Copas y puños(Privado)

Al final esto se volvió aburrido, Mia parece muy entusiasmada con ese chico y yo no le voy a impedir que se divierta, ella parece que por fin está superando las cosas. Bostezo cansada, pues las personas en este lugar son aburridas. Me la paso tomando fotos de las luces del lugar, los colores son bonitos. Luego de un rato voy a buscar un poco de agua. No me interesa tomar alcohol, de hecho es de las cosas que más me desagradan, eso y las drogas, pero es porque algunas veces me obligaban a consumir ese tipo de cosas y la sensación de perder la conciencia es muy desagradable.
-Que aburridas son las fiestas- me digo dejando mi vaso en la mesa donde están unas personas, pero no les presto cuidado solo sigo caminando.
Es cuando veo un rostro conocido que decido moverme por el lugar.
-¡Dima!- le hablo emocionada al chico. No es que él sea una persona interesante, pero al menos siempre sirve de distracción. Me presenta a sus amigos, y sigue tratándome como una niña, aunque sus amigos parece no ser tan inocentes como él. Tonteo un poco con todos ellos cuidando que Dima no pierda esa imagen inocente de mi.
Es cuando mis ojos se topa con ese par que parece que la noche de verdad se pondrá interesante.
-¡oh mira! es Andy y su otro amigo, iré a saludarlos- digo con gesto dulce pero sin soltar la mano de Dima. Con ese toque suave lo obligo a caminar conmigo, solo cuando ya estamos suficientemente cerca suelto la mano de Dima para acercarme al moreno.
-Hola, tu también estás aquí, deberíamos divertirnos todos juntos- sugiero con alegría acercándome a Andy. Me alejo un poco para tomar de nuevo la mano de Dima y hacerlo acercarse aun más -sentémonos- le pido anhelante y como le estoy dando la espalda al moreno, no mido distancia y termino chocando mi espalda contra su brazo, aunque solo es un toque suave, pero soy muy consciente de lo mucho que le desagrado.

Hace ya un rato que he perdido a mi primo de vista, hoy tenía planeado que viniéramos como príncipes, pero Ilya se puso muy terco de no querer vestir algo así, y terminó eligiendo algo mas aburrido, lo peor es que tengo esta arma de juguete que resulta un completo estorbo. Casado de cargar con ella solo la dejo en algún lugar para perderla de una buena vez. La noche parece ir bien, me divierto con mis amigos, pero entonces siento una necesidad de mirar en otra dirección y ese cabello rojo es llamativo incluso en una fiesta de disfraces, y a su lado viene él… no puedo creer que venga a este lugar ¿por que lo hace? solo me recuerda lo humillado que me ha hecho sentir al decirme que esa persona nunca dejará de importarle. Desvío la mirada, mis amigos estallan en risas por algo que no he escuchado y no me molesto ni en seguir el juego.
No dejo de pensar que están aquí, que en cualquier momento nos encontraremos, no quiero verlos. Levanto la mirada al escuchar mi nombre, y no puedo creer de quien se trata.
-¿y tu que haces aquí?- pregunto sorprendido, a veces se me escapa de la cabeza su verdadera edad, suelo verla como una pequeña niña, de hecho solo hay dos años de diferencia entre nosotros. Pero es tan pequeña e inocente que no lo sé, no puedo verla de otra manera.
La noche mejora un poco al estar con ella, siempre es tan alegre y vivaz que me contagia con su buen humor, pero las cosas empeoran cuando ella nota la presencia de aquel par. Me toma de la mano y termo siguiéndola, no se como decirle que no, así que solo dejaré que salude y luego nos vamos.
Cuando ya estamos mas cerca, la suelto para mantener mi distancia mientras saluda, pero regresa y sugiere que pasemos un rato juntos.
-No Emi, yo tengo que regresar- trato de decirle pero aun así no pongo resistencia a que me acerque mas a ellos.

