Vuelve [Dacy]

Recuerdo del primer mensaje :

La fiesta de hoy fue como cada año, muy estresante. Los preparativos anteriores, el revisar que las cosas estuvieran en orden hoy y saludar a cada uno de los invitados, a eso sumandole que nosotros teníamos que presentarnos como la familia perfecta y feliz, aun si nuestros dos hijos ni se dirigían la mirada.
Cenamos normalmente, pude ver a Lu y algunos amigos de Andy. Lu apenas me saludó y se alejó de nuestra mesa, y Andy y Dima se dispersaron cuando la cena terminó. Mitya y yo pasamos la mayor parte de la fiesta tomados de la mano, cariñosos y esos protocolos que cada año llevamos a cabo. Parece que hoy su humor era bueno, no sentí ese cariño tan falso, pero, todavía no se siente como antes.
-Subiré, me duele un poco la cabeza -me despedí de un beso de Mitya, él me dijo que volviera y solo asentí, pero probablemente termine dormida. Aquí ya nadie me necesita, al menos los invitados están divirtiéndose.

Llegando a mi habitación tomé mi celular para enviar un mensaje a Leigh, a veces creo que lo abrumo al contarle todo, por eso esta vez solo le dije que estaba a punto de dormir y le deseé buenas noches. Elsalir con él es muy extraño, pero no sé si se puede considerar mi amante, prácticamente hacemos lo mismo que antes, solo que ahora nos besamos y pasamos más tiempo juntos. Pero él todavía está enamorado de esa persona, y yo no puedo deslindarme fácilmente de Mitya.
Dejé el teléfono en el buró y me recosté, tengo que cambiarme de ropa, pero puede que Mitya me llame para despedir a alguien si es que preguntan por mí, esas personas no son muy prudentes.
-Qué cansansio -me quedé unos minutos acostada. Lu no me habló, a pesar de que intenté hacerle plática en cuanto lo vi, me respondió muy cortante con el mismo buen humor de siempre y se alejó. Tal vez sea lo mejor, aunque lo extraño. Pensé que si comenzaba salir con mis amistades no le tomaría tanta importancia, pero nada ha cambiado. Me agrada salir con Takumi y Leigh, son buenas personas y de repente olvido todas mis preocupaciones. Pero la compañía de Lu no era un método desesperado, recién es que lo comprendo.

Luego de un rato de ver TV me levanté para ir a ver si Dima o Ilya habían llegado, quiero pedirles que digan abajo que nadie me moleste ya, porque si llamo a Mitya para eso no le va a importar y querrá que siga acompañando a los invitados.
-Cielo -toqué un par de veces pero nadie contesto, y usé la llave electrónica del cuarto de Dima, si Ilya subió, seguro estará aquí a pesar de haber rentado una habitación para él. Al entrar vi la TV prendida, creo que está en el baño. Seguramente es Ilya, Dima no es fanático de ver la televisión- amor, ¿estás bien? -dejé la llave en uno de los muebles luego de cerrar la puerta y me dirigí al baño, pero me detuve cuando la persona salió- oh, hola -sonreí inconscientemente, y me quedé unos segundos sin saber qué hacer- ¿y Dima? -si él está aquí dima también debería, pero obviamente no están ambos en el sanitario. Regrese a la cama y me senté, ni siquiera me quité el vestido de noche- ¿cómo has estado? Tanto tiempo sin hablar contigo -intenté actuar normal, pero no puedo negar la sensación en mi pecho, los latidos acelerados y mis manos moviéndose con nerviosismo.

Dasha:

Recámara:

-Si, aunque es un poco raro ¿no? tiene esa mentalidad de que un coreano debe casarse con alguien que sea coreano, pero él se casó con una extrajera- hago una mueca de inconformidad, pero es la verdad, mi padre no es la persona mas lógica del mundo, es un genio de los negocios, pero para otras cosas es realmente un poco complicado, sobre todo con el trato con las personas. Es un hombre estricto, a veces un poco machista, para su mala suerte mamá no es alguien que se deje dominar, ella también tiene su carácter, a veces no me explico como siguen juntos si son tan diferentes.
-Gracias- rio un poco nervioso, es la primera vez que hablo de una chica que me gusta con Dasha.
Ella dice que van lento, ¿A que se refiere con eso? ¡ahhhh! no lo entiendo, y quiero saber. Soy realmente un masoquista… pero es que si van lento, eso puede significar tantas cosas, y quiero saber que tanto ha pasado entre ellos, pero no, lo mejor es no saber, no quiero que mi mente imagine cosas. Me muevo un poco como si un escalofrío recorriera mi cuerpo de solo pensar en eso.
-¿Popular en serio?- busco mi celular para ver a que se refiere y escribo el nombre -¿y sale si solo pongo su nombre?- pregunto dando buscar para ver que cosas me salen pero creo que es obvio que necesito un apellido o alguna otra información para saber de que se trata -¿te sabrás su apellido?- pregunto enseñándole la pantalla para que vea que no me ha salido nada que ayude.

