casualidades °°Privado

Recuerdo del primer mensaje :

Mientras avanza el taxi, noto que entramos a una zona un poco mas ostentosa en cuanto a la arquitectura, los terrenos eran mas grandes, incluso se podían dar el lujo de tener jardines.

Miro de reojo a Nico, podría decir que he aceptado acompañarlo solo porque soy un buen amigo, pero la verdad es que solo he aceptado porque quiero tener algo para burlarme un poco de de él. Ya con solo saber que estará haciendo un trabajo de modelo ya tengo material para molestarlo por un tiempo, pero seguro que esto será divertido.
Me es casi imposible imaginarlo en esa clase de mundo. Gracias a Salem es que conozco un poco de ese mundo, e imaginar a Nico en algo así es ya gracioso.
Para mi suerte hoy no tenía citas programadas, me he dado el lujo de tomarme un poco mas de tiempo. Creo que he estado trabajando demasiado y quiero relajarme un poco.

-¿Y como se le llama a este tipo de lugar?- comento cuando nos detenemos en la casa y bajamos del taxi -Una casa enorme o una mansión pequeña- cuestiono con un ligero grado de apatía. No es que deteste a las personas con dinero o exitosas, pero sinceramente son el tipo de personas que tienen una actitud desagradable.

Caminé cerca del pasillo y me detuve en donde no pudieran molestarnos. Estoy un poco molesto, y no con Ziba precisamente. Ni siquiera sé porqué me enojo, no es como si tuviera derecho. Incluso y aunque Ziba supiera que él es la persona que le gusta a la chica que me gusta, no tengo porqué impedirle su amistad si es que eso son.
-Así que vienes con Takabe -me recargué en la pared y solté un suspiro. Últimamente mi suerte es un asco. Ya sabía que mi oportunidad con Kajsa era nula pero.. igual me molesta la situación- ¿son buenos amigos? Me sorprendí verte aquí -traté de mantener mi voz calmada. No me gusta enojarme con él, menos por una chica. Aunque técnicamente es por un chico…- pero qué horrible coincidencia. Pensar que tu amigo es el tipo por el que Kajsa se muere… si que tengo mala suerte -me reí un poco nervioso y llevé mi mano a la cabeza. No sé si me afecta el que ella lo elija. O que Sora no quiera nada de mí. Como sea siempre termino siendo la persona que no van a escoger. Porque es obvio que nadie quiere alguien así de pareja.

Di otro suspiro ahora más escandaloso, y me paré frente a Ziba palmeando sus hombros.
-Le diré que eres mi hermano, ¿no es genial? Podré presentarte. Ni siquiera lo pensé antes pero ya que se dio la ocasión. Además no me gustaría ocultarlo, y de todos modos no es como si ella fuera una chica muy chismosa. Pero oye, ¿verdad que es linda? Además de tierna y guapa. Ese cambio que se hizo le sienta muy bien -me di la vuelta y caminé hacia la cocina- disculpe… -pregunté despacio- Kajsa me mandó por un poco de hielo. Por favor -esperé un poco y luego una señora me dio un recipiente. Le di nuevamente las gracias y regresé con Ziba. Sería egoísta de mi parte el impedir que esos dos estén juntos, ¿no? Ya sé que Takabe no la quiere, pero si ella no quiere rendirse, yo no debería intervenir- ¿y cómo es él? -intenté fingir que era curiosidad- ¿siempre tiene esa cara enojada? -imité una expresión seria. No me siento muy cómodo, pero he venido aquí a ayudarla. No puedo ser su novio ni alguna de esas cosas que me he pensado, así que al menos trataré de ser una buena amiga.