Dima:

Cuando llegamos a la fiesta, me perdí un rato. No quiero molestar a Luciel y su amiga, sé que él tiene otras intenciones con ella, y ha cargado suficiente conmigo los últimos días como para arruinarle también esta noche. Aproveché mientras pedían las bebidas para perderme entre la gente. Y sí, lo estoy buscando No tengo ni un poco de dignidad, pero tal vez si le hablo y le pido disculpas, él deje de estar enojado conmigo.
Al final me terminé topando a un par de conocidos, y no es complicado fingir que me divierto con ellos, tanto que he tomado un par de bebidas y me río a la par de sus pláticas. No es desagradable para nada, pero no puedo dejar de buscarlo con la mirada o sentirme ansioso por no encontrarlo. ¿Con quién estará? ¿Tendrá una mujer con él? Mordí mi labio y miré mi bebida. Hoy es una de esas noches donde las personas aprovechan para ligar, él lo hace cada año, y hoy seguro que no se quedará solo.
Esa idea hace que comience a sentirme mal, y me despido del resto para ir a buscar a Luciel. Como pensé lo necesito, creo que debería irme, pero no puedo.

-Te encontré -le tomé por los hombros al verlo bebiendo solo en la barra- ¿y Niki? -miré hacia los lados y luego pedí algo más de tomar- vamos allá, no me gusta la barra, ¿sí? -luce decaído, y cuando llegamos acerqué mi silla a la de él- ¿sucedió algo? -peiné su cabello con mis manos y lo miré preocupado. Creo que las cosas no salieron tan bien, pero no sé si me dirá algo. Además él no es del tipo alcohólico- deberíamos tomar para olvidar nuestras penas -me recargué en su hombro y levanté mi bebida, y luego di un trago largo.
Comenzamos a platicar y terminé mi vaso para pedir otro. Me sentía más relajado, aunque nuestra situación no es favorable, pero al menos nos tenemos el uno al otro. Quiero olvidar un poco la situación con Dima para darle el apoyo que él siempre me brinda.
Estábamos riendo cuando miré a mi costado a esa desagradable niña. Me enderecé y mi cara se tensó de inmediato. Todo es horrible, pero lo que me duele más es que Dima venga con ella, y miré hacia sus manos que se encontraban juntas.
-¿Qué? No -mi voz sonó tenue, pero la miré de mal modo, y luego giré hacia Luciel para evitar ver cómo ellos se inmiscuyen en nuestra mesa solo para divertirse por su lado. Mi rostro no sé qué expresión carga, quiero llorar y no sé si es por la rabia o tristeza- Luciel, vamo... -dejé de hablar cuando sentí su brazo pegar contra mí- ¿puedes moverte, por favor? Tienes suficiente espacio -esta vez hablé más fuerte, y por primera vez miré a Dima con decepción. De todas las personas tenía que estar con ella, así de poco le importó todo lo que le dije. Esto está mal, ¿por qué ella? De nuevo hoy y él está de su lado, como reafirmando que no importa lo que pase, no dejará de defenderla- ¿por qué no te llevas a tu novia? Está molestándome -le hablé de mala manera a Dima. Estoy ebrio, y mi respiración está agitada- Luci, me siento mal, quiero irme -les di de nuevo la espalda y me acurruqué en el pecho de Luciel y cerré los ojos. Quería verlo, pero no con ella. No nuevamente esa imagen que se ha repetido en los últimos meses. Es doloroso.

Andy:

He superado ya las copas que suelo consumir, no me gusta el alcohol porque creo que me hacer perder mi mascara de “todo es alegre en la vida” pero hoy realmente estoy al limite, no puedo ser tan positivo, he perdido a Niki de nuevo, y se siente muy parecido a lo que fue la vez anterior, la verdad es que una parte de mi desearía odiarla, pero no, solo me he terminado ofreciendo como su amigo, sepultando mis sentimientos para que ella sea feliz.
-¡eyyy!- es mi saludo al ver a Andy -ammm, no lo sé, hace rato me separé de ella- me encojo de hombros. Me levanto cuando él dice lo de la barra y lo sigo a una mesa -Pues que ya tiene novio- contesto de tajo, no quiero entrar en rodeos, solo decir lo que me tiene de esta manera. Apoye mi cabeza en mi mano y respiré profundo para no terminar llorando -para olvidar- levanté mi bebida igual que él y tome de ella.
Es bueno tener a alguien con quien pasar estos momentos, como que se sufre un poco menos.

