muy contentos en la fiesta- si, los observé, es imposible no hacerlo, al final supongo que son la pareja ideal, o al menos en las fiestas, porque cuando los veía las veces que iba a la casa, ellos se ven completamente diferentes. Creo que ni siquiera he podido ocultar mis celos al preguntar. Pero ahora que ella ya sabe, supongo que no vale el esfuerzo ocultar las cosas que me provoca.
Es curioso lo mucho que Hana me ha hecho cambiar en tan poco tiempo, pero creo que necesitaba que alguien me dijera las cosas que ella dijo. No quiero actuar como si nada, no quiero fingir que todo es como antes. Quiero que Dasha sepa que lo que dije, aun lo siento y que lo tenga presente, que si no le gusta, lo mejor es mantenernos lejos el uno del otro.

La puerta no abre incluso cuando él intenta abrirá, y comienzo a sentirme nerviosa, ¿qué clase de situación es esta?
-Claro, buena idea -a mí ni se me hubiera ocurrido, no porque sea tonta, es porque no paro de pensar en la tensión que hay entre nosotros, es evidente que lo hago sentir incómodo y eso me pesa demasiado.
Me quedé de pie esperando que él hiciera la llamada, pero solo está ahí con el teléfono en la oreja, y suelto un gran suspiro cuando me confirma que nadie atendió. No me extraña, es noche buena y las personas no son tan estrictas con el servicio, además está la fiesta, y deben tener otras reuniones en el restaurante del hotel, esto es algo mínimo.
-Sí, gracias -me senté en la cama frente a él, pero no levanté la vista, solo me mantuve viendo mis manos. Tengo que pensar en algo inteligente por contar, estamos encerrados y no quiero empeorar el ambiente entre nosotros. Pero su pregunta es demasiado... incómoda, y diferente. Está hablando diferente- don perfecto -me reí como si fuera una broma, pero a él no le hizo gracia así que me quedé callada inmediatamente- sí, cada año nos vemos así -comenté sonriendo y evitando su mirada. Para él no es novedad que Mitya y yo no somos el feliz matrimonio que todo el mundo cree, pero muy pocas veces preguntó sobre él directamente- aunque hoy fue un poco mejor, pero las cosas están como siempre -no ha mejorado nada, lo único que ha cambiado un poco soy yo, pero nuestra relación de hecho va poco a poco en picada- ha sido tenso desde que Andy se fue, además -además él anda con esa niña. Por dios, es una niña, podría ser su hija, ¿qué diablos está pensando? Sé que no se comporta como tal, y es un poco desagradable, pero sigue siendo una menor y hasta su padre está preocupada por ella, Mitya es demasiado inconsciente- él está saliendo con alguien más -tomé un poco de aire, estoy cansada de verme como la tonta en esta relación, la que siempre espera, la que soporta. Levanté el rostro y lo miré- y yo también -apreté mi mano con la otra, siento ese temblor en todo mi cuerpo- podría decirse -no sé por qué le conté, ¿quiero que se ponga celoso? ¿O es que me dolió demasiado que él se consiguiera una novia? No, eso no debería, pero lo cierto es que él ya no es más ese hijo extra que solía querer, en el momento en que nos besamos dejó de parecermelo- la chica de aquella vez… no es con la que estás saliendo, ¿verdad? -miré a un lado- fue tan inesperado -mi cuerpo entero refleja mis nervios. No lo miro porque seguramente se dará cuenta que no estoy bien. Ni siquiera tomé mucho como para decir que es el alcohol.