-Pues supongo, no vendría a algo como esto por cualquiera- -hacer amigos no es mi pasatiempo favorito, así que es muy poco normal verme acompañar a alguien a hacer algo solo porque soy una persona muy amable -Yo también me sorprendí, pero fue divertido- supongo que desde la perspectiva de Salem, no es nada entretenido toda esta casualidad. Así que dejo de burlarme un poco de todo esto, porque, él es mi hermano y este no parece el mejor momento para molestarlo. Tal vez en un rato cuando haya encontrado otra chica con quien distraerse -Ya deberías saber que estamos malditos, recuérdalo, él diablo y sus demonios han retorcido nuestros caminos- bromeo al respecto, pues recuerdo un poco a nuestra familia y ese tipo de palabras que nos daban para hacernos sentir miserables y culpables.

-Bueno, al menos esta vez no se pensarán que soy tu novio como en tu trabajo y como te gusta hacer creer a algunos de mis clientes- me cruzo de brazos porque sus bromitas no es que me den tanta gracia algunas veces -Si, la verdad que es muy guapa, tiene lindas piernas- obviamente he notado que es una mujer bella, no tanto de mi estilo, pero bella, y tal vez sino fuera porque mi hermano y mi amigo están de alguna manera involucrados con ella, pues intentaría que algo pasara.
Seguí a Salem por el lugar, la verdad es que la casa es muy bonita, ostentosa pero bonita. Siento la mirada de la mujer de la cocina... ¡oh si! ya echaba de menos una mirada llena de prejuicios, así que le sonrío.

Ahora creo que quien mas ternura me da es mi propio hermano. Realmente es una persona muy buena, tal vez demasiado algunas veces.
-Es un tipo trabajador y es una buena persona- no se que más decir, no se me da bien hablar de otras personas, ya sea de buena o de mala manera -Si casi siempre, creo que es su expresión natural, aunque hace rato creo que estaba mas rígido de lo normal- aun no se bien como interpretar su expresión, y con lo terco que es dudo que admita que le gusta esa chica. Tal vez solo estoy pensando de más y solo está de ese humor por tener que hacer estas cosas de aprender a caminar y eso.

El cambio de tema resultó buena idea, ¿qué estaba pensando? Al menos no sobre reaccionó cuando la toqué. Y no es la primera vez que pasa, la primera vez que hablamos tuve que llevarla en mi espalda, así que quien exagera creo que soy yo.
Me quedé sentado mirando los bocetos ya que ella decidió servirme. Dibuja muy bien, y sonrío al ver las cosas variadas que hace. La ropa que diseñó para mí es agradable, me pregunto cómo se me verá. Cosas como mi estilo o verme bien no me preocupan tanto, pero ahora me siento un poco emocionado al respecto. Tal vez porque lo hizo pensando en mi persona. Ahora tengo otra opinión sobre la moda. Siempre pensé que era un montón de ego de gente presuntuosa, pero el trabajo tras cada diseño no se trata solo de enaltecer la belleza externa, sino sentirte cómodo y vestir algo que vaya un poco con tu personalidad. al menos ahora lo siento, aunque claro, no puedo decir que todas sus compañeras tienen la misma mentalidad para hacer las cosas.

Paso con cuidado cada página y antes de mirar el siguiente boceto ella ya está sobre mí.
-De acuerdo… -contesté por inercia, pero nuestra pose es un poco comprometedora y evito mirarla a los ojos. Sin embargo al mirar en la otra dirección alcanzo a ver un poco lo que parece un dibujo de alguien- ¿soy yo…? -tuve que alzar la vista a ella, porque tengo la costumbre de mirar a las personas a los ojos cuando les hablo y además, inconscientemente quería ver su reacción, aunque eso lo entendí luego de verla toda apenada- mm, puedes... -me siento avergonzado también. No me di cuenta que mi mano sostenía un cintura y la baje despacio para dejarla descansar en el sofá. Tomé un poco de aire y recogí el cuaderno del suelo. Esto es super vergonzoso, porque estoy medio desnudo. No me importo cambiarme la camisa frente a ella para las medidas, pero no esperaba que hiciera un boceto mío- está… genial -lo elogié, y mordí mi labio aún más nervioso. Esto está muy mal- tardan mucho.