Pero como una maldición del cielo, siempre tiene que haber alguien sufriendo, así que veo como Dima aparece, aunque lo que más me sorprende es como Andy reacciona ante esa chica. Me parece que es hija de una amistad de su padre. Me vuelvo más que un observador, porque todo parece tan raro, no se como manejar esto, y mi estado un poco alterado por el alcohol no ayuda a que piense con claridad.
-Wooo, claro, vamos- abracé a Andy cuando se acerca a mi, pero aun estoy sorprendido por lo que ha pasado.

Andy suelta esas palabras a Emi solo porque ella se le ha acercado.
-lo, lo siento, yo no quería molestarte- le dice ella al borde del llanto cuando nos da la espalda. Nunca había visto que el tratara así a nadie, ni siquiera cuando yo lo trataba tan mal, el solo soportaba, pero ahora con Emi explota por alto tan pequeño.
El rostro de Emi muestra lo herida que esta, sus ojos se humedecen, y solo la escucho volver a disculparse. Estiro mi brazo para atraerla a mi y abrazarla.
-¿y ahora te vas? le hablas de esa manera y te vas. ¡Disculpate con ella! - le exijo molesto.
La tomo de los hombros para hacerla a un lado y avanzo hasta donde están ellos dos. Tomo a Andy del hombro para obligarlo a girarse y prácticamente lo arranco de los brazos de Lucy -ella no te hizo nada, así que deja de tratarla mal- yo sé bien porque la odia tanto, es por lo cercana que es a papá, cualquiera puede notar lo feliz que él se pone cuando ella nos visita -¡Y TÚ NO TE METAS!- grito a Luciel cuando noto sus intenciones, lo conozco bien, solo que jamás esperaba que él no estaría de mi lado en estos momentos, me cambió y ha preferido a Andy, los dos han preferido a alguien más en lugar de mi. Pero el pelirrojo es terco, y… ¿está borracho? ni siquiera yo he tomado en esta fiesta.

No dije nada cuando confirmó me por qué la cara larga. No quiero preguntarle tampoco cómo es que terminaron las cosas así, pensé que todo entre ellos iba bien. Lo mejor es hacer que se distraiga. A diferencia de mí, él es más reservado con sus problemas. Si está dispuesto a hablarlo con todo gusto lo escucharé, pero no quiero presionarlo.
-Entiendo, vamos a beber solos entonces -le sonreí y lo arrastré conmigo a la mesa. Al menos sé que contaré con él para lo que sea, creo que además de Ilkin, él es la única persona que siento nunca me va a abandonar. Es la ventaja de no haberme involucrado de otro modo con ellos, creo que solo de este modo es que pueden las personas permanecer conmigo.

Evité mirar a Dima y esa desagradable niña, al menos Luciel está conmigo, y cuando me abraza, me refugio más en él para así no tener el impulso de seguir hablando con ellos.
Apreté mis labios cuando lo escuché hablar. ¿Por qué no se van? Cerré los ojos con fuerza porque no soporto la manera en que la defiende. Si tanto le molesta que la trate así, entonces deberían alejarse en primer lugar. Duele mucho, ahora es claro quién es más importante.
Pero el jalón hace que abra los ojos de nuevo y dé un par de pasos lejos de Luciel. Miro a Dima, y luego la veo a ella. Está llorando, ¿por qué llora? Yo soy quien se siente mal, pero, ¿realmente la lastimé? Por un momento pensé en disculparme, pero entonces él le grita a Luciel.
-Vete -intenté hacer que mi voz saliera calmada, pero todo mi cuerpo tiembla- no te atrevas a involucrarlo. Puedo tolerar que quieras alejar a quien sea de mí, ¡pero no a él! -me interpuse entre ellos y luego la miré a ella. La odio, todo es su culpa, pero nadie es capaz de ver lo manipuladora que es- vete, por favor -no quiero más esto, ¿por qué todo se volvió así? Él ni siquiera se preocupa por nosotros, se ha alterado solo porque la lastimé a ella. Hubiera soportado verlo con cualquier mujer, sin importar la situación en la que estuvieran, yo lo habría aguantado. Pero de todas las personas, ¿por qué ella?