Ella se ríe, supongo que está muy acostumbrada a que siempre estoy jugando y bromeando, creo que me lo he ganado. Siento una pequeña punzada en mi pecho cuando dice que fue un poco mejor.
-Ah- giro mi cabeza para no mirarla de manera directa, como si quisiera mirar a través de la ventana, pero veo en realidad el reflejo de ella.
¿Él la engaña? no puedo creer que alguien sea tan idiota, teniendo una mujer tan maravillosa, ¿por qué buscar a alguien más! es una tontería, ese hombre es un completo idiota, ¡no la merece!
Mis pensamientos en contra de esta persona se detienen y giro para mirarla con la sorpresa que la noticia me ha causado.
-Tú, sales con alguien- lo repito como para tratar de hacerme entender lo que ha dicho. Bajo la mirada y miro mis manos. No puedo evitar ese pensamiento egoísta de ¿Por que no soy yo? le dije lo que sentía, pero ella ahora está con otra persona. Respiro un poco profundo, y luego suelto una pequeña risa, ¿Por qué me enojo? pesar eso es una tontería, yo no tenía oportunidad, nunca la tuve, que yo sintiera algo por ella, que lo confesara, no era un contrato para que me correspondiera, así como tampoco lo fue con Niki. Echo mi cabeza hacia atrás para mirar el techo de la habitación, solo falta que Hana me diga un día de estos que ha preferido a ese otro tipo que le gusta. Soy un fracaso, nunca soy la primera opción de nadie.
-No, no es ella, porque casualmente también sale ahora con alguien más- digo riendo como si eso fuera algo gracioso -Si, supongo que lo fue. Yo saliendo con alguien, ¿quien lo iba a imaginar?- estoy enojado, y un poco asustado, de que no importa los cambios que haga, mi historia se va a repetir, Hana se irá con otro, y así cada mujer que me interese.
Me acerco de nuevo a la cama, quedando de pie frente a ella, y estiro mi mano para tomar el teléfono y volver a marcar para que alguien venga a sacarme de aquí. Me siento tan patético en este momento, porque no puedo pensar como una persona razonable, no, me siento herido, me siento tan menospreciado.
-Carajo- me quejo colgando molesto cuando no han contestado de nuevo y camino a la puerta para intentar abrirla de nuevo, pero pasa exactamente lo mismo. Así que solo me quedo parado mirando la puerta y dando unos golpecitos en ella con mi frente.
-¿Al menos te trata bien tu nuevo novio?- digo cuando creo que es hora de dejar de actuar como un idiota. Solo estaré con ella sintiéndome miserable. Me acerco a la cama, y dejo mis lentes en el mueble de la lampara y me recuesto -debe gustarte mucho como para que ahora salgas con él- mientras digo esas palabras me siento tan poca cosa -lo siento, pero no creo que vaya a ir a tu casa, no puedo hacerlo, no puedo seguir actuando como que nada pasó. Lo que tenga que ver contigo me sobrepasa. Sé que nunca tuve oportunidad, y todo eso, pero eso no ayuda a que deje de sentir lo que siento. Cada vez que te veo me pongo nervioso, y me siento tan patético. Yo no quiero ser tu amigo, no quiero verte con tu esposo, y mucho menos ahora con otra persona- confieso con sinceridad. Ella siempre será mi primer amor, y creo que no hay manera de sacarla del lugar que le di por tantos años, y el que ella ya sepa lo que siento, me hace imposible regresar a ese punto de convivencia en el que estábamos.