Parece que mis intentos por evitar que vea el dibujo han fallado. ¿Qué pensará ahora de mi? seguro que soy una pervertida o algo así. Pero que vergüenza. Parece que nunca puedo dejar de cometer idioteces cuando lo tengo cerca. Ya no tengo esperanza de que nada pasará. Se que definitivamente no soy su tipo, que él ya tiene a alguien y que mis sentimientos le pueden resultar molestos.
Aun así no he podido deshacerme de mis sentimientos, ya no espero nada, solo me conformo con sentir lo que siento en silencio, pero parece que no soy buena en eso.
Lo peor de todo es que esto encima de él y no tengo mucha idea de que hacer. Mi corazón está loco y no se si es por estar tan cerca o por sentirme una vez mas descubierta ante él.
-si- admito sintiendo como toda la vergüenza se convierte en calor, creo que mi cara va a derretirse. Me siento tan apenada pero aun así no puedo evitar mirar sus ojos, son tan hermosos.
-¿qué? ahh si, si- me levanto lamentándome mucho por ser tan idiota.
-Gracias- coloco mi cabello detrás de mi oreja y recuerdo que le iba a servir el agua así que vuelvo a lo que hacía. Creo que ya no tiene caso quitarle mi libreta.
-si, mucho. Ya ni siquiera me duele- comento estirando los brazos para ofrecerle el vaso -Iré a buscarlos- creo que mi rostro no deja de estar rojo -creo que iré a buscarlos- solo necesito un respiro, afrontar eso que ya sé pero que a veces olvido. Así que salgo en busca de ese par.
-chicos tardan mucho- comento cabizbaja, me acerco a Aine y tomo los hielos -subiré un momento a mi habitación- camino rápido para evitar que mi amiga quiera seguirme. al cerrar la puerta, apoyo mi espalda en ella y me he dado cuenta de que algunas lágrimas resbalan de mis ojos. Esto del desamor duele mucho. Respiro varias veces, tratando de calmar mis lágrimas. Voy a mi espejo y arreglo mi maquillaje. No ha sido un llanto desesperado, solo unas lágrimas que no pude contener. Mis ojos están un poquito rojos y cristalinos, pero podría decir que solo tengo un poco de sueño. Regreso de nuevo al salón, ni siquiera recordé ponerme los hielos.
-lo siento, tenía algo que hacer- me excuso dando la mejor de mis sonrisas y sentándome alejada de Takabe. Ya no quiero ser una molestia para él, pero estando demasiado cerca siempre me vuelvo muy torpe. Jalo bastante aire tomando mi celular y para mi sorpresa escribo un mensaje, con el texto: "¿Qué tal va tu día?". Pongo el nombre de Aaren como destinatario, debo comenzar a intentar que seamos amigos.

Hice un puchero y luego dejé pasar el asunto. Mala suerte, pero tampoco me afecta tanto, eso creo. Aunque me impresionó demasiado, pero tampoco puedo hacer algo al respecto. Además a ese chico no le gusta Kajsa, y a ella no le gusto yo. Ninguna de esas cosas puede cambiar esté Ziba o no cerca de nosotros.
-Vaya que sí -comento en un tono berrinchudo- últimamente tengo muuuy mala suerte con el amor. Bueno, creo que siempre lo he tenido… -no es que esté enamorada de ella. Ni siquiera de Sora. Para empezar, ¿por qué tuve que pensar en que mis sentimientos por Sora son más fuertes? Convivo más con Kajsa y somos más cercanos, lo normal sería sentir algo más intenso por ella pero… esa mujer. Esa mujer me hizo algo. Con sus expresiones tiernas y su cara vergonzosa. Y luego como habla toda tímida… o sea, ¿qué hice mal para que dejara de responderme? Y tampoco la iré a buscar, eso sería acoso- tienes prohibido fijarte en ella -dije amenazando- ya suficiente es con que seas amigo del chico que le gusta, hmm.