Sentí que alguien había tocado mi hombro y me moví a un lado con brusquedad.
-¿Qué haces aquí? No… -lo miré confundido. Pensé que ya se había ido- por favor, no te metas -le hablé de forma amable. No quiero involucrar a nadie más. Puede que su intención sea buena, pero estoy harto de esto y por el nivel de alcohol en mi cuerpo, es imposible parar a menos que Dima se vaya.

Antes de irnos con Ilya, tuve que entrar a buscar a Andy para pedirle las llaves de su casa. Fue algo complicado encontrarlo, y tardé apenas unos minutos antes de salir de nuevo pues había dejado a Ilya solo en el auto.
Fue dormido durante todo el trayecto, tiene una linda cara y cuando no está hablando tonterías, lo es aún más.
Al llegar a la gran mansión entramos directamente. El portero me conoce, y también al chico, así que acceder a la casa no fue complicado. Pero aún así no sé si sus padres estén en casa, y de ser más temprano tocaría el timbre, pero me apena ser imprudente.
-Ilya, llegamos -me bajé del auto y caminé hasta su puerta. Está durmiendo, y fue difícil sacarlo de allí pero al final logré que despertara para que se recargara en mí. Abrí con dificultad la puerta y caminé hasta dentro- ¿cuál es tu recámara? -él solo señal´la planta de arriba, y lentamente subimos hasta el cuarto de huéspedes que actualmente es el suyo. Me he quedado unas veces aquí, por eso estoy familiarizado con la casa, solo no sabía dónde dejarlo exactamente. Una vez que lo recosté, me senté en la cama soltando un quejido. Qué niño tan problemático. Pero no suficiente con eso, le quité los zapatos y lo acomodé para que no se lastimara el cuello- hey, me iré ahora, ¿de acuerdo? -él apenas si me escucha, y sonreí para después alejarme. Es incómodo estar aquí sin Andy cerca, pero por fortuna no me topé a nadie y salí desapercibido de allí.
Todavía debo regresar a donde Andy y entregar sus llaves. La verdad me impresiona lo mucho que estoy haciendo por alguien que apenas conozco, llevarlo a mi casa hubiera sido menos molesto, pero creo que es porque necesito mantener mi cabeza ocupada y distraerme. Tal vez me quede otro rato en la fiesta.

Entré de nuevo y busqué a Andy, es más fácil localizarlo porque está con su amigo el pelirrojo. Pero no fue eso lo que me hizo notarlos, sino la situación que generaron. Me quedé parado sin saber qué hacer. He tenido suficientes problemas por hoy, y soy alguien totalmente en contra de la violencia, la detesto. Además su hermano tiene ese historial y es el tipo de persona que yo prefiero evitar. Pero ver a Andy alterado es nuevo. Él siempre guarda la calma, y ahora está gritando, y ni siquiera entiendo lo que dicen.
-Qué molesto -solté por lo bajo. Caminé a ellos y toqué a Andy en el hombro- Andy, ya deja esto -no tengo intención de pelear con su hermano, ni siquiera lo miré. Me sorprende que su amigo no haya hecho nada, y para mi mala suerte, no hago más que empeorar las cosas- yo tampoco quiero meterme, pero están montando un espectáculo. Vamos, te llevaré a casa -está ebrio. Lo he visto así antes, pero es el tipo de borracho que se pone sentimental o feliz, nunca agresivo.