Ella habla sobre que le muestre a Hana, y bueno, tal vez debo hacerlo, ya que yo he insistido tanto con lo de su… lo que sea que sea ese tipo de ella.
Busco en entre mis fotos alguna foto de ella de las veces que hemos salidos, en su instagram suele poner más cosas de su trabajo que de ella, por eso mejor busco de las que le he tomado yo, sobre todo cuando está despistada. En donde sale chistosa, siempre se las muestro para molestarla, pero hay otras que no le digo nada y solo las guardo porque se ve muy bonita.
-Mira, es ella- digo mostrando de nuevo la pantalla ahora con la foto de Hana -si, es más joven. Tiene veinte- me rio un poquito nervioso, a mi no me importa eso de la edad, pero entiendo que cinco años de diferencia, para algunos no es poco.

hana:

Sus padres son complicados. Él es un buen hijo que tiene un trabajo y también estudia, y aún así se sienten inconformes. Supongo que para los chicos, Mitya y yo también somos algo complejos, pero comparados con ellos somos mucho más flexibles, aunque seguro que para ellos hemos fallado en otro aspecto.
-Bastante -dije ya más relajada, la plática se está tornando menos densa- tal vez es por las expectativas que tienen sobre ustedes pero no sobre sí mismos, es algo complicado de entender -es contradictorio, pero así somos los humanos en general, sobretodo los padres. Siempre esperamos que ellos hagan todo bien aún cuando nosotros nos equivocamos todo el tiempo.

Parece muy intrigado por Leigh, no pensé que de verdad fuese a buscarlo.
-No creo, nunca me he puesto a buscar por Internet -me refería más bien a sus redes sociales, y puede que lo haya visto en algún anuncio o… puede que no- Darcy -espere  que buscara, pero creo que no salió algo directo- amm abre tu aplicación de Instagram -cuando lo hizo, le pedí su teléfono y escribí el nombre de la cuenta de Leigh. Esto es muy raro, pero una vez lo encontré, piqué a una de sus fotos y se la mostré- es modelo -me siento un poco tímida al decirlo, porque pensar que un modelo se fije en una mujer casada teniendo tanta chica linda alrededor, es muy extraño. Pero Leigh es distinto, a pesar de su fama sigue siendo alguien muy sencillo y amable.
Y como pensé, él no tarda en buscar una foto de la chica, ni siquiera recurre a sus redes sociales, parece que tiene su galería personal de ella, puedo notar de reojo el llamativo cabello de ella.
-Es muy linda -en efecto, se ve sencilla y muy bonita. Puede que yo me vea mejor, pero siempre procuro andar muy bien arreglada. Ella es más al estilo de él- es muy joven -diez años menor que yo- bueno, no lo es tanto para ti, seguro se ven lindos juntos -no quiero ver más fotos de ellos juntos. Tal vez después pueda tomarlo de mejor forma, pero por el momento me incomoda mucho. Él luce muy inocente, pero si tiene esa clase de pensamientos conmigo, también debe tenerlos con ella. Puede que hasta ellos ya… pero claro, son jóvenes- y sabes, es mucho más linda que la otra chica. Espero que te trate muy bien, de verdad lo mereces, eres alguien maravilloso -de nuevo terminé hablando de más, y para intentar no darle tanta importancia le sonreí.

Leigh:

-Supongo que son cosas de padres- le resto importancia al asunto, ya hace tiempo me he resignado a no entender a mis padres, simplemente somos personas muy diferentes, yo no puedo cumplir sus expectativas y para mi ellos han sido unos padres deficientes. Les tengo cariño, pero más que nada por quienes son y no por lo que hayamos vivido y esas cosas que harían un lazo familiar más fuerte. Eso no existe entre nosotros.

Le hago casi y entro a mi instagram, y tomó mi celular para buscar una foto de él.
-Así que modelo- comento tomando el celular para mirar la foto. Parece un tipo normal, en ola foto no me parece que sea para tanto.  Así que paso a la siguiente foto, y luego a la otra y otra… y comienzo a entender como aunque no hay tanta diferencia de edad entre él y yo; Dasha si se pudo fijar en él.
-¡oh por dios Dash! ¿ya viste ese abdomen?- digo sorprendido, no es que nunca haya visto a un hombre con un cuerpo así de trabajado, pero no pensé que sería mi competencia. No espera, no hay competencia, y hay manera de que yo pudiera ganar -oook tu chico es… ¿hermoso? - creo que acabo de sonar un poco raro al decirle hermoso, pero ese hombre y yo estamos a niveles completamente opuestos. Ahora entiendo porque pese a mi edad me siguen tratando como si fuera un niño.

Obviamente ella hace una mención sobre la edad, es que Dash tiene un serio problema con eso.
-Es la misma diferencia de edad entre nosotros- no puedo evitar ese comentario, porque seguro para ella, puede estar bien que yo salga con una chica cinco años menor que yo, pero con una de cinco años más, eso ya no está tan bien.
Sonrío un poco por su comentario, Iskra es una chica hermosa, nunca voy a negar su belleza, pero no solo su atractivo lo que me gustaba de ella. Con Iskra es con la única mujer que puedo ser realmente yo. Nos conocimos siendo amigos, sin otras intenciones y lo demás solo se dio, por eso dolió tanto lo que pasó, pensaba que podría tener de nuevo eso con ella.
-si, es una chica muy dulce -no creo que haga falta que diga que Hana quiere a otra persona, y eso me asusta, yo me estoy entregando a lo que podemos tener, y me asusta que ese otro tipo se aparezca de nuevo en su vida y yo la pierda.