Me arrepentí por decirlo, y lo miré muy nerviosa cuando él lo repitió en voz alta.
-Algo así -contesté bajito. Se supone que Leigh y yo lo acordamos, pero por alguna razón no lo siento de esa manera. Claro que me gusta, y me encanta pasar tiempo con él, platicar, compartir gustos, pero en el fondo siento como si nosotros funcionáramos mejor como amigos. Todavía no lo sé, albergo la esperanza que en realidad podamos enamorarnos y dejar esas personas atrás, pero ahora se siente todo muy extraño, es una experiencia nueva para mí y no puedo decir que lo estoy disfrutando a lo grande.
No dejo de mirarlo, y me sorprendí al escuchar lo que dijo sobre la otra chica, porque parecían llevarse muy bien y que las cosas iban a su favor. Pero “casualmente también….” esas dos palabras me hacen imposible darle palabras de apoyo, seguro pensó que desestimé sus sentimientos.
-No lo dije por eso -está actuando raro, y me puso más nerviosa por el tono con el que habla- lo dije porque pensé… ustedes se llevaban bien -aparté la vista, estoy en la peor situación posible. Quería que todo volviera a ser como antes pero no, las cosas están empeorando.
Lo seguí con la mirada, por un momento pensé que vendría hacia mí, pero está llamando a recepción nuevamente. Mi pulso va muy rápido, la manera en que se está comportando me tiene totalmente sorprendida.
-¿Eh? -¿por qué pregunta eso? No supe ni siquiera si debía contestar. No debí contarle, ¿por qué lo hice? Solo porque me sentí un poco celosa y ahora parece que me está reprochando algo. Me siento mal, y no tengo la opción de huir, fue el peor momento para intentar reconciliarnos- no realmente -y continúa hablando, y evito mirarlo. Las cosas que dice parecen muy sinceras, siempre fue muy cuidadoso con sus palabras, como si evitara disgustarme o incomodarme, pero en este momento habla desde el fondo de su corazón. Él no es la clase de persona que dice las cosas solo para herir a otros, fui muy ingenua al creer que podríamos hacer como si nada- entiendo -siento un nudo en la garganta- ¿entonces debería ser sincera contigo también? -comencé a mover mis dedos y los miré, estoy haciendo el mayor esfuerzo para mantenerme calmada- después de todo, supongo que aquí quedará lo que sea entre nosotros -un par de lágrimas salieron de mis ojos. No debo llorar, ¿por qué? No comprendo si es que estaba muy acostumbrada a él o de verdad me gustaba. No sé si se pueda gustar de alguien y no ser consciente de eso, es una estupidez- comencé a salir con alguien más porque me sentía sola -afortunadamente además de esas dos lágrimas no salió nada más, pero todavía siento algo pesado en el pecho- aquel día no supe cómo reaccionar o qué pensar. Después de eso, le di muchas vueltas. Un día pensaba que entrarías y yo debía actuar como si nada, otro día pensé en buscarte y pedirte una explicación más detallada para yo entender mis propios sentimientos, al otro día esperaba que mejor no aparecieras más, porque no estaba lista para corresponderte e ignorar todo lo demás. Y entonces comencé a pensar en ti, en las diferentes cosas que podían pasar.Y pasaron días, semanas, meses. Pero nunca más apareciste -sonreí y seguí mirando mis manos, en algún momento dejaron de moverse- hoy intenté tratarte como siempre, platicar contigo. Pero seguía preguntándome, “¿Qué hago? ¿Lo trato como si nada?”  No sabía si era demasiado arrogante por pensar que todavía sentías algo por mí a pesar de estar con una persona, o si ya me habías olvidado y te sentías apenado por haber dicho eso y poder haberlo superado. Tantas y tantas cosas he pensado. Incluso ahora sigo preguntándome por qué de muchas cosas -para cuando terminé de hablar, aclaré mi garganta. Mi corazón está latiendo muy rápido, quiero decirle que no deseo que se aleje, que es injusto que me haga esto, el haberme confundido y luego huir. Pero es injusto para él también, y me siento frustrada, siempre me hice a la idea que Mitya me dejaría en algún momento, no lo quiero, pero cada día sus desplantes aumentaban y casi me hacía una imagen mental de cómo sería. Pero con él no, y me percato de lo importante que es en mi vida.

Nos llevábamos bien, si nos pudiéramos basar en eso para consolidar una relación, mis oportunidades con Dasha habrían sido al menos más que cero.
-pues ya no nos llevamos bien- aunque dudo que ella lo haya notado. Ha de estar tan ocupada y feliz con su nuevo novio, que ni siquiera ha notado que me he desaparecido de su vida.

Solo quiero irme, esta es la peor manera de volver a verla. Me doy cuenta que soy una persona horrible, estoy resentido con tantas cosas, no solo con ella sino con mi estúpida historia amorosa en todos estos años.
Permanezco con los ojos cerrados, no quiero mirarla mientras dice alguna cosa que me hará sentir mal.
Duele escuchar que ella confirma que lo nuestro queda aquí, ¿aunque que es lo nuestro? supongo que suena un poco exagerado en mi cabeza, no es como que yo tuviera tanta importancia en su vida, solo era el amigo de sus hijos que se la pasaba metido en su casa, seguro muchas veces fui mas una molestia que otra cosa.
Muevo un poco la cara para ocultarla en la almohada, porque duele confirmar que luego de esto ya no nos veremos, o si lo hacemos será todo demasiado formal e indiferente.

¡No puede ser! ¿Ella acaba de decir “corresponder”? si, si, ¡lo dijo! aunque también dijo “ignorar”, pero corresponder era una opción. Muevo mi cabeza parar mirarla mientras habla. No sé que pensar, suena un poco irreal, no debería ilusionarme por una sola palabra que ha dicho. Ella se ha sentido mal desde que lo que pasó, parece agobiada.
No tengo ni idea de donde he sacado tanta habilidad, pero me he levantado de la cama, y me he movido para llegar hasta ella y la abrazo. Solo abrazarla me hace sentir un poco perdido.
¿Debería decirle ahora que la amo? Que desde el primer momento en que la conocí yo estuve deslumbrado por su belleza, que justo ahora me tiene con el corazón tan loco que parece que haya corrido un maratón. Debería aprovechar la oportunidad, ir por todo o quedarme con nada. Tengo que decir algo, ¡si, lo haré!
-Perdón- ok, de todo lo que podía decir esto no era lo que había planeado -No debí desaparecer- ay no, no, no. Lo estoy haciendo de nuevo.
-Dash Dash, prometo no dejarte sola de nuevo- me separo de ella y doy unas palmaditas en su cabeza, seré el amigo, porque prefiero eso a seguir así, a estar lejos de ella -Siento si te hice pasar un mal rato- mis sentimientos resultan ser casi una carga para ella, no quiero que se sienta de esa manera por mi culpa. Me he centrado tanto en mi dolor que no vi lo que ella podría estar pasando. Yo puedo soportarlo, la he visto con otro hombre toda mi vida, puedo soportar que ahora tenga un novio. Siempre supe que no había posibilidad, que lo mío no era más que un sueño imposible, y solo tengo que volver a acetarlo.
Me alejo de ella y le sonrío con dulzura, y me comienzo a quitar el saco y estiro mi mano para ofrecérselo.
-Toma, úsalo- desvío la mirada. La he visto en traje de baño, pero por alguna razón hoy me pone un poco nervioso ese vestido que usa, ¿no seré yo un fetichista de esos raros? pues tal vez… con vestidos… o simplemente es que enseña demasiada piel y estoy susceptible por todo lo que ha pasado -sigo siendo un hombre ¿ok? así que solo cuida un poco más eso cuando estemos a solas- Dibujo unos círculos con mi dedo índice en mi pierna, para evitar mirarla hasta que se ponga el saco.

No importa todo lo que confesé ahora, si no nos volveremos a ver, al menos pude decir un poco de lo que pensé y sentí todo este tiempo. Él ya tiene una novia, y no esperaba que viniera y se declarara de nuevo, aunque en realidad no sé de qué forma lo quería de vuelta. Estaba dispuesta a olvidarlo, pero creo que dependía demasiado de la reacción que él fuera a tener cuando nos encontráramos.
Su abrazo me tomó por sorpresa, y mi corazón se volvió aún más loco. Ya no tenía idea de lo que él me diría, porque hoy su comportamiento no es como siempre, pero esto no lo esperaba ni por asomo.
-No tienes que disculparte -estoy muy confundida, me cuesta mirarlo a los ojos y mejor agaché la vista. Él me pidió disculpas, también dice que no me dejará sola, pero, algo se siente raro. ¿Eso qué quiere decir? ¿Las cosas volverán a ser como antes? No sé si podamos hacerlo, no, definitivamente no puedo. Puede que haya sido indirecto pero básicamente le dije que me gusta, y el solo pensarlo hace que mis mejillas ardan, pero también me duele el pecho- no es tu culpa, ya te dije -qué tonta, sonó exactamente como si lo culpara- solo quería que me hablaras, y aclarar las cosas. Terminar siendo extraños de un día a otro fue doloroso -me reí y sentí una lágrima, pero la limpié apenas comenzaba a caer- gracias -pero al menos así estará conmigo, entonces tendremos que superar esto. Ni siquiera sé porqué es que no se puede, pero probablemente es por el hecho de que le dije que tengo un novio ahora, y él también tiene alguien con quien está saliendo. Y al igual que él quería disculparme, pero entonces parecería que lo estoy rechazando, y no sé si realmente lo hago. Es complicado pensar en nosotros de otra forma, pero no tengo la firmeza para decirle “lo siento, no me interesas de ese modo”, porque sería una mentira.
Él me da su saco y levanto la vista por fin, lo miré confundida, no es que haga mucho frío aquí dentro.
-Oh -desvié la vista y comencé a ponerlo, eso hizo que mi cuerpo entero sintiera una descarga- eso lo sé -cerré el saco sin abotonarlo aún- he sabido que eres un hombre desde hace mucho -desde hace tiempo he comenzado a observarlo más, pero trataba de no ser demasiado consciente, porque eso me traería problemas. Además, ¿cómo lo veré diferente? Es el segundo hombre que he besado en mi vida. Dios, soy patética, me estoy poniendo nerviosa por eso y a mi edad- has cambiado tus lentes -él está tratando, así que yo también debo tratar de amenizar las cosas entre nosotros- y tu peinado -señalé mi cabello haciendo referencia al suyo- te queda mejor -le sonreí nerviosa. Siempre le decía lo bien que se vería sin esos lentes, pero la verdad tampoco le van mal, era parte de su encanto natural.

-Si, si tengo- aseguro y respiro profundo -He sido muy egoísta, solo he pensando en mi - además no puede ser tan malo regresar a lo de antes. Tengo una chica maravillosa con quien salgo, que cada día me gusta más, es muy divertida y comienzo a sentir cosas muy fuertes por ella mas allá de solo el gusto físico. Me he enamorado antes de otras personas aun con Dash en mi vida, y puedo hacerlo de nuevo -es que fue mucho más sencillo para mi huir que tener que enfrentarte. No tienes ni idea de lo avergonzado que estoy por lo que hice- le explico, y espero que entienda que para mi no era fácil llegar y darle la cara como si nada.

Ella se pone el saco pero no es como que eso sea la gran solución a mis problemas, porque pienso en que mi ropa tendrá ahora el aroma de ella. Soy un tipo tan básico y cliché. Siento un cosquilleo en mi estomago cuando dice que sabe que soy un hombre. Me ha puesto nervioso escuchar que diga eso, así que evito su mirada. ¡Somos amigos! ¡Solamente amigos! me repito para tratar de calmarme.
-Jaja, si- y ella parece confirmar que me veo mejor de esta manera -la chica con la que salgo, ella me animó a hacerlo- me río, parece que ella pensaba muy firmemente que mis problemas y mis complejos eran con mi imagen, más bien creo que soy todo yo el problema, mi personalidad, mi manera de ser -Gracias- paso mis dedos por mi cabello, me parece que no es para tanto.
Estiro mis manos hacia ella y tomo los bordes del saco a la altura de su abdomen y lo junto para que no se pueda ver prácticamente nada.
-Jeje, lo siento es que hace mucho que no te veía y estás muy hermosa, eso lo sabes, pero creo que he perdido un poco de mi fuerza para controlar a donde va mi mirada- admito riendo nervioso, porque si, acabo de decirle que no puedo mirarla a los ojos por ver otras partes de su cuerpo -Perdón, no debería decir eso, ¿es raro, incómodo? debe serlo- bajo la cabeza y despeino mi cabello un poco frustrado, por no ser como de costumbre con ella. Me dejo caer en la cama y tallo mis ojos.
-lo siento, es que esta noche estoy un poco más idiota de lo normal- ¿Pero es que como voy a actuar normal? dijo que no le soy indiferente, que me ve como un hombre y yo voy y le digo “vamos a ser amigos de nuevo” ¡pero que clase de imbécil no aprovecha la oportunidad? si, señoras y señores, yo soy ese imbécil.
-¡y tu novio? ¿Que edad tiene?- pregunto más que nada como algo masoquista, a ver si así dejo de estar tan raro.

No lo puedo negar, realmente huyó solo pensando en cómo se sentía. Pero este tiempo también pensé solo en lo que yo quería en cómo me sentiría al verlo. Le hablé normalmente esperando que me tratara igual que siempre, sin detenerme un poco a pensar en lo que él estaba esperando de mí.
-Entiendo -sonreí ligeramente, creo que pudimos haber tenido esta plática desde antes, pero ambos esperabamos que el otro avanzara primero- yo también me sentí avergonzada -le confesé riendo- a mí edad avergonzarme por eso -dejé de reírme y tomé un poco de aire. Es obvio que para mí fue más que “nada”, y que no me molestó. Si hubiera sido el caso, ni siquiera intentaría tratarlo normalmente.

Me sentí incómoda cuando mencionó a la chica con la que sale. La recuerdo, es muy bonita y llamativa, ellos se ven muy bien juntos, como si se complementaran. Y no me siento para nada como los amigos deberían cuando ven a alguien importante ser feliz.
-Vaya. Ella es muy bonita, también debe ser una buena persona si te gusta tanto -él es diferente, sé que no se fijaría en una chica superficial cualquiera. No sé qué le haya dicho, tal vez encontró las palabras adecuadas, ya que a mí nunca me hizo caso, aunque siempre fue una broma- aunque tus lentes feos y amarillos también me gustaban -no sé porqué he dicho eso, como si él fuera a usarlos de nuevo solo porque dije que me gustan.
Y de nuevo hace algo extraño, y sentí cómo mi pulso se aceleraba por cada palabra que salía de su boca. Me incomoda, pero no porque no me quiera ver guapa para él, sino todo lo contrario. Él dijo que seamos amigos, es lo más lógico, hay tanto en contra. ¿Por qué siquiera lo considero? Él tiene una novia, pero me pone nerviosa si me elogia demasiado.
-Gracias -aun así me siento feliz, frustrada pero feliz. Tomé mucho aire, y abotoné el resto del saco- no es incómodo, pero no deberías decirlo si tienes una novia, no está bien -no pude expresarme correctamente, en cambio parece que su novia me parece un impedimento- ¿años? -¿qué tiene de relevante su edad? En general, no quiero hablar de mi nuevo novio con él. Lo mencioné para que sintiera celos, pero ahora soy yo la que no desea mencionar a ninguna de nuestras parejas- 27 -me da un poco de vergüenza admitirlo- pero no es mi novio, solo… bueno, salimos algunas veces y compartimos gustos -tampoco quiero que piense que nos estamos acostando, porque vamos, ni siquiera hemos llegado a eso. Soy tan patética que me conseguí un buen amante solo para charlar. Leigh es agradable, es guapísimo, gracioso, y empatiza muy bien con lo que yo siento, pero él todavía está enamorado de esa persona, un hombre- tu chica, ¿cómo se llama? Se ve tan joven -sí, una chica ideal para él. Joven, bonita, parece que tiene un buen trabajo, sin hijos, ni algún esposo por ahí que la lastime.

Resoplo un poco molesto cuando dice lo de su edad, realmente no se que piensa ella, pero tener treinta no la vuelve una anciana, ni mucho menos una experta en la vida que debe experimentar emociones como la vergüenza.
-Hablas como si tuvieras todos los años del mundo - me quejo un poco, no lo puedo evitar, odio que hable de su edad como si yo fuera un niño que no la entiende.

-Lo es- aseguro con una sonrisa, porque sin duda, he tenido mucha suerte de conocer a Hana, ella es muy especial. Todavía me cuesta creer que aceptara salir conmigo. Sonrío un poco apenado cuando menciona mis lentes.
-pues parece que eres la única que pensaba eso- comento riendo, porque si, todo el mundo siempre se quejaba de esos lentes, sobre todo Dima.