Me tambaleo cuando siento como Andy se aleja, Dima lo ha jalado para separarlo de mi y seguir con su absurda discusión. Hora no me encuentro en mi mejor momento, mi mente va bastante lento, así que tardo en reaccionar mas de lo que desearía.
Ellos ya está gritando, lo cual es una sorpresa porque por lo general solo es Dima quien grita, Andy realmente está mal y yo me siento enojado con ellos. Parecen no entender lo maravilloso que es amar a alguien y ser correspondido, tiene demasiada suerte y no la aprovechan.
Me acerco para tratar de detener este tonto teatro causado por el ego herido de Dima, pero el de inmediato me grita. La verdad es que me ha causado mucha impresión, pues, aunque tiene su horrible temperamento, él, nunca me había gritado a mi. Pero bueno, creo que hoy soy demasiado sensible a cualquier ataque.
Me acerco aun así y me pongo entre ellos tocando el pecho de Dima para empujarlo con suavidad alejándolo de Andy.
-vamos Dima, calmate. Andy está ebrio, solo está vez, dejalo en paz- le pido de manera amable. Estoy tentando a mi suerte, pero tengo que cuidar de Andy. Tal vez durante años me mantuve un poco mas de lado de Dima porque aunque sea demasiado temperamental, me constaba lo mucho que sufría por amar a Andy desde no se cuando, Andy, claro que lo pasaba mal, pero en ese entonces al desconocer lo que sentía, era más fuerte para soportar esto, pero ahora que sabe lo que siente, no hay forma de que pueda mantenerse fuerte, ahora todo lo puede herir.

Aparece otra persona, es un amigo de Andy, no lo he tratado mucho, pero lo reconozco. De hecho, que él se acerque hace que me de cuenta de que ya estamos atrayendo demasiadas miradas, pensaba que no sería así porque hay mucho ruido por la música.

No puedo creer que se atreva a decirme que me vaya y pese a mis palabras Luciel se pone entre nosotros y me aleja un poco de Andy. Habla calmado pidiendo que deje a Andy, pero... Andy dice esas palabras.
-¿Qué?- pregunto herido -¡¿Entonces solo soy yo al que aceptas tener lejos?!- le reclamo y no me importa, solo tomo a Luciel del cuello y lo empujo para quitarlo de en medio.
Luego llega otro de sus amigos y yo aprieto mis puños, realmente detesto esto, todos lo cuidan, todos lo ven como la víctima y yo soy el malo, siempre lo soy, solo porque en lugar de poner cara de pena reacciono defensivo. Eso no me vuelve el malo, ni siquiera entienden lo que yo estoy pasando, pero no importa porque todos van a defender a la pobre persona que es débil y da lastima.
-Todos te defienden, siempre tienes gente cuidando de ti, dice que no puedo quitarte a este imbécil-señalo a Luciel -tu siempre tienes gente cuidando de ti, yo solo lo tenía a él y ahora también lo has tomado. ¿Quien es el que aleja a las personas de quien? - para mi sorpresa no estoy gritando, giro la cabeza para mirar a Emi, supongo que ahora ella es lo que me queda, y es realmente una desconocida, no es alguien con quien pueda compartir lo que me pasa, no tengo a nadie -¡pero, está bien! ¡quédatelo! quedate con él, quedate con toda mi familia si así lo deseas, porque para ti todos son mas importantes y necesarios en tu vida. ¡PERO AL MENOS YA QUE TE QUEDAS CON TODOS DEJA DE ACTUAR CON LA MALDITA VÍCTIMA! -le grito acercándome a él, tanto como para quedar a escasos centímetros, pero tenerlo cerca me lastima, así que lo empujo porque no voy a dar un solo paso atrás.

Luciel no hace caso a Dima y ha tratado de calmarlo. Agradezco que sea la voz de la razón en este momento, porque yo no estoy pensando con claridad. Cada vez es más difícil asimilar la imagen de ellos dos juntos, y hoy, tomando como excusa el alcohol, he explotado por nada. Estuvo mal y soy consciente de eso, pero no quiero disculparme, estoy cansado de ser prudente con esto.
-¿Perdón? -de nuevo sentí cómo algo dentro de mí se encendía- ¿quién fue el que me alejo en primer lugar? Tú fuiste el que dijo que no quería verme. No me hablas, pasas de largo haciendo nada de mi existencia. No me dejas estar contigo pero no conforme con eso,  ¿quieres que no esté con nadie? -me burlé y chasqué la lengua- es obvio a quién prefieres contigo, ¿por qué tienes que traerla con nosotros sabiendo lo mucho que la detesto?
Cuando veo cómo agrede a Luciel camino hacia él para ver si se encuentra bien.
-Basta ya, él no tiene la culpa de esto -reclamé. Incluso había intentado ayudarnos, pero creo que esta vez ninguno de los dos está dispuesto a ceder.
Min se mete para decir cómo la gente va comenzando a prestarnos atención. Debo calmarme, tiene razón, si llega a suceder algo y mi padre se entera, no será bueno. Pero no puedo ignorar a Dima, y la cara de esa niña me irrita, ¡ellos simplemente deberían alejarse!
-Ya lo sé -le respondí a Min. No sé cómo detenerme. ¿Cómo es que en el pasado mantenía fácilmente la calma? No es la primera vez que me grita o me ofende por nada, pero duele mucho más que en el pasado.