No sé si reír o sentirme nerviosa por cómo elogia a Leigh, lo tomó bastante bien, ¿no? Es casi doloroso, pero para la relación que hemos acordado es lo mejor, poco a poco me iré acostumbrando. Al menos ha recobrado esa cómica manera de expresarse, es de lo que más me gusta de él.
-Sí, lo he visto -me incliné para mirar las fotos también- en fotografías -mi cara se sintió caliente, ese comentario sonó como si nosotros ya… pero eso sería lo normal, no hay razón para avergonzarse- ¿hermoso? -ahora sí me reí más fuerte- sí, él es muy atractivo. Pero también es una buena persona, tiene un corazón muy noble y es alguien muy entregado -sonreí y miré mis manos. Creo que algo que llamó mucho mi atención fue esa devoción que tenía a ese hombre. Pensé que sería maravilloso que alguien me quisiera así, y que a diferencia de él, yo no dejaría que sufriera. Ahora lo estamos intentando, es complicado, yo no soy la persona que él ama ni él la que yo… pero nos comprendemos, él está tratando y yo debería poner más empeño en lo nuestro.

No me había puesto a pensar en la diferencia de que hay entre él y yo es la misma que la de ellos, solo sentía que era demasiado joven, a veces olvido que es mayor que Andy.
-Cierto -cinco años… diez son mucho, pero cinco ya no tanto. No tiene caso pensar que la edad podría ya no ser un problema, porque no hay posibilidad- me estás alcanzando -creo que Mitya me ha robado demasiados años. Tal vez por su edad es que a veces yo me siento más grande, me he desarrollado a su modo y dentro de la madurez que me exige, que perdí esa etapa soñadora.
Él se expresa muy bien de ella, y creo que sentir desagrado de la chica solo porque es su novia no es bueno.
-Bien, ya aprobamos al otro -no quiero hablar de ellos, debo encontrar un tema de conversación ya. Miré alrededor y noté la botella, me levanté hasta ella y la tomé- ¿tú estuviste bebiendo? No me digas que fue Dima -suspiré y me senté con la botella aún en la mano, no quiero que Dima tome demasiado, últimamente ha vuelto al comportamiento de antes y me preocupa- ¿tienes otra copa? -me levanté a buscar, pero tropecé con la alfombra y por mantener el equilibrio, regué el alcohol sobre parte de mi pecho y ropa. Chasquee la lengua y enderecé la botella, parece que hoy no es un buen día. Suspiré y la dejé en el suelo y me senté, estos malditos zapatos hacen que me duelan los pies- ya dejé un desastre aquí -ni siquiera me preocupo por limpiarme, me siento un poco frustrada, y aunque es un insignificante accidente, se siente como si hubiese pasado algo muy malo. Creo que es porque no me siento de humor- bebe conmigo -no lo miré y dejé los zapatos sobre el suelo, sentí un descanso increíble- creo que lo necesito -no debería hacerlo, es mejor volver a la recámara. Pero hoy es un día especial se supone, y me cansé. Me cansé de siempre mantener la calma, de ser la tonta paciente, de no decir nada, de esperar. Estoy cansada de todo y si me voy a dormir, seguramente termine llorando. También me cansé de llorar.
Me subí a la cama y tomé la copa que estaba en el buró, esa que todavía tenía un poco de alcohol y lo llevé a mi boca, ni siquiera sé si era de él o de Dima.

¡Pero claro que lo ha visto! esto es tan incomodo para mi, si de por si me sentía tan inferior y pensaba que ella era alguien imposible, ahora es como recibir un golpe directo en mi ya de por si, maltratado orgullo.
-¿En fotografias? ¿ustedes..?- ay dios, no debo preguntar estas cosas, pero es que ella lo ha dicho, eso significa… bueno, a mi no debería interesarme su nivel de intimidad, no debo meterme en eso.
Sonrío un poco herido cuando describe al tipo, sería más fácil si fuera un tipo pedante y engreído, pero no, tiene que ser una buena persona.
-Me alegro de escuchar eso- si, me alegro por ella, no me siento feliz por mi, pero si ella está feliz, entonces puedo aceptarlo.

Bajo la mirada, creo que no debí decir eso de la edad, es como que no puedo evitar que las cosas se vuelvan a poner incomodas.
-Jeje, si, tal vez cuando sea mayor que tú entonces ya…- me detengo de golpe y toso nervioso. Casi digo algo que sería super, mega, hiper incomodo.
Miro a la botella que usé para emborrachar a Dima, me pregunto como les estará yendo a esos dos, si hoy no se han arreglado, tendré que buscar algo más para ayudarlos.
-Ambos- rasco mi cabeza un poco apenado, porque he hecho que su hijo se emborrache -¿Otra? amm, si, deben estar eeeen- me levanto de la cama para caminar a buscar otra copa.
Tomo la copa y me giro para mirarla cuando escucho un ruido, ha tropezado, no me da tiempo a más que extender los brazos, pero estoy muy lejos como para que sirva de algo.
-¿Estás bien?- le pregunto acercándome, y por lo que acaba de ocurrir mi saco ya no está cubriéndole del todo y peor aun, se ha mojado -o ok- me acerco mientras ella se acomoda en la cama y toma mi copa y bebe de ella.
¿Acaso esto es una prueba? Dios… sé que he demostrado una gran fuerza de voluntad, ¿pero no crees que esto es demasiado?
Me acerco y me siento en la orilla de la cama, pero no me acerco demasiado.
-Puedes, puedes usar mi saco para - con un movimiento de mi mano hago el ademan de secarme el pecho, mi cara debe de ser del color de mi cabello, así que no me atrevo a mirarla.
Me estiro a tomar la botella y me sirvo la copa llenita, y entonces la tomo de golpe. No ha sido buena idea pero lo hice con la intención de refrescarme, pero solo siento ese calor en mi garganta.
-hoy me comporto algo primitivo ¿cierto? jajaja- acerco mi mano a mi boca y comienzo a morder mi uña -hace mucho que no te tenía tan de cerca, y siento que hoy estoy siendo demasiado estúpido. Te he visto hasta en traje de baño y ahora estoy nervioso solo porque te mojaste la ropa- me río nervioso, como si me burlara de mi mismo.

-Amm sí, he visto su abdomen en fotografías -lo miré confundida, es un poco incómodo y sobretodo embarazoso, hablar sobre el abdomen de Leigh. Claro que soy consciente de que tiene un muy buen cuerpo, pero todavía no es algo que haya comprobado por mí misma, soy demasiado lenta, cualquier mujer habría aprovechado las oportunidades que yo ando desperdiciando- gracias -ambos estamos con una buena persona, tal vez así debe ser. La chica parece quererlo y ser linda con él, y Leigh también es un gran hombre, entonces no debería tener dudas, porque creo que las de él son muy pocas.
Pero sus comentarios me siguen confundiendo, ¿a qué se refiere con eso de recién? Realmente no puedo tomar con seriedad su propuesta de ser amigos. Pero de qué me quejo, yo misma pensé algo similar antes que él lo mencionara.

-Estoy bien -digo sin importancia, fue más vergonzoso que doloroso, por fortuna no me torcí el pie ni caí al suelo con la botella en la mano- ahh -solté un gran suspiro y sonreí luego de ese trago, le estiré mi copa para que sirviera más, porque era muy poco lo que tenía- es verdad, gracias -puse la copa a un lado y me quité el saco, y comencé a limpiar con las mangas- lo siento, lo lavaré después -ha quedado muy sucio, debería mejor levantarme por una toalla, pero qué más da. Cuando terminé de limpiarme lo dejé al lado contrario de la cama de donde él estaba
Me quedé seria mirándolo, él ha comenzado a tomar también, y ahora dice cosas que son un poco incómodas, pero mucho mejor que hablar de su chica. No sé cómo sentirme, por una parte me regaño por actuar tan descuidadamente, pero otra parte de mí quiere averiguar y experimentar. Pero también, él no es la persona con la que debería “jugar”. No, esto no es un juego, si fuese alguien más yo simplemente evitaría problemas a toda costa.
-Eres un hombre después de todo -agarré la copa y tomé un poco, y me moví para hacerle espacio. Palmee sobre el colchón y lo miré con una sonrisita, tomé más alcohol para tener un poco de valor y no terminar saltando lejos de él- vamos, dije conmigo -me reí, y tomé más, el último contenido de la copa- ¿siempre has pensado esa clase de cosas? -me siento un poco más ligera, ¿en verdad se me ha subido tan rápido? No estoy borracha, tome algunas copas en la fiesta pero muy lentamente, no me gusta el alcohol o cualquier bebida que no sea saludable- vaya… -recordé las veces que lo abrazaba sin cuidado. O cuando fuimos a esas cortas vacaciones y yo… fui un poco inconsciente. Me serví más alcohol para no pensar mucho- parece que necesitaremos más -le dije sonriendo, y moví la botella de un lado a otro- ¿te arrepientes de haberme besado? -miré la botella. Mi cara se siente caliente. No sé si es por el alcohol o por lo que acabo de decir, o por los pensamientos que tengo y mis deseos reprimidos.

Ella confirma que no ha visto su abdomen mas que en fotos, eso quiere decir que no lo ha visto desnudo y por ende ellos no han tenido relaciones. Está demás decir que no deberían importarme esos detalles, pero me importan. No importa si cada quien toma un camino diferente, no importa si jamás tendré oportunidad, sigue siendo la mujer que fue mi primer amor, y por eso me importan ese tipo de detalles morbosos, porque me da un poco de alivio saber que no han llegado a eso.

Parece que solo se ha tropezado, pero está bien, así que me siento mas tranquilo, o al menos lo estaba hasta que noto que se ha mojado con el alcohol.
¡¿Pero por que se quita el saco?! no puedo evitar mirar de reojo  como se limpia.
-Claro- contesto solo por inercia, no me importa mucho ahora el estado de mi saco, sigo más atento a la manera en que se limpia y a la humedad que ha quedado en su vestido. Realmente no sabía que podía ser tan pervertido, siempre me evitaba esos pensamientos, pero ahora no solo están fluyendo.
-Eso suena mal ¿no? no es como si solo los hombres tuviéramos esa clase de pensamientos, ¿O si?- no me gusta pensar que solo por ser hombre, me dejo dominar por mis deseos, no es como que vaya a hacer una locura solo por las cosas que pasan en mi cabeza.
Obediente me acerco y me acomodo donde ella me indica.
-No… bueno si. O sea, no siempre, antes era más sencillo distraerme en algo más para no pensar esas cosas- admito algo avergonzado, pero no puedo evitar ser honesto.
No recuerdo haberla visto tomar de esta manera, solo algunas copas durante las fiestas, pero esta vez parece que es más y más rápido. Acerco el vaso a mis labios para dar un trago, pero su pregunta hace que me ahogue un poco y comienzo a toser.
-Si- contesto cuando recupero el aliento -y no- bajo la mirada y miro el liquido en el vaso -Si no lo hubiera hecho, las cosas entre nosotros no estarían tan raras, pero, cuando has estado enamorado de una persona toda tu vida… es algo increíble poder cruzar esa barrera- acerco de nuevo la copa para beber su contenido. No soy nada bueno con el alcohol, así que no debería tomar más, seguro que en poco rato ya voy a estar mareado. Me estiro para dejar el vaso en el mueble, no quiero ser un idiota por culpa del alcohol, si apenas estamos recuperando un poco de lo que yo dañé, no quiero arruinarlo de nuevo.