-¿No debo? pero, no… amm ok, entiendo- ella tiene razón, no debería decir esas cosas, aunque no tenga otras intenciones, creo que al haber dicho lo que siento por ella, ya mis palabras se pueden mal interpretar con facilidad. Aunque Hana y yo aun no tenemos una relación, espero que lleguemos a ser novios.
-¿en serio? oh…- pensaba que sería alguien mayor, porque siempre parece acomplejada con esos detalles, pero no, es un hombre apenas dos años mayor que yo. Creo que eso no me gustó mucho descubrirlo.
-oye no me tienes que explicar, mientras tu estés feliz- muevo mis manos para restar importancia a eso. Si, no es que sea feliz, pero no es como que no esté acostumbrado a saber que ella y si vida no son algo en lo que pueda intervenir.
-Se llama Kim Ha Neul, pero le gustan que le digan Hana- no puedo evitar sonreír al hablar de ella, siento que por fin tengo suerte gracias a ella -Es maquillista, y seguro a mi padre le agrada que sea mitad coreana- comento riendo un poco, porque creo que es de las pocas cosas que mi padre podría considerar que he hecho bien por una vez -¿Y tu amigo con quien con quien compartes gustos?- creo que lo estoy tomando bastante bien, supongo que a final de cuentas ya estoy acostumbrado -¿Tienes alguna foto? creo que debo darle mi aprobación- digo con una sonrisa juguetona. Intento ser la persona que siempre he sido con ella. Y sé que lo puedo lograr, el amor no debería ser obstáculo, debería ser una razón para esforzarme más por ella y si su felicidad está con este nuevo hombre, yo no voy a hacerle las cosas más complicadas.

Sé que no dice las cosas para confundirme, lo hace porque realmente lo piensa y siente. Él es un chico honesto, hasta creoque es torpe para tratar con una chica, pero es justamente ese su encanto. Es tan diferente a todos, no dice las cosas que alguien quiere escuchar, y sin embargo termina haciéndome sentir bien. Con él era muy cómodo estar, y aunque dice que volveremos a esos días, no creo poder relajarme cuando lo tenga cerca. Ya de por sí pensaba que se veía atractivo, que era demasiado raro que no tuviera una novia. Pero ahora es más intenso. Sus ojos, su sonrisa, esa manera en la que habla y el saber que aunque se ve muy inocente, tiene pensamientos indebidos. No puedo verlo simplemente como amigo.

-Bueno, es que preguntaste… -sí, no quiere explicaciones sobre mi relación o cómo sea, yo tampoco quiero de la suya pero como he preguntado, es obvio que me iba a responder. Y no solo lo hace, sino que se ve feliz. Lo miré seria, pero luego sonreí ligeramente. Si está feliz eso debería ser suficiente para mí- ¿a tu padre…? Oh, vaya, es una suerte, qué coincidencia tan rara -me reí nerviosa, ese comentario fue algo que no me agrado escuchar. Él no se lleva bien con sus padres, pero ha dicho que ella seguro le agrada aunque solo sea por su nacionalidad- me alegro que las cosas vayan bien para ustedes -es un poco mentira. Claro que me gusta verlo feliz, pero sí, me siento celosa, soy una tonta por pensar de ese modo- mi amigo -me reí. Tal vez esto es lo que necesitamos para volver a lo de antes, platicar sobre las personas que nos gustan- es un poco más que eso, pero digamos que vamos lento -tal vez él entienda porqué, me da un poco de vergüenza excusarme porque a fin de cuentas soy una mujer casada- se llama Leigh -sonreí- ¿aprobarlo? -reí de nuevo- sí tengo pero no traigo mi celular conmigo. Aunque seguramente puedas encontrarlo en redes sociales, es muy popular -¿debería decir que es modelo? Él es alguien en quien puedo confiar, no creo que tenga problema- tú también debes mostrarme a Hana, la tengo que aprobar -sentí mis mejillas rojas y reí, es una tontería porque yo ya he visto fotos de ella. Y qué tonta soy, hace un momento mencioné que no era la misma chica, es obvio que yo ya vi sus fotos. Desvié la vista al frente, me siento como una acosadora que ha sido descubierta-  ah sí, amm, ¿y es más joven que tú?  -comencé a jugar con mis manos por los nervios. No me gusta hablar sobre esto pero él ya decidió, y yo tengo que esforzarme. Además, si pude fijarme en él, puede que realmente me enamore de Leigh. Él ama a ese chico, pero dijo que lo intentaría y sé que no es alguien que mienta, es una buena persona.