Me quedé callado escuchando y mirándolo. Luciel siempre ha estado de su lado, es la primera vez que me defiende directamente de él, ¿y eso está mal? ¿Que demonios le pasa? Pero lo que dice me duele mucho. No me importan ellos como me importa Dima, y vine como imbécil a buscarlo para ver si tenía alguna oportunidad de disculparme. Pero no, ni siquiera me dirigió la palabra más que para defenderla a ella. Me gritó, e incluso agredió a Luciel solo por ella.
Su empujón solo hace que todo sea más doloroso, y mordí mi labio frustrado. ¿Qué tiene que ver nuestra familia? Siempre saca a flote ese tema, y es cuando más consciente soy del inexistente lazo sanguíneo entre ellos y yo.
Caminé los dos pasos entre nosotros y lo empujé por los hombros. Mis manos están temblando, no quiero esto. Pero creo que tengo más valor que antes, estoy en mi límite.
-¿Esto quieres entonces? -me volví a acercar y lo empujé de nuevo- no necesito que nadie me defienda de ti. ¿Cuánto más esperas que lo aguante? ¿Al menos esto servirá de algo? -Min me toma de un brazo y agarro su mano para que me suelte- te dije que no te metieras -estoy gritando pero no tengo firmeza en mis palabras, y dudo que él pueda entender lo que digo- de nuevo es ella. Antes, hoy, desde hace un tiempo no haces mas que prestarle atención por sobre todo. No tenías que mostrarte frente a mí con ella. Parece que solo querías estar libre para divertirte, pero no conforme vienes y me lo restriegas en la cara -de nuevo empujo a Min para que se aleje de mí. Me quedé de pie mirando la gente.
No, no, no, esto está mal. ¿Qué estoy haciendo? No debí tomar tanto, ni siquiera tenía que venir en primer lugar.

Todo este drama es demasiado molesto. No entiendo porqué ha reaccionado así, Andy no es esa clase de persona imprudente. Sé lo problemático que es su hermano, y los roces que siempre han tenido, pero ¿no estaba ya todo en orden? Quiero irme, he tenido un día de mierda como para soportar las disputas de dos borrachos inmaduros. Pero él no es así, y es mi amigo, es normal que me preocupe ese cambio radical en su persona. Además está esa chica amiga de Mia, la novia de Ilkin. ¿Es por ella? Entonces debería llamar a Ilkin para que la aparten de aquí, porque creo que esto le está afectando mucho. Pero no quiero arruinar su noche, no, él no tiene que ver con esto.
Caminé hacia donde estaba la chica.
-¿Estás bien? -pregunté. No es que me preocupe, pero bueno, está llorando, y hace un rato estábamos todos juntos- tal vez es mejor que te vayas -le dije. Los hombres idiotas suelen pelearse por mujeres, aunque Andy no tiene esas preferencias, pero igual no es bueno que ella esté aquí, porque a cada  tanto y por alguna razón, Andy la señala y dudo que sean halagos lo que le dice.