Supongo que sonó prejuicioso mi comentario, pero él tiene razón, no solo él está pensando esas cosas. Aquel día que lo vi en bañador también pensé que se veía bien, no llevé tan lejos mis pensamientos pero solo porque yo suelo reprimirme, pero ahora, inevitablemente están saliendo.
-No, tienes razón -sonreí y no sé ni porqué, me da pena hablar sobre esto con él, tendría que estar evitando dirigir la plática por un rumbo extraño pero hago lo contrario- aunque la verdad yo no suelo pensar mucho eso. Bueno, en este momento no es el caso, porque ya sabes, si hablas sobre algo, piensas automáticamente y… -me quedé callada, no tengo que explicarlo, él lo entiende, qué vergüenza.
Cuando dice que sí ha pensado de esa forma desde hace tiempo, mi corazón comienza a aumentar el ritmo de sus latidos. Yo ni siquiera lo imaginaba, y a veces era tan descuidada.
-Nunca lo imaginé -comencé a reírme. No me molesta, no sé si lo habría tomado de la misma forma antes, probablemente me habría sentido un poco traicionada. Pero en este instante me siento bien, me preocupa y quiero pensar que es por mi ego, a las mujeres nos gusta sentirnos atractivas y deseadas- eres un niño travieso -¿por qué dije eso? Rápidamente callé mi risa y miré mi copa- no, no eres un niño, pero lo demás sí -intenté hacer una broma de eso. Vamos, ¿no eras tú el de las bromas? Quedé como una completa tonta por ese comentario, o por todo en general. Pero me distraje cuando comenzó a toser y rápido llevé mi mano a su espalda- ¿estás bien? -y luego la alejé, pero esta vez no le quité la mirada de encima.
Sentí cosquillas en el estómago y dejé la botella en el buró, otra vez, cada que dice algo bonito me pasa. Años sin sentirme así y ahora por ese comentario regresan esas sensaciones. No solo con él, también cuando Leigh me besó la primera vez y cuando me dijo cosas bonitas me sentí demasiado avergonzada, y aunque ya me voy acostumbrando a nuestros besos, las primeras veces la sensación era muy intensa. Esto de ahora es algo muy sencillo, si se supone que ya me atreví a estar con alguien más aunque sea poco a poco, esto no debería emocionarme. Pero claro que no es solo porque haya pasado tiempo, sino porque es él, Luciel.
-Eso es un no -mi voz sale nerviosa, y tomé más alcohol, mi boca se siente seca- me pasa algo similar -suspiré y miré al frente, siento como si no debería decir lo que está a punto de salir. Pero el alcohol como que te afloja la lengua y te vuelves innecesariamente honesto- la diferencia es que yo no he estado enamorada de ti toda la vida. Se supone que amo a Mitya, incluso si salgo con alguien más, todo fue por una razón egoísta. Aún así, cuando te vi allí abajo me sentí nerviosa y feliz. No estaba asqueada o incómoda. Solo quería hablarte y saber qué pensabas, y qué debería pensar yo -lo miré de nuevo, siento algo caliente que recorre mi cuerpo- estoy confundida -me reí y llevé la copa a mi boca- creo que debería dejar de tomar -pero no llevé dejé la copa lejos, la mantuve entre mis manos.

¿En este momento no es el caso? no entiendo a que se refiere, porque no la veo capaz de imaginar ni por asomo lo que pasa por mi cabeza. ¿Pero en serio está pensando en nosotros? no, no puede ser, o sea, tal vez un poco, por la manera en que se ha desviado la conversación, pero seguro es algo incidental, y no porque desee que algo pase. Si, eso tiene que ser, yo solo debo dejar de dar tantos significados que no existen.
-Jeje, supongo que no doy mucho esa imagen- mi risa ha sido nerviosa, porque no sé si con todo esto, ella cambiara mucho su imagen de mi, no quiero que me vea como un pervertido, aunque creo que lo que he dicho hace parecer que lo soy.
Me río cuando me dice que soy travieso y luego se corrige.
-Dash, se que era una broma, no tienes que corregirte ni dejar claro todo el tiempo que soy un hombre- le digo aun riendo un poco, ella se toma muy en serio todas las cosas.
-Si, solo se me fue chueco- señalo mi garganta y levanto el vaso para que sepa de lo que hablo.
De nuevo pienso que debí callarme, seguro que ha sido demasiado incomodo para ella tener que escuchar eso. Pero la miro expectante cuando dice que le pasa algo similar, pero bajo la mirada en cuando inicia con esa directa y dura realidad, ella no está enamorada de mi, ama a su marido.
No entiendo a esta mujer, dice cosas que confunden. Y es extraño, no puedo esperar a ser amado por ella, pero escuchar que está confundida, aun si acaba de decirme que ama a su esposo. ¿Debería seguir el consejo que hace un rato le di a Dima? arriesgarme y luchar, ella ha dejado claro que no le soy indiferente, pero, no es tan fácil. Esos dos se mueren de amor él uno por el otro, pero entre Dash y yo, solo soy yo quien está de esa manera.
Si me arriesgo, no solo podría arruinar lo poco que hemos recuperado, podría arruinar lo mío con Hana, no soy tan valiente, como para arriesgar todo.
-jajaja, ¿como te ibas a sentir asqueada? solo fue un besito- digo riendo como si eso fuera gracioso -solo fue así- acerco mis dedos índices para que se toquen punta con punta, un toque pequeño y rápido -eso ni debería contar como un beso, ¿no crees? fue tan pequeñito- suspiro pesadamente cerrando mis ojos y apoyando mi cabeza en la acolchonada cabecera de la cama, me comienzo sentir un poco mareado. Diría que solo he tomado dos vasos y que eso no debería afectarme, pero los llené bastante, y no acostumbro a tomar, tampoco he comido, subí aquí a platicar con Dima antes de cenar.
-mi cara se ha dormido- digo de repente tocando mis dedos mis mejillas -Mira, toca- me muevo poder mirarla frente a mi y tomo una de sus manos para que acaricie mi mejilla y me río por la sensación mientras hago que su mano pase por mi piel -oh, espera- me quedo pensativo -tu no puedes sentir que se entumieron- comento riendo por lo absurdo que es lo que acabo de hacer.
Me siento con las piernas cruzadas, ya no me preocupo por regresar a donde estaba. Miro que aun sostengo su mano y comienzo a jugar con sus dedos. Tomo su dedo pulgar.
-Este cerdito se fue al mercado- ahora estoy jugando con el índice -este compró la carne- el dedo de en medio -este la llevo a la casa- luego el anular -este la cocinó- y por fin tomo el más pequeño de todos -y el mas pequeñito, ¡todita, todita se la comió- acerco su mano a mi boca y doy pequeñas y suaves mordidas en sus dedos. Termino riendo como un idiota. Mi cara se siente un poco caliente, pero debe ser por el alcohol, definitivamente ya no debo tomar más. Pero me gusta que por fin me siento relajado, así que he termino sirviendo un poco más en la copa que ella tiene en su mano, y no se la quito, tomo el vaso atrapando en mi agarre también la mano de ella y la acerco a mi boca para tomar un poco y luego la acerco a la boca de ella.
-esta es la primera vez que me ves tomar ¿verdad?- comento porque es verdad, yo casi no tomo, por eso siempre he preferido consumir refresco en las fiestas, es más fácil cuidar así de Dima -Estoy aburrido, juguemos a algo, ¡duelo de pulgares!- digo con emoción buscando de nuevo su mano para comenzar el juego.

El que le reste importancia hace que me sienta más avergonzada por mi inapropiado comentario. Antes no me ponía a pensar en las cosas que decía, él siempre se reía o me seguía el juego, me pregunto qué pensaba entonces y si en verdad los tomaba de esa forma cómica. Aunque en este momento ha dicho que no me preocupe, así que creo que sí, simplemente son eso, bromas, cualquieras la hace.
-Sí, verdad -me reí intentando tampoco darle importancia.

Me enojé un poco por su explicación. Me sentí tonta por darle tanta importancia y que él lo describa como nada.
-Eres la segunda persona que beso en mi vida, además de Mitya, con nadie más lo había hecho -mi voz suena seria, me siento muy poca cosa al confesar esto, pero estoy aun más dolida porque parece que no importa, y sí, es importante. Incluso recuerdo cada beso que le he dado a Leigh, y eso pasa por culpa de mi inexperiencia- si hubiese sido alguien más, aún con eso tan pequeñito que describes, me hubiese disgustado, y lo habría recordado como algo desagradable -siento arder mi cara, ¿por qué me siento enojada de repente?- pero sí, tal vez es cualquier cosa -más y más el calor va a mi cara, y mi pulso está acelerado, nunca había hablado de esa manera a nadie, probablemente un par de veces a Mitya pero no así de agresiva, me empiezo a sentir mal y avergonzada. Analizo cada palabra que le dije y me gustaría regresar el tiempo, solo debí decir que sí, que es verdad. Ahora quiero disculparme, exagere con esto y con darle significado, ojalá no lo hubiera hecho y no estaría dándole vueltas.
Lo miré confundida, creí que estaría enojado conmigo, me siento demasiado apenada.
-¿Es por el alcohol? -dije algo tonto de nuevo, pero estoy nerviosa por todo, me gustaría que el alcohol me hiciera no pensar tanto pero no es suficiente- ah -dejé que moviera mi mano, estoy pensándolo demasiado, tengo que relajarme, porque él dijo que esto no es algo que deba ser recordado o analizado. No lo dijo directamente, pero si es capaz de tocarme así debe pensarlo- eres un tonto -solté una risa sin querer, porque me causó gracia su ilógico razonamiento.
Comencé a reír cuando fue jugando con mis dedos y recitando ese canto infantil, se ve muy tierno, a veces me parece un niño y no me explico cómo alguien a quien veo de manera tan inocente, puede hacer que sienta esas cosas. Y lo miré más y más confundida, no sé qué pasa por su cabeza, o porqué actúa así. No parece que se esté forzando, y cuando apenas roza mis dedos con su boca siento un cosquilleo en todo el cuerpo, y agaché la mirada mientras sonreía por el montón de nervios.
-Sí, es la primera vez, estoy un poco sorprendida. Pero también va para ti, incluso yo no me recuerdo en este estado -la forma en que toma hace que tengamos que estar más cerca del otro, y obediente hice el mismo movimiento que él para tomar cuando me ofrece- ¿eres un niño o qué? -me reí y tomé la copa con la otra mano para dejarla sobre el mueble, porque a este paso terminará quebrándose y eso sería peligroso- bien, pero tengo una petición -el alcohol ya me afectó- si gano… cinco veces, entonces tendrás que hacer algo por mí. Y si tú ganas, yo haré algo por ti. Más o menos como una orden -comenté nerviosa- pero no me vayas a poner algo vergonzoso como salir al pasillo a gritar -le miré con el ceño fruncido- bueno, no es como si pudiéramos salir, pero entiendes mi punto-dije recordando lo que nos tiene aquí, lo olvidé completamente, porque más parece que estoy voluntariamente a su lado.

Abro mis ojos por la sorpresa de lo que me dice, pero no la interrumpo, solo me quedo callado mirándolo, ¿La hice enojar? ¡esta mujer me va a volver loco! es que no la entiendo.
-¿Me estas regañando?- pregunto cuando parece que ha terminado de hablar -Solo intentaba que no te sintieras incomoda- le expliqué un poco apenado, pero me siento regañado, así que ni me atrevo a mirarla a los ojos -No fue cualquier cosa- admito al final porque ¿acaso no es obvio? he dicho que besar a la persona que amas desde siempre, es algo que no puedo desear que no pasara.
-Si, es por eso- me río divertido porque es gracioso sentir que toca mi cara, pero no siento con normalidad.
Singo con el juego de los dedos porque ella ríe, me gusta tanto escucharla reír. Es de esas cosas que he extrañado tanto de ella y apenas me vengo a dar cuenta, por eso me gusta ser un bobo, porque me gusta hacerla reír.
-Yo te he visto tomar, pero solo de manera social- admito con una gran sonrisa. Podría sonar raro, dejo en evidencia lo mucho que le presto atención todo el tiempo.
-Claro que lo soy- digo haciendo un puchero, nunca me ha afectado que me diga que soy un niño, me he hecho inmune a esas cosas. Creo que nunca esperé a que me fuera a ver como un hombre, así que no me molesta.

Me detengo y la miro esperando a que me diga su petición, y sonrío emocionado, esto parece que será muy divertido.
-¿Quieres apostar con un hombre que vive de los juegos?- pregunto con tono de ser muy bueno en esto, aunque esto es puro azar, no tiene nada que ver mi habilidad en videojuegos -Bueno, prometo no pedir cosas tan vergonzosas- digo con una sonrisa.
Comenzamos a jugar, y exagero un poco, me muevo, y trato un par de veces de ganar, pero no uso toda mi fuerza, no quiero lastimarla, pero no por eso la voy a dejar ganar. Aunque no tengo la intención de dejarla ganar.

El miembro 'Luciel Kang' ha efectuado la acción siguiente: dados

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'Dados' : 6

Creo que sí lo hice, le regañé por malinterpretar mis sentimientos, y me siento tan tonta por toda esa explicación que di. Básicamente le dije que me importó mucho lo del beso.
-Un poco -admití, porque si digo que no entonces me estaría contradiciendo. Creo que ahora tenemos un problema de comunicación-está bien tampoco es tan malo -me siento mal ahora. Creo que él cuida mucho sus palabras a diferencia mía, aunque de repente diga cosas que me hacen sentir apenada y a la vez feliz. Y al final admitió que no fue cualquier cosa, y sonreí ligeramente, creo que me puse caprichosa por ese detalle.

Es verdad, yo soy muy mala para los juegos, pero esto no se trata completamente de estrategia, no debes ser un experto, es más como suerte.
-Te voy a sorprender con mis habilidades ocultas -me divierte esto, estoy más relajada y creo que empiezo a ser un poco boba, igual que solía serlo cuando estábamos juntos, siempre le culpaba por contagiarme de ese humor, pero no era algo molesto- entonces tampoco te pediré algo así, porque seguro que voy a ganarte -hablé muy segura de mí misma, pero honestamente no sé dónde quiero llegar con todo esto. En caso de ganarle, ¿qué es lo que le pediré?- y el perdedor además tendrá que tomar una copa completa de alcohol -es algo para matar el tiempo, pero sé que tengo otra intención- bueno, un poco menos, un trago -sí, creo que quiero comprobar lo que siento, inevitablemente he pensado en pedirle un beso.
Me siento avergonzada por mis pensamientos y pierdo la concentración de nuestro infantil juego. Pierdo una vez, dos, luego gano un par más y el resto queda a su favor.
-¿Cómo puede ser? -dije casi indignada mientras miraba nuestras manos. Alcé la vista y miré sus ojos, ¿qué pedirá? Seguramente algo infantil, él es así- ¿qué debo hacer por ti? Aunque claro, yo quiero una revancha -dije muy segura. ¿Qué tan desesperada luzco? Él no sabe lo que pasa por mi cabeza pero si es que gano, y si es que me atrevo a pedirle eso, ese concepto tendrá de mí.
Me levanté de la cama antes de su orden, sentí un mareo y me sostuve del mueble, y caminé por el cuarto hasta localizar otra botella sin abrir.
-Esa ya no tiene nada -señalé la vacía, y con esfuerzo me volví a acomodar en la cama- soy una mujer de palabra -me reí e intenté abrir la botella, y luego de lidiar con ella la abrí y serví en mi copa hasta llenarla- ups, es mucho -me reí de nuevo y di unos sorbos- ayúdame -me incliné hacia él y acerqué la copa a sus labios.

Parece que se siente mejor cuando explico las cosas. Creo que entiendo su reacción, yo en su lugar, aun si no es una persona que amo, no me gustaría escuchar como dice que besarme fue algo insignificante. Eso tiene sentido, y seguro es por eso que se ha molestado, no tiene nada que ver con algo más profundo. Solo que es difícil no mal interpretar todo esto. Hay veces que la gente quiere encontrar significados donde no lo hay y bueno, mis sentimientos me empujan un poco a eso.

