Secreto *Aaren*

Recuerdo del primer mensaje :

Hoy es otra noche de cena familiar, es la manera en que el esposo de mamá vigila cuidadosamente a Aaren. Es algo así como el trato al que llegaron para que Aaren pudiera seguir viviendo en su departamento. Obviamente yo abogué por él, porque no me conviene que viva aquí, los dos bajo el mismo techo, teniéndolo cerca, eso sería muy difícil para mi.
Recuperar la memoria ha sido más una carga desde que Evan lo sabe. No puedo dejar de sentirme mal por lo nuestro, y aun así no tengo el valor de dejarlo, aun cuando a veces siento que lo odio por lo que hizo y por nuestro pasado. La verdad es que, no tengo ni idea de lo que estoy haciendo.

Bajo a la cocina ya que a mi madre le ha dado por ser la cocinera para esta noche, me asomo para ver que es lo que hace.
-Si sabes que eres mala cocinando, ¿por qué lo haces?- pregunto un poco para molestarla mientras abro el refrigerador y saco un refresco de cola.
-Porque quiero sorprender a mi linda familia. Y no tomes eso que se te irá el hambre- dice ella un poco acusadora.
-Yaaaa, no te enojes- me acerco a ella y mi brazo rodea sus hombros mientras me asomo a ver que es lo que cocina -¡Mamá!- me quejo en cuanto veo el guiso que prepara - a Aaren no le gusta el picante, no lo harás comer esto ¿o si? - al ver la reacción de ella me doy cuenta que se le ha olvidado.
-Diablos- dice ella y comienzo a reír.
-Al menos dime que hay un delicioso postre para que lo recompenses por esto- le planto un gran beso en la mejilla y abriendo la lata de mi refresco salgo de la cocina para ir de nuevo a mi habitación.
En el camino me encuentro a mi padrastro que me dice que ya debería bajar, que Aaren hace rato que llegó, que no tarde mucho, que me estarán esperando.

Regreso a mi habitación me acerco a mi cama para tomar mi celular, como siempre tengo mensajes de Evan, me siento mal por lo que le hago pasar, pero no puedo controlarlo, yo hace tiempo que no sé que rumbo tomar. Solo estoy estancado esperando a que el mundo pase, a que Evan se canse de mi, a que Aaren se case y yo solo me pueda ir al extranjero.

Mei:

recamara:

Toqué mi rostro y me di cuenta que tenía razón, yo no me había percatado de eso, aunque con mis amigos también sonrío sé a lo que se refiere.
—Es que solo somos amigos —alejé mi mano. Ya he pensado antes en lo que podríamos ser, desde que lo conocí y por el comentario que hizo Hannu esa vez, pero… no ha pasado nada- ¿qué? No, yo odio las personas violentas. Pero Ivan es mucho más que eso, es alguien muy amable y tranquilo, también muy cariñoso. Incluso cuando pelea lo hace por defender a sus amigos -aunque solo lo he visto un par de veces en esa situación, fue porque pensó en ayudar a otros, es una buena persona.
Asentí y mi sonrisa se fue, extraño mucho a Karin, ni siquiera sé cómo está.
—Ella terminó conmigo —tomé aire y lo solté lentamente— me dijo que soy muy egoísta, y que me… ella dijo que me ama, pero que le hago mucho daño. Yo solo me quedé mirándola y se fue, no supe qué decir. Era la primera vez que alguien me decía eso y no supe cómo reaccionar. Cuando fui a buscarla, el chico con el que vive me dijo que me alejara de ella y dejara de atormentarla, yo ni siquiera sabía que ella estaba sufriendo por mi culpa, nunca me dijo nada –tal vez porque Mei me conoce mejor que nadie es que siento la confianza de decirle lo que sucedió. Anteriormente también fue así, me siento tranquilo contándole lo que sucede.

Sentí una especie de jaloneo en el pecho, ni siquiera sé cómo explicarlo pero no fue una sensación agradable. Afirma que siguen juntos, y por cómo describe la situación entre ellos parece amarlo mucho. Yo lo odiaría, pero Mei sigue con él aunque no quiera confrontarlo, y duele saber que a pesar de los dos años que compartimos él se robó su corazón tan fácilmente.
—Nunca dejaste de amarlo –desde el inicio de nuestra relación Mei lo quería– luego del accidente, una vez lo llamaste entre sueños. Supongo que no se puede evitar —tal vez porque ya lo imaginaba, o porque estuve con Karin y me alejé de él es que ahora puedo decirlo sin sentir odio, pero duele, porque por un instante creí que tal vez nosotros podríamos volver. Es imposible.
Me acerqué y toqué su cara. No puedo decir nada porque yo también esperaba que fuera el de siempre, y lo trataba con cuidado antes de alejarme de él.
-No sé cómo actuar ahora, estoy confundido —ahora él está con Evan, y nosotros tendremos que tomar rumbos distintos en un tiempo— quiero pasar más tiempo contigo -mis sentimientos están mezclados, no quiero ser lo que a él le incomoda del resto de las personas, pero es inevitable mi deseo por volver a esos días.

Si, definitivamente ese sujeto le gusta. Puedo decir que a mi no me agrada para él, con solo ver su apariencia lo desapruebo rotundamente, pero no tengo más que aceptar lo que lo haga feliz. Ser feliz es lo que Aaren merece, aun si es con un fenómeno.
-Lo siento- digo cuando me comenta lo de su novia y casi me siento mal cuando me dice que ella lo ama. Pero por su respuesta es obvio que él no siente lo mismo. Aaren no es de los que se rinde así de fácil cuando siente algo por alguien. Es tal vez ese egoísmo suyo lo que lo vuelve una persona testaruda. Creo por eso que cuando ame a alguien, no se rendirá solo porque un tipo le pide que la deje de molestar.
-Que mal que terminó así- no me hace feliz que lo lastimen. Siento esta dualidad de deseos, lo quiero ver feliz, con una persona y que se amen, pero también siento algo de celos de pensarlo.

-Así que eso hice- me siento mal por saber eso, pero no le voy a negar algo que es tan obvio. Aun si estoy lleno de rencor, no puedo negar esos otros sentimientos.
Cierro los ojos cuando toca mi rostro, se siente bien.
-tal vez sea una carga pasar tiempo conmigo. Realmente no soy nada lindo cuando me pongo mal- contesto con una sonrisa apagada. Aaren no ha tenido que enfrentar casi ninguno de mis ataques. No quiero herirlo más.
-¿Pero entonces no me odias?- pregunto un poco inseguro pero con esperanza -Podríamos empezar poco a poco. Platicar antes de las cenas familiares y ver como se desarrolla todo. Le preguntaré a Jiro como podríamos manejarlo- comento pensando que una opinión profesional, seguro que será mejor que algo que improvisemos -Jiro es psicólogo- aclaro para que sepa de quien le hablo.

Sé que Karin y yo no teníamos un futuro, me hubiera gustado que fuese ella mi prometida y entonces me habría esforzado al máximo, y ella no tendría ese miedo sobre nuestra relación y las cosas tendrían otro desenlace. Suena tan sencillo ya que ellas son hermanas, pero al conocer a su madre supe que por la posición de Karin, era imposible que mi compromiso fuese con ella. Ese matrimonio va más allá de la comprensión de muchos.

—No te odio —respondí seguro— fue una sorpresa que hayas recuperado algunos recuerdos, al menos la identidad de quienes conociste estos últimos años, me siento muy feliz por esa parte. Aunque también estoy molesto, o más bien frustrado conmigo mismo —inseguro, creo que más bien es otra cosa— estoy celoso, pero también quiero que seas feliz… Incluso si es con él —cuando pienso en nosotros veo demasiados obstáculos, y aún así lo desearía. Pero ahora que él me dijo estar enamorado de otro no me queda más que quedarme en la posición que debí desde el inicio, simplemente hermanos. Siento que será difícil, pero eso es mejor que distanciarnos definitivamente.

Sonreí cuando aceptó, poco a poco podré formar parte de su vida nuevamente, me siento aliviado y emocionado, porque desde que lo conocí, mi tiempo con Mei ha sido muy importante.
—Nunca pensaré de ti como una carga, además creo que de cualquier forma eres lindo, es algo que desde hace años he pensado —su método parece el más sensato, yo no pensé en consultar a su psicólogo también pero parece la decisión más razonable— de acuerdo. ¿Qué clase de persona es? Nunca he hablado con un psicólogo —bueno, Hannu sería lo más cercano a eso, pero le faltaron años de preparación y práctica, ¿será que el trato sea similar? Mei parece confiar en él, debe ser una buena persona entonces ya que no confía en cualquiera.

Bajo la mirada cuando dice que está celoso. Creo que entiendo ese sentimiento. Estoy seguro de algo, Aaren es muy especial para mi, lo quiero de una manera que deseo no ser egoísta. Que pueda ser feliz. Y eso, viniendo de mi, es algo especial, porque con Evan soy muy egoísta. No quiero dejarlo, no quiero que se vaya, pero no me esfuerzo por nosotros, solo sigo actuando de manera egoísta y caprichosa, huyendo de él y haciendolo sentir mal. La manera en que lo amo es horrible… y no sé como mejorar.
-Yo deseo lo mismo para ti- sonrío por decir esas palabras.

Sonrío por lo que dice de que soy lindo, pero estoy seguro que no diría lo mismo si me viera en el estado que me ha visto Evan, pero no quiero que jamás me vea de esa manera.
-Es una persona amable, a veces un poco ingenuo, pero se preocupa mucho por mi. Ya lo conocerás. Ahora deberíamos bajar- le digo porque ya hemos tardado mucho y seguro que su padre no estará feliz si demoramos más.
-¿Puedes guardar el secreto? no quiero quiero que ellos sepan aun- mi madre sería la primera en presionarme para que sea la persona que ella recuerda.

Bajamos al comedor, mamá está un poco seria al vernos bajar. Creo que aun le da miedo que nosotros tengamos algo de nuevo. Le sonrío con dulzura, con ese gesto inocente que ahora es natural en mi.
-Aaren es muy inteligente, me acaba de ayudar con algo que no entendía de la universidad- digo dando una excusa antes de que pregunte, sería sospechoso si no fuera por mi expresión de emoción al descubrir lo inteligente que es mi hermano.
Durante la cena es mi madre quien lleva la platica, ella siempre lo hace. Pregunta cosas a todos y se esfuerza por crear lazos entre la familia.
Luego de la cena, Aaren se va, me acerco a mi madre y su esposo, para platicar con ellos. Preguntarles con inseguridad si sería una molestia que le pidiera ayuda a Aaren para cosas de la escuela. El hombre de inmediato dice que Aaren estará encantado. Seguro le mandará un mensaje o le llamará para pedirle que me ayude.

Subo a mi habitación y miro mi celular, lo tomo y miro la pantalla. Le comienzo a escribir un mensaje a Evan.
"Sé que ahora todo es complicado, desearía que fuera más fácil, pero no sé como hacerlo. Te amo".
Lo miro algunos segundos y lo borro.
"Buenas noches".