-Si lo sabes, entonces cálmate. Tú eres el adulto aquí -esto es ridículo. Andy no es un niño, debería ignorar las provocaciones del idiota de su hermano- ya, Andrei, basta -luego de ver cómo su hermano lo ha empujado y quitado al otro del camino, me doy cuenta que esto va a empeorar. Pero no funciona, ahora razonar con ellos es imposible, incluso me ha apartado de una forma nada esperada de su parte- Andy -estoy empezando a estresarme, y juro que estoy a nada de mandarlo al diablo.
Si fuera ese amigo pesado y conflictivo, ni siquiera me habría tomado la molestia de acercarme. Lo peor es que no comprendo nada de lo que dicen, y por ende no sé el origen del problema. No quiero terminar embarrado en una pelea, pero es algo tarde para darme la vuelta e irme, y tampoco soy una mierda de amigo.
-Hey hey -caminé delante de Andy para intentar que dejara de provocar al otro. ¿Qué mierda le sucede? ¿Quiere terminar estampado en el suelo con la cara destrozada? Porque su hermano no es del tipo tranquilo, obviamente él tiene las de ganar si comienzan a lanzar golpes. No sé cuánta fuerza pueda tener su otro amigo, pero eso está fuera de mis posibilidades. Ni siquiera puedo hacer que se calme ahora, si comienzan a golpearse será mucho más complicado detenerlos.

Escucharlos discutir en otro idioma hace un poco aburrida la pelea, pero bueno, tal vez debo aprender otros idiomas, sería una buena ventaja para algunas ocaciones.
Ellos realmente son muy lentos pare pelear y es un poco cansado mirar al moreno quejarse de mi, eso parece lo único claro de todo lo que ocurre.
El tipo que conocí hace un rato se acerca a mi, no lloro desconsolada, solo lo necesario para parecer afectada por esto, limpio mis ojos cuando me habla.
-Yo si, pero ellos...-muestro una gesto de culpa por lo que ocurre, la clase de gesto que pone una persona que se preocupa por haber ocasionado una pelea aun si solo fue un accidente -Pero, ellos... yo no quiero dejarlos así- las cosas comienzan a ponerse un poco físicas entre ellos. No tengo problema en solo irme ya, me da igual realmente, pero mi pequeño teatro se desmoronaría -¿crees que si me voy se calmarán?- suspiro resignada y no dejo de mirarlos preocupada -está bien- acepto alejarme, se que si le digo a Dima que estaba muy asustada, él, lo va a creer.
Me alejo poco a poco, pero solo lo suficiente para salir de la vista de ellos pero me quedo cerca solo para observar un poco más. Tomo mi celular y marco a Mitya, para contarle lo preocupada que estoy por lo que está pasando.

Es verdad, le he dado la preferencia a Andy y escuchar a Dima me hace comprenderlo un poco. Dima es una persona bastante solitaria, claro que tiene amigos, cientos de personas con quienes ir a fiestas y muchas mujeres con las que se puede acostar, pero realmente yo he sido su único amigo, es bastante desconfiado de las personas, debe sentirse muy solo. Me siento un poco culpable de dejarlo, pero se que si están separados es por culpa de él, y no puedo apoyarlo en eso.
Tampoco entiendo por desprecio que Andy demuestra por esa chica, nunca lo había visto tan celoso por nadie, pensaba que aunque le afectara que Dima estuviera con otras mujeres, el podría manejarlo, pero parece que me equivoqué. Siento que esto se vuelve demasiado grande como para que yo pueda arreglarlo solo con mis buenas intenciones.

Andy parece corresponder a la agresión, y esto me preocupa. Creo que solo debería dejarlos ser, pero no, soy un idiota que se preocupa por ellos. No sé ni como ha empezado, todo fue tan rápido y me siento aturdido.
Estoy en el suelo, mi cara mi arde, mientras trataba de poner distancia de nuevo entre ellos Dima, me golpeo, la verdad es que ni lo vi venir, pero estoy seguro que fue él. Sacudo mi cabeza como intentado despertar y bueno, que puedo decir, hoy no es mi día en ningún sentido y sucumbo antes mis propias emociones, me he levantado y termino lanzando unos pésimos golpes a Dima y el otros a mi, estoy seguro que voy perdiendo, pero estoy tan casado y desesperado que no me importa.
-¡ERES UN IDIOTA!- le grito lanzando un golpe con toda mi fuerza pero no alcanzo a darle pues el me da otro a mitad del camino y vuelvo a caer, esta vez ya no me siento con fuerza para poder levantarme.