-Oh, eso ya lo veremos, pero no te dejaré ganar- digo muy seguro de mi, tal vez este tipo de cosas son las que sacan a flote ese lado competitivo -Puedes pedirme lo que quieras, soy una persona que no conoce lo que es la vergüenza- me río porque es algo que creo nadie va a poner a discusión que no soy una persona que se preocupe por esas cosas -Oh, te estás poniendo ruda, lo vas a lamentar- comento cuando aumenta el nivel de castigo para el perdedor.

Me pongo un poco más alegre cada vez que le gano y me voy sintiendo cada vez más cerca de la victoria y aun ni tengo idea de lo que le voy a pedir.
Te dije que soy bueno para estas cosas- río alegre por mi victoria -Oh no lo sé, ¿que debería ser? y obvio obtendrás esa revancha- piensa Luciel, ¡piensa!
-mmm- me quedo pensativo mientras ella se levanta de la cama. La miro caminar, y me distraigo. Dejo de pensar cual sería su castigo y solo la observo -Bien- contesto a lo que dice, pero no lo pienso mucho, solo fue responder por responder, porque no quiero parecer un idiota que no puede pensar cuando la observa a ella -Oh, cierto, tienes que tomar- ya lo había olvidado. No me gustan ese tipo de juegos, pero supongo que está bien si es con ella.
-¿Qué?- pregunto sorprendido cuando acerca el vaso a mis labios, por reflejo me muevo y termino regando un poco sobre mi pecho pero lo ignoro y solo obedezco lo que ha pedido y tomo, pero es demasiado, y por la sensación del alcohol en mi garganta la tomo a ella de la mano para alejar el vaso, por eso vuelvo a regar más, aunque ahora sobre nuestras manos y la cama. Por el movimiento he hecho que ella quede más cerca de mi, literalmente la he jalado. ¡Eso ni siquiera tiene sentido! si quería dejar de tomar, debí alejar su mano, no acercarla -eres una tramposa- digo porque me ha hecho tomar a mi y yo no he perdido -por eso te pondré un castigo peor…- tantas cosas pasan por mi cabeza, desde unas bastante pervertidas que seguro solo pasarían en películas porno, ¿pero a quien engaño? jamás, yo pediría algo así -quiero que tu…- respiro profundo y la suelto -wooy- y siguen apareciendo tantas ideas de cosas que no me atreveré a hacer -hace calor de repente, tengo que pensar en algo más- me aflojo la corbata y comienzo a desabotonar mi chaleco para quitarme, trato de dejarlo en la esquina de la cama pero solo veo como se resbala por la cama -No, sabes qué, mejor ya no juguemos- digo resignado al ver que mi cabeza va en una sola dirección de pensamientos.

Lo que quiera.Es fácil decirlo, supongo que él no imagina lo que está pasando por mi cabeza. Y ni siquiera sé si tendré el valor de decirlo. Me he aprovechado de este juego para poder averiguar más sobre lo que siento, me siento tonta por esto, pero sé que es mi unica oportunidad. Estoy fallando a lo que dijimos, a su esfuerzo y también a las personas que ahora salen con nosotros.
-Ya tengo pensado lo que quiero -pero el alcohol es poderoso, te hace ser y pensar como tonto, saca lo más sincero de ti y no mide consecuencias.

Al final él ha ganado, y siento un poco de desilusión por no haber pedido eso. Él tal vez pida algo bobo y cómico, pero tal vez sea lo mejor para que yo deje de pensar en nosotros como algo más que amigos. Los amigos no deberían besarse o sentir celos de sus parejas.
-Cuidado -miré cómo había derramado el líquido sobre él, no me quejé por estar más cerca ni la manera en que de repente me atrajo un poco más hacia él. Aunque mi corazón lo resiente, y mi cara está caliente, no creo que sea solo el alcohol- lo siento -le sonreí, no fue una trampa, solo era demasiado y la mayoría ha quedado en la cama y su ropa- oh, ¿en serio? Estoy ansiosa por escucharlo -me reí y lo miré atenta, todavía me parece divertido, hace un rato estaba cabizbaja y ahora me emociona lo que me pueda decir. Las ocurrencias de él me ponen de buen humor, tal vez por eso estoy emocionada. Pero justo cuando va a decirlo cambia el tema, y lo miré confundida, tal vez tiene calor por el alcohol pero ¿eso qué importa ahora?- ¿qué? ¿por qué? -solté un suspiro y creo que hasta fruncí el ceño. Tal vez fue demasiado infantil de mi parte pedir el castigo y el alcohol, no pensé en que podía incomodarlo- bien, pero al menos dime qué ibas a pedir -dejé la copa en el mueble y comencé a limpiar mi mano en mi vestido- y ya que lo dirás -pero sentí un mareo y sentí que iba a caer hacia el suelo, lo primero que hice fue sostenerme de su brazo para no caer, y gracias a que tenía una de mis piernas en el suelo, no caí- me asusté -comencé a reír, pero me quedé callada cuando vi que me sostenía de él con ambas manos, una agarrando su muñeca y otra aferrada a su camisa- estoy... -mire sus labios, tengo que controlarme- yo iba a pedirte que me besaras -tomé aire, sentí que mi corazón iba a detenerse, tengo que parar esto- mejor veo si ya hay alguien en recepción -bajé la vista y me acomodé bien para poder soltarlo. Mis manos están sudando un poco, y las pasé por mi vestido para limpiarlas.