Parece que la gente de aquí es bastante anticuada, pero al menos me dieron lo que pedí sin objetar. La opinión de Ziba no me dice mucho. Y aún sigo pensando que es un chico muy arrogante. Pero tampoco cambiaré nada si intervengo entre ellos, y ahora más bien parece que los estoy ayudando.
-Kajsa -le sonreí cuando nos la topamos en el pasillo pero ella parece cabizbaja, y se ha ido tan a prisa que impide que le siga el paso- ¿qué pasó? -pregunté a Ziba, pero obviamente él no sabe la respuesta. Sin embargo sé quién podría, y caminé rápido a la habitación dejando los hielos sobre la mesa y sentándome junto a ese chico- entonces… ¿qué sucedió? -no pude ocultar mi tono molesto. Y hace un rato decía sobre no entrometerme- ¿discutieron? Te voy a pedir que por favor seas más paciente con ella -me puse de pie y me crucé de brazos- levántate, aún no dominas la caminada.

-¿Y si ella se fija en mi?- pregunto con falsa inocencia, pero obviamente no me fijaría en ella. Es guapa y eso, pero realmente parece que sería una situación demasiado problemática, y yo prefiero ahorrarme los dramas. Y aunque disfruto de molestas a Nico y a Salem, obviamente no haría algo como eso, aun si solo se tratara de que ella quiere con Nico. No estoy interesado en amores no correspondidos... aunque tampoco en los correspondidos.

La chica aparece, y me siento un poco confundido, de repente creo que se veía muy triste, y no puedo evitar pensar que mi amigo le ha dicho algo.
Solo me encojo de hombros por su pregunta, obviamente no tengo respuesta.
Regresamos donde Nico y mi hermano no duda en ir directo a él para obtener una respuesta. Pero el tampoco parece saber que ha ocurrido.
-Tal vez está en sus días- comento solo para buscar una respuesta, pero luego acompaño mis palabras con un gesto de desaprobación, porque recuerdo a mi padre haber dicho esa clase de cosas -solo ignórenme- me acomodo en él sofá que está libre y sin preguntar tomo ese cuaderno para ver los dibujos. Es buena -¿ella es la del dibujo?- pregunto a Nico, aunque creo que se la respuesta, se nota el estilo.
-¡oh vaya!- exclamo al ver ese dibujo de mi amigo-[/color] y entonces me doy cuenta de que ella ha regresado -Eres buena- elogio su trabajo dejando el cuaderno cerrado sobre la mesita.

Tomé el vaso con agua y di un trago pequeño. Ella prácticamente salió corriendo de aquí. Es un poco graciosa, y me he reído sin pensar para luego sentirme un poco mal porque pareciera que me burlo de ella. Pero no lo hago, solo opino que se comporta un poco graciosa. Y se encarga no solo de avergonzarse a sí misma, también a mí. ¿Tanto le gusto? Es raro pensar eso de mí mismo, además hace un rato parecía pasarla bien con Ziba… Me siento como tonto por molestarme por eso, por siquiera considerarlo algo que me incomoda.
Di un trago más grande y me levanté a donde estaba la mesa para dejar el vaso, y volví al sofá tomando nuevamente ese dibujo entre mis manos.
-Qué vergonzoso -fue apenas un susurro y cuando su amiga y Ziba entraron a la habitación me acomodé bien en el sofá dejando la libreta a un lado- ¿nada? -de nuevo viene a mí con esa prepotencia. Entiendo que sea su amiga y lo que quiera pero no tiene que comportarse tan odiosa- ya te dije que no hice nada -¿y por qué tengo que darle explicaciones a ella? Es molesta. Aunque el comentario de Ziba aligeró mi humor, no es que me diera risa, simplemente supe que si estaba aquí con él era para evitar caer en una atmosfera pesada.

Me puse de pie e hice caso de sus indicaciones. Parece que no podré llevarme bien con ella, eso o lo que sea.
-Sí, ella lo hizo -contesté de inmediato a Ziba, aunque me apene al principio por el dibujo que veía, pero a él también lo dibujó, no es gran cosa si soy yo o alguien más. Cada vez me hago más consciente de ella y eso no está bien- ¿cómo está tu tobillo? -detuve "mi lección" para acercarme a ella. No es mi culpa que siempre se caiga en mi presencia pero me hace sentir un poco culpable.

Al bajar me siento observada, aunque era obvio que pasaría. Trato de sonreír como si nada pasara, pero Takabe siempre puede acabar con mi calma tan fácil, que solo ha tenido que preguntar por tobillo para que yo me ponga nerviosa de nuevo. No debería ser tan lindo conmigo, siempre es tan amable.
-Bien, solo fue un golpe- Aine reaccionó sobremanera, y claro que me dolió, y yo detesto lastimarme y dañar mi piel.

-Gracias- digo al amigo de Takabe y me siento mirando el mensaje que me ha llegado de Aaren. Al menos se que me contestará cuando lo busque, eso es algo a su favor... creo.
-Sigan por favor, no perdamos mas el tiempo- comento mientras comienzo a escribir: "No es el mejor, me he dado un golpe con la mesa. Me dolió mucho... Bueno solo quería saludarte, intentaré escribirte más seguido. Deberíamos intentar conocernos más", miro el mensaje parece demasiado largo, tal vez pensará que estoy loca porque de repente quiero que nos conozcamos, pero es lo que esperan de nosotros desde que nos presentaron. Suelto un suspiro y mando el mensaje.
Es un buen chico, es apuesto, es inteligente y de buena familia, ¿que mas podría desear?
Al pensar en esa pregunta levanto la mirada buscando a Takabe y no puedo evitarlo, suelto una risita al verlo caminar, ¿como se puede ser tan malo caminando? quiero decir, la pasarela tiene su grado de dificultad, pero pareciera que Takabe pierde su natural gracia en cuanto sabe que está caminando para la pasarela.
-Es como si al saber que otros te miran, olvidarás como caminar- comento un poco risueña y casi de inmediato estoy por disculparme pero no lo hago. El me gusta, mucho, realmente me vuelve una completa estúpida lo que siento por él. Pero no seré complaciente con él solo porque me gusta. Esto es algo importante para mi.
Es imposible no observar a Aine cuando camina para mostrarle, debo decir que despide cierto toque varonil que me sorprende.
-Aine eres muy buena, si fueras hombre quedaría cautivada por tu proyección -trato de elogiar a mi amiga pero si lo pienso un poco ¿no suena raro?

No lo había pensado pero… la verdad es que Ziba es muy atractivo. ¡Ay no!, eso sería el colmo de la mala suerte. Además aunque él me esté molestando sé que no haría nada con ella…
-Nunca, nunca, no eres su tipo -niego con la mano, pero la verdad no creo que Kajsa tenga algo como “un tipo”, es tan dulce que se fija en… pues no sé, porque Takabe no tiene nada de bueno.

Este tipo es tan frío. Siento pena que Kajsa se haya fijado en él, porque podría tener el chico que quiere y se viene a fijar en este que parece nada le causa algo de emoción. Aunque por otro lado me alegra que no le haga caso, no porque quiera una oportunidad, pero sería peor si solo la utilizara a su antojo y luego la dejara, o peor, se fijara en ella por interés.
-¡Ziba! -reprendí a mi hermano por su comentario y me volví a Takabe para regañarlo un poquito, aunque su forma de responder me ha hecho callar sobre el tema de Kajsa, aún tenemos que perfeccionar su caminada.
Le di otras indicaciones sin hacer caso a lo que decía Ziba, ya he visto esos dibujos de ella, y no le tomaría importancia sino fuera por esa respuesta inmediata de Takabe. Tampoco pregunté a ella cómo estaba cuando regresó, porque también Takabe lo hizo.
-Tiene que practicar mucho -y es que de verdad es malo para esto. Llevamos un rato aquí y él no mejora. Pero al menos su cara ha cambiado un poco, ya no trae el ceño fruncido y parece que de verdad se esfuerza aunque le salga mal. Según ellos dos, él es muy trabajador. Algo bueno debía tener- te mostraré de nuevo. Levantas el rostro, tu mirada siempre debe fijarse en un punto al frente y tu espalda debe estar siempre derecha. Deja que tus pasos vayan relajados. Relajados, más no flojos -caminé un par de veces intentando que entendiera, soy muy seguro de mí mismo con esto pero el comentario de Kajsa me puso un poco nervioso y pude sentir la mirada de los tres- sí, gracias… -solté una risa nerviosa y traté de mantener la calma- oh, es verdad -me acerqué a ella y tomé su mano para ir donde Ziba. Estoy muy nervioso, así que hice un cambio de tema un poco radical- él es mi hermano, por cierto -fue una introducción tonta, se suponía que iba a explicarle con calma sobre nosotros pero incluso siento que me tiembla un poco la voz. No sé si Kajsa es demasiado distraída o ilusa, pero me hace sentir mal el hecho de mentirle sobre mi género.

Solo me encojo de hombros cuando dice que yo no soy su tipo. Ella tampoco entra en el tipo de chicas que mi gustan, demasiado linda, delicada y rica. No parece mala persona pero no creo que existieran muchas cosas que pudiéramos compartir. Aunque ¿Desde cuando me interesa tener cosas para compartir? Tal parece que está reunión a afectado un poco mi cabeza y estoy pensando cosas fuera de lugar.

Río para mis adentros por lo que le dice la chica a mi hermano, no quiero ser tan cruel, se que a él le gusta y que para él no es tan fácil lograr que las cosas con las chicas fusionen. Si alguien llega a amarlo tiene que amar todo de él, y eso no ocurre muy seguido.
-Tardas tanto en presentarme que pensé que te avergonzabas de mi- comento por la presentación tardía y luego miro a Nico -Somos familia- digo como si era fuera mi manera de presentar a mi hermano, ¿pero que puedo decir? presentarlo como mi hermana, sería raro. Y no es que me afecte mentir, lo hago mucho cuando se trata de su trabajo, pero no creo que deba ser yo él que revele ese secreto a esta chica.
-Nico me mostró el dibujo que hiciste de mi, tienes talento, y Aine no deja de hablar de ti desde que se conocieron - no me gusta que toda la atención de alguna manera se centre en mi. Si, acostumbro a recibir miradas por lucir como luzco, pero ahora es diferente, no es por mi imagen... y es raro.
-Venga Nico te enseñaré- me levanto y solo camino hasta él. No es que yo sea modelo, pero tanto tiempo viendo a Aine, mirando los ensayos que tiene, creo que un poco he aprendido, pero ni siquiera intento hacerlo bien, de hecho lo hago mal con la intención de que se relajen y se rian un poco, así que camino demasiado exagerado y afeminado -Soy genial, ¿no?- le digo a mi amigo cuando llego a su lado.

Cuando la amiga de Kajsa le gritó a Ziba me sorprendí. Son demasiado familiares el uno con el otro, obviamente se conocen, solo que no entiendo cómo podrían ellos tener alguna relación.

Al menos ella se ve más tranquila. Y me preocupa solo porque su estado de ánimo afecta a nuestra pequeña sesión. Suelto un suspiro aliviado sin querer y luego le hago caso a su amiga con todas las indicaciones. No entiendo porqué estoy tan rígido, tal vez porque me presiona demasiado. Y eso me molesta aún más porque soy una persona acostumbrada a la presión, ya sea en casa o el trabajo puedo manejarlo. Pero ahora no, y me hace sentir un idiota.
-De acuerdo -debo controlar mis emociones. Ya he tenido jefes insoportables, no debería ponerme de mal humor porque ella no tiene un buen modo al tratarme. Observé su forma de caminar intentando encontrar el truco. Cuando lo hago siento que lo hago parecido pero creo que no es suficiente.
Empecé de nuevo y me detuve por el comentario de Kajsa. ¿Es en serio? O sea, ¿es que acaso soy el único que nota lo raro de su cuerpo? Esa masculinidad cuando a veces camina o se dirige a Kajsa, se nota que esta “rara”. Pero creo que Kajsa no se entera, y su comentario me causó… no lo sé, me sentí un poco mal pero ni siquiera sé si es por ella o por su amiga.

-Ya -¿qué? Oh, así que es un familiar, hermanos. Esto se siente un poco incómodo, pero tal vez solo soy yo porque no proceso que uno de mis amigos más cercanos tenga como hermana a la amiga de la chica a la que le gusto. Es vergonzoso pensar en eso, en que le gusto. Me hago cada día más consciente de ella, y eso me molesta. Antes apenas recordaba su nombre y su existencia, ahora estoy al pendiente del teléfono por si ella necesita mi presencia. Obviamente todo se trata de trabajo, pero también pienso en otras cosas, la manera en que trabaja por ejemplo, me gusta. O que a veces es muy lenta, y no porque tenga algún problema, solo que es… ¿muy inocente? Me molesta pensar en ella cuando no la veo- … sí -me quedé mirando a Ziba, él lo hace mejor que yo. No es normal que estas cosas me importen- deberías enseñarme tú, mejor -sonreí a él sin querer, pero sentí que despreciaba un poco a su hermano.

No puedo evitar mi sorpresa al escuchar lo que me dice Aine. Son tan diferentes que me cuesta creer que son hermanos.
-¿en serio? vaya, no lo habría imaginado- digo aun con estupor -tu hermano es divertido- le digo con discreción a Aine, mientras observo la manera en que camina su hermano.
Reviso mi celular por un momento para ver si Aaren me ha dicho algo, pero supongo que debe estar ocupado, así que suelto un suspiro un poco desanimada.
-Gracias por venir Aine, me gustaría poder presentarte a mi hermana, ella es muy desobligada, así que pocas veces ensaya para las pasarelas, pero supongo que tiene talento natural- le platico mientras veo como Ziba le "enseña" a Takabe, o creo que solo están jugando. Takabe luce de mejor ánimo, y no puedo evitar sonreír mientras lo observo interactuar con su amigo. Y luego me vuelvo a desanimar un poco.
-¿Tu hermano es gay?- pregunto bajito a mi amiga.

-¡Eres increible Takabe! lo estás consiguiendo- digo emocionada levantándome de mi lugar y luego me río nerviosa por mi reacción exagerada, como siempre me pasa con él -Ziba y Aine sin muy buenos enseñando. Pero deberíamos descansar un momento, ¿gustan algo de comer?- esto es lo mas cercano que he estado de tener amigos en mi casa, es verdad que mi amiga viene, pero nada más ella, así que estoy emocionada con tenerlos a todos aquí, y creo que quiero que se queden solo un rato más, pero tal vez soy imprudente -o tal vez tienen cosas que hacer y yo ya les quité mucho tiempo tiempo. Si quieren podemos terminar con esto ya- seguro Takabe ya se quiere ir.

Tragué saliva nervioso. No creo que kajsa sospeche nada pero de igual forma su comentario me dejó un poco helado.
-¡Qué va, sabes que te adoro! -le guiñé el ojo a Ziba y dejé que intercambiaran saludos mientras me calmaba un poco. Parece que Takabe tampoco se lo esperaba, y ni yo, pero mejor que sucediera ahora y no después cuando ella pensara que él es mi pareja, como lo piensan todos los demás- es un poco molesto a veces, pero es muy agradable, ¿a poco no luce genial? -me sentí algo tonto por la forma en que me expresé de Ziba. Y aunque lo susurré, nunca intento ocultar el cariño que siento por él y lo mucho que me gusta su estilo aunque sea totalmente diferente al mío. Además esto ayudó a hacernos un poco más cercanas, y me puedo conformar con tener su amistad- ¡ya quiero conocerla! -me siento emocionado por cosas tan simples como esta, pero es que difícilmente me hago cercano a las personas a pesar de ser tan amigable.

Ellos dos comienzan a ensayar por su lado y simplemente me río, creo que solo me estoy desquitando con él y por eso lo pongo tenso. Pero no puedo evitarlo, me cae mal.
-¿Qué? -me giré a Kajsa y le puse una cara extraña- no, no -miré a ambos, acaso piensa que ellos dos…?- no, a Ziba le gustan las chicas, ¿por qué lo dices? -traté de no hablar muy alto. Aunque su pregunta me tomó por sorpresa. Pero ahora que lo pienso puede que sea mi culpa, yo le dije que tal vez Takabe era gay…
-¿Quieres que te ayude? -no sé si ellos se quedarán, y como le he dicho sobre Ziba me siento más relajado.

Al final no es que yo sea un maestro en eso de modelar, pero creo que Salem realmente es demasiado duro con Nico. Entiendo que se pueda sentir celoso, digo esa chica despide adoración por Nico... Realmente me hace sentir mal por mi hermano, pero tampoco puedo ser injusto con mi amigo y dejar que Salem lo torture solo por gustarle a ella.
-Vale, yo te ayudo con eso- digo un tanto resignado. Porque se supone que yo acepté venir a esto solo para tener material de burla contra Nico, y bueno, todo ha sido un poco divertido, pero solo por mi diversión no dejaré que dos personas que aprecio, la pasen aun peor.
En algún punto solo estamos caminando de un lado a otro, y parece mucho mas relajado.
-Entonces... ella me dibuja con mariposas y a ti te dibuja desnudo, interesante- comento de la forma mas casual pero al final solo soy sarcástico -Aine siempre dice que es una chica muy inocente, supongo que tu sacas lo mas oscuro de ella.

No se que decir, cuando menciona lo de comer, la verdad no pensaba que nos quedaríamos tanto tiempo, aunque tampoco es que yo tenga asuntos de vital importancia que atender en otro lado. Me encojo de hombros y doy unas palmadas en la espalda de mi amigo.
-El me trajo, así que él decide. Pero si nos quedamos, ¿puedo ir por unas cervezas? creo que me vendrían bien para relajarme- en realidad creo que todos menos yo necesitan relajarse.

-Mmm, gracias -sonrío un poco cuando me elogia y sigo practicando como Ziba dice, al final terminamos él y yo haciendo esto, me siento un poco culpable porque él termine involucrado cuando bien sé que no le gustan mucho estas cosas. Aunque fue él que se ofreció y yo simplemente lo mencioné al azar, pero parece familiarizado por su hermana.

-Lo es -comento concentrado en mis pasos, y deteniendome un poco después para mirarlo- y es normal dibujar cuando eres diseñador, ¿no? Tiene un montón de buenos bocetos en su cuaderno -de alguna forma soné como si no quisiera que él se sintiera especial- y pues… me va a diseñar ropa, creo que mi dibujo es normal -no, para nada lo es, pero quiero excusarme por ella para no darle la razón. Tampoco pienso que sea una pervertida, porque la conozco un poco y creo que es una de las chicas más despistadas e inocentes con las que me he topado. Aunque no sé cómo explicar mi dibujo, porque dios, es vergonzoso el pensar que ella me trazó semidesnudo.

Nos detuvimos para poder descansar, creo que pude entender mejor con él que con la amiga de Kajsa, tal vez porque Ziba no me presiona para hacerlo perfecto al instante.
-Está bien -se supone que aquí debería negarme, pero ella tiene una expresión preparada para el rechazo- yo puedo ayudar a Kajsa, ¿por qué no acompñas a tu hermano a buscar lo que quiere? Ninguno de los dos conoce la zona -me quedé callado y luego me percaté de mis palabras- ah, no… -desvié la vista. Creo que hoy estoy diferente a lo usual, solo debería rechazarlos e ir donde tenía planeado con mi amigo.