-Porque yo soy malo, soy la persona más egoísta que hay. Porque quiero que la persona que amo me amé a mi por sobre todas las personas, pero no lo hace, nunca dejará de amar a esa otra persona. ¡Así que no te alejo de la persona que amas! ¡solamente me alejo yo! - siento un nudo en mi garganta, no quiero seguir sufriendo por él, jamás debí aceptar lo que sentía, debí mantenerme vivido como lo hacía antes, obligándome a odiarlo -Tu siempre te quedas con todo Andy. Siempre soy el malo porque soy el que grita, pero tú eres el que toma todo y yo el que está solo- cierro mis ojos con fuerza para obligarme a no llorar -tanto la odias- me río herido porque se la razón, no soy yo, simplemente es por esa otra persona.

El recorre la distancia que lo alejé y me empuja, me toma por sorpresa, pues él nunca había reaccionado a mis ataques. Me sorprende esto, su reacción, siempre se queda callado y sin hacer nada, pero ahora está contestando a todo. Me río por lo que comienza a decir, no puedo creer que piense esas cosas de mi.
-vaya, no sabía lo malo que era. Digo siempre se quejan de mi, pero todo esto que me cuentas, no lo sabía, pero suena a que soy un maldito- digo con sarcasmo.
Explicar no tiene sentido, él solo piensa que papá y yo somos los esclavos de Emi, o que se yo.
-si soy tan maldito, vamos golpeame y ponme en mi lugar- le incito, incluso me acerco para que me golpee. Solo deseo tocar fondo, esta vez, no se como, pero voy a arrancarlo de mi corazón, que se quede con la persona a quien nunca dejará de amar, que lo cele por fin directamente a él y deje de usarme como excusa. Pero Luciel vuelve a meterse, y eso me hace enojar, así que le lanzo un golpe que lo tira al suelo. No soy el mejor en los golpes, pero mejor que todos ellos si que lo soy.
Los golpes de Luciel no son muy fuertes o atinados, no causan demasiado daño y yo solo quiero que deje de meterse entre nosotros. Mientras mas peleamos mi adrenalina se libera y más enojado me siento, y le doy un golpe para que ya no se vuelva a levantar. Limpio mi cara, no tengo sangre ni siquiera.
-¡TE DIJE QUE NO TE METIERAS!- le grito.

No tenía especial interés en la fiesta de disfraces, pero al final me dejé convencer por un grupo de personas con las que tomo uno de los cursos. Me he mantenido alejado de problemas por un rato y creo que debo divertirme.
Como fue algo de ultima hora, no tenía idea de que disfrazarme, así que me puse un pantalón de cuero, un poncho que mis tíos compraron en unos de sus viajes y un sombre que me dio un chico luego de usarlo en una obra. Es una mezcla rara, pero supongo que califica como disfraz. Al llegar al lugar no sorprende ver chicas con atuendos reveladores, lo que es raro es ver que los chicos lo hagan, de hecho son los que más parecen esforzarse en sus disfraces.

Tomo un poco, bailo con un par de chicas, toda una noche normal de diversión. El rato pasa y me aburro un poco, así que voy por otra cerveza, pero mientras camino un grupo de personas se comienza a formar.
-Con que es así- comento riendo un poco, porque supongo que se trata de una pelea, y se siente raro estar del otro lado. Ya que es el camino mas corto para llegar a la barra, me acerco para pasar por ahí, entonces me doy cuenta de que se trata de Andy y su hermano. Gritan cosas en otro idioma, me río porque es una ventaja, así creo que casi nadie se puede enterar lo que hablan, aunque yo sospecho sobre que debe ser. Estoy dispuesto a seguir mi camino, pero entonces veo como el hermano de Andy se agarra a golpes con un tercero -Si que son malos- comento un poco resignado, pero comienzo a acercarme hasta ellos -oye solo déjalos- le digo caminando hasta donde el chico, está aturdido, pero creo que más que nada ha caído por lo alcoholizado que está.

Ivan: