High Hopes - Jia

Cuando llegamos todo está oscuro, el auto de mi padre no está y supongo que es buena señal. Enciendo la luz y pasamos a la cocina para tomar las bebidas, en casa siempre hay cerveza y no son tantas, pero servirá para alguien como Jia.
-Toma -le doy la lata y dejo las demás sobre la mesita, me siento en la orilla de la cama y la abro. Primero dejo que se desahogue todo lo que quiera, creí que se soltaría a llorar, pero solo está sacando sus frutraciones y es buena señal, pienso que a pesar de todo podrá olvidarlo, ¿no?- vah, bueno, sí [/color]-es algo raro confesarle eso a él, le dije que era hetero y bueno, al aprecer no- no tienes que compararte conmigo Jia, y ya no importa lo que no hiciste, no quita que sea un idiota -digo, si no decía el nombre del otro iban a seguir igual, pero probablemente su novio… ex… seguiría engañandolo.
Dejo la lata a un lado y lo tomo de los hombros, puedo decirle que no es su culpa, pero la verdad necesita salir de esa ilusión absurda en la que está metido.
-Sí, se siente muy bien, y deberías dejar de pensarlo tanto, Jia -tomo su lata también para que no la derrame- no justificaré a ese tipo, solo creo que ese ideal que tienes es demasiado… alto, al final es solo placer, sexo, no es tan complicado -no creo que sea asexual, si dice que lo tocó y le gustó, es porque evidentemente lo disfrutó- si no te gusta pues no puedo ayudarte, eres así y algún día encontrarás alguien igual a ti, pero si solo es por esa idea tonta en tu cabeza… no vas a dar ni con uno u otro -me acerco a él y lo miro de cerca- ¿qué sientes cuando los besas? ¿Es solo algo que proviene de aquí? -señalo su pecho como una metáfora- no, ¿cierto? Seguro también tienes algunos pensamientos sucios y pues, no creo que alguien que no siente atracción por el sexo piense esas cosas, solo es que dejes atrás esas ideas viejas y comiences a disfrutar tu sexualidad libre de prejuicios -al menos que esto le sirva para dejar esos estándares bobos, así se evitará tantos amores idealistas.

Casa:

Pese a los gestos tomo realmente rápido, nada de lo que yo haya hecho alguna vez y no siento que me ayude no me siento mejor o que se me olvide ¿no se supone que la gente toma para sentirse mejor? Yo solo me siento mareado.
-Si, es un idiota-confirmo.

Él solo dice que si, y me quita la lata de la mano.
-No es un ideal… yo la verdad tengo miedo, me asusta- no es que eso de esperar la persona indicada sea por un ideal, a mi me aterra lo que pueda pasar, no quiero sufrir, no quiero pensar en como puedo ser utilizado, como lo hizo esa persona, solo me utilizó, incluso me golpeo frente a todos para “limpiar” su imagen de chico hetero. La gente puede ser linda por sus deseos, pero en el fondo solo ser malas personas, como Chi.
-No, no sé lo que siento, solo son besos… ¿debo sentir algo? solo es un contacto y ya- pero hoy los besos de Chi quemaban cuando pensaba en otra persona -Tal vez a veces, ¿pero como hacerlo? yo no tengo, yo o puedo solo ir y hacerlo con alguien que no conozco, ¡dios me aterra la intimidad! ¿Es tan complicado entender eso? le tengo miedo, me han lastimado siempre por eso, he sido humillado por eso ¿como podría solo ser libre y disfrutar sin prejuicios? no puedo ni siquiera pasar a segunda base a menos que use técnicas de actuación para desconectarme - digo frustrado e intento buscar de nuevo la lata que me ha quitado hace poco y la bebo por completo sin importarme nada el desagradable sabor y así casi con enojo bebo otra.. ¿y otra? no, ya no. sé cuanto he tomado. Me levanto para ir al baño a orinar y salgo de nuevo y me vuelvo a tirar en la cama.
-Todo se mueve y tengo cosquillas- digo pasando mis dedos por mi rostro.
-A veces si pienso cosas sucias, cuando te vi en la sala de esa manera- me río nervioso.

No estoy en la situación de Jia, somos completamente diferentes en ese aspecto y aún así, comprendo a lo que se refiere. La diferencia es que yo he marcado límites claros para evitarlo, y él cree que ha marcado esos límites, pero en realidad permite que sus emociones las hagan añicos.
-Supongo que te costará quitarte esas ideas de la cabeza -tiene mucho miedo y no comprendo cómo entonces sigue creyendo en ello, lo normal es que dejara de buscar su persona especial, pero solo sigue esforzándose en vano.

Lo veo tomar y lo dejo quejarse, yo también estoy tomando pero a menor velocidad. ¿Estará bien? Lleva varias latas pero sigue y sigue, parece que en serio quiere pasar su límite y desconcetarse del mundo.
-Con cuidadoo -mientras él va al baño quito las latas de su vista, mañana se volverá el señor dramático si le llega a pedar la terrible cruda- es porque nunca habías estado borracho -agarré su cabello y comencé a jugar con el cuando se recostó, yo permanecí sentado- ¿en serio? -ese comentario me pone nervioso, ha salido de la nada y no sé cómo procesarlo. Hoy me di cuenta que los chicos no están fuera de mis límites, y no dudaría en intentarlo pero se trata de él, simplemente no sé cómo sentirme- ¿qué clase de cosas? -pero no siento asco, mi pulso está acelerado y no sé por qué me he agachado a él. Mi mano está recargada al costado de su cabeza, y con la otra sigo jugando con su cabello- sabes, no pensé que pudiese sentirse bien estar con un chico, pero ha sido una buena experiencia -esta distancia hace que mis nervios se alteren y la pesadez en mi estómago sea agradable de alguna manera, como estar tocando el límite de lo prohibido y dudar en si pasarlo o no-tal vez solo deberías probar con alguien en quien confías -me acerqué a sus labios, pero no es un beso lo que dejo en ellos, sino una pequeña lamida que me hace percibir el sabor a cerveza.

Se siente bien que juegue con mi cabello de esa manera, es tan relajante.
-Una vez en el colegio, mis fuimos a casa de un amigo, y su padre había dejado una botella, así que la tomamos, por eso no tomo, no fue para nada una experiencia agradable- respiro profundamente.
Sonrío no por su pregunta, sino porque su imagen aparece en mi mente.
-Pues no como tal de hacer algo, fue como sentir un deseo - toco la parte alta de mi abdomen como si de ahí se expandiera la sensación al verlo -ya veo…- suspiro un porque ha dicho eso de estar con un hombre, eso hace que por alguna razón no me sienta bien. Es curioso porque recordar su imagen aun despierta esa sensación en mi, pero ser consciente de que estuvo con un hombre hacer que ese deseo se apague. Apenas iba a contestar a su comentario diciendo que tampoco tengo una persona en quien confiar para hacer esa clase de cosas, y siento aquella sensación húmeda en mis labios y abro los ojos mientras una risa acompaña mi gesto, me estiro un poco y con mi mano lo acerco a mi para repetir el acto que él ha tenido conmigo como si de un juego se tratara pero ahora no me río por ello, si no que respiro profundamente y nuevo llevo mi mano mi abdomen como intentando contener esa calor y cosquilleo pero es como si no lograda hacerlo y lo peor de todo en mi pantalón se comienza a notar la reacción. Con Chi me costó conseguirlo, pero ahora solo un par de lamidas de juego con Zhi y mi cuerpo ha reaccionado -Lo siento- bajo mis manos para cubrirme, aunque lo hago torpemente por mi borrachera y por la manera de hacerlo termino soltando un jadeo.

Creí que iba a enojarse conmigo o alejarme, está conmocionado por su ruptura y luce un poco triste, pero no está molesto por esto, hasta repite ese gesto y me hace sonreír por el cosquilleo que me provoca.
-No creo que seas asexual, si lo fueras no sentirías tan fácilmente -con mayor razón creo que él solo está reprimido, y aunque debería darle espacio para que se ocupe de ello o se calme, tengo un deseo extraño por hacerlo un desastre y ver todas sus expresiones. Sus gestos son agradables, tiene un aura sensual e inocente que me es difícil de explicar y también a la que no me puedo resistir- no tienes que pedir perdón -pongo mi mano sobre la suya para cubrir su reacción, y comienzo a acariciar sus dedos- tal vez solo era tu ex que no te provocaba nada -me acerco de nuevo a su boca, he sacado mi lengua pero no toco sus labios, solo espero que él haga lo mismo para que se toquen. Estoy ardiendo por dentro y no entiendo por qué, es un coqueteo cualquiera y hace poco tuve sexo, debería estar más calmado pero no, quiero besarlo, y ese pensamiento es confuso porque él y yo no somos extraños, y lo más probable es que si continuo esto se convierta en un problema todavía más grave. Pero me siento mareado con todo esto, las cosas transcurren muy rápido y solo hago caso a lo que mi cuerpo pide.

Mi respiración es tan pesada, sobre todo cuando pone su mano sobre la mía, solo pensar que está tan cerca de tocarme. Eso me pone nervioso y aun así no intento alejar su mano, solo veo como acaricia mis dedos.
-Puede que fuera eso- lo veo acercarse, me siento tan hipnotizado ¿por qué? esto es tan extraño, y me gusta.
Está cerca de mi y su lengua parece invitarme a hacer lo mismo, y mis labios se abren solo lo necesario y saco mi lengua para tocar la suya, solo eso me deja sin aliento.
Quema, mi cuerpo quema tanto en este momento, mi cabeza está caliente como nunca lo había estado. Busco sus labios, ¿por qué? solo porque lo deseo. Mis labios exigen un beso apasionado, tan húmedo y profundo, que si no estuviera tan entregado a ello, seguro pensaría que es algo demasiado obsceno, pero que importa si se siente tan bien.
¿Es acaso esto lo que dicen que me he perdido? casi siento que es un desperdicio el tiempo que he estado lejos de los labios de Zhi.
-esto se siente bien- comento cuando nos separamos de ese beso -¿Me enseñarías?- ¿puedo pedir tal cosa? luego de besarnos, no parece una mala idea que él me pueda enseñar.

Estoy asustado de lo bien que se siente, de cómo mi cuerpo lo busca solo y que mi cabeza no piense en nada más que tomar todo de él. Las cosas que sé comienzan a mezclarse con el deseo que se prende de repente en cuanto nos besamos, y correspondo con temor y desesperación. Siento que me falta el aliento y me quema el cuerpo, es raro, esta intensidad es como conectarme de nuevo a algo que me habían quitado. Es estúpido y probablemente consecuencia de mis miedos, pero sigo probando más profundo en sus labios.
-Lo sé -mi respiración está agitada, no sé qué es amar en serio y tengo miedo que se sienta así de intenso- sí, claro -¿sí? No sé por qué he accedido, pero a tocar su rostro, pequeñas descargas se reparten en todo mi cuerpo. Él y yo tenemos la misma cara, esto es tan raro que ni siquiera sabría cómo nombrarlo, pero no lo pienso demasiado, y mis dedos se abren paso entre su ropa y a detalle tocan cada parte de su pecho. Lo observo sin dejar que un solo gesto se escape, y me hundo de nuevo en sus labios buscando calmar el temor que a momentos, intenta bloquearme- ¿lo sientes? -mi voz jadea y voy bajando hacia su pantalón. Mis movimientos van a un ritmo lento y natural, como si esto hubiese sido previamente estudiado- tu piel está caliente -suelto una risita, estoy tratando de recordar cómo lo hizo Tohru conmigo, pero su mirada y sus sonidos me distraen muchísimo, y solo atino a comenzar a bajar su pantalón.

Cuando nos besamos, no sabría describirlo, cualquier cosa que haya leído o interpretado se queda insignificante a lado de esto. Es intenso, es abrasador. Sus labios se siente tan bien.
¿Por que lo he pedido? no tengo cabeza para pensar en si está bien o mal, ni en las consecuencias que esto podría traer, ¿es por que estoy borracho? no lo sé, no lo entiendo y me importa tan poco entenderlo, solo quiero seguir, lo necesito, necesito a Zhi.
Mete sus manos entre mi ropa, lo normal para mi sería detenerlo, decir que vamos muy rápido, es lo que siempre hago, pero no, solo disfruto de la sensación de descubrir que mi cuerpo es tan sensible ante sus manos. Tiemblo incluso de lo bien que se siente.
-Si- ni siquiera pregunto el que, solo es como si entendiera su pregunta sin más -la tuya también- mis manos buscan tocar un poco de su piel, y sentir esa ardorosa sensación.
Cuando llega a mi pantalón no pongo resistencia, incluso lo ayudo y me quito todo lo que sienta que estorbe. Hace un rato con Chiaki me sentía tan vulnerable cuando estaba así, pero con Zhi, no me importa, si me ve desnudo no me siento mal o culpable, o avergonzado. Es natural y agradable, al menos así es como me siento. ¿Todo esto es culpa del alcohol? Me acomodo para poder quitarle también su playera y comienzo a desabotonar su pantalón.
-También quiero verte- expreso mi deseo sin pensarlo.

Aprieto la mandíbula para contener otro jadeo, tocarse entre dos personas provoca placer, pero lo de ahora está sobrepasando lo que antes he experimentado y ni siquiera he hecho nada más que besar y acariciar. Aún así termino cediendo al deseo y me deshago de la camisa con su ayuda, los pantalones también comienzan a estorbar y sin responder nada, accedo a su demanda.
Cada vez que lo toco o cuando él pone sus manos sobre mi piel, siento un escalofrío que quema, mi estómago está pesado pero no por alguna sensación desagradable, es por lo satisfactorio que es tocarlo y observar cada parte de su cuerpo.
Lo tumbo en la cama y me coloco encima de él, mi mano acaricia su rostro de nuevo, sus hombros y su torso, delinear su silueta es como tocar mi cuerpo, pero con otra esencia que me hace sentir atraído. He comenzado a imitar lo que Tohru hizo conmigo, y voy directo a su pecho para comenzar a lamer lento mientras mi mano lo acaricia. No soy tan cuidadoso, mis movimientos demuestran lo alterado y consternado que estoy, como si realmente quisiera devorarlo entero.
-Jia, abre tus piernas para mí -su nombre y mis palabras me provocan un espasmo, pero su imagen es más hipnotizadora. No negaré que la experiencia con Tohru fue increíble, pero no fue su cuerpo lo que me provocó estar duro. Con Jia es solo verlo para sentir que quiero estar dentro y poseerlo, como si solo yo pudiese llenarlo.

Asi es como deben fluir las cosas, o eso creo, no pienso en cosas negativas, no tengo miedos, se trata de Zhi, es especial este momento porque se trata de él. Siempre dicen que nos parecemos pero para mi, pese a que al inicio realmente notaba que nos parecemos, solo me doy cuenta de las diferencias, son mínimas tal vez, pero para mi Zhi es simplemente único y especial.
El me toca y yo no lo detengo, me siento tan bien como me tocan sus manos y yo también acaricio su cuerpo, mi manos también baja para tomarlo entre mi mano. De repente todo espontáneo que mi mente sigue solo enfocada en lo que se siente.
Abro mis piernas como lo pide, de nuevo no objeto nada en ningún momento, no me lo cuestiono ni un poco. Todo lo que me aterraba se ha ido, me siento tan libre.
Siento un poco de dolor pero no lo detengo, solo trato de permanecer tan relajado como es posible.
-Duele un poco- confieso pero incluso con eso yo no lo esto deteniendo, y sé que mi mirada solo muestra la necesidad que siento con todo esto. Estiro un poco mis brazos para acariciar su pecho, una de mis manos baja lentamente para tomarlo de la mano y así cambiar un poco el ritmo de los movimientos de su mano -Así está mejor- digo entre jadeos porque el dolor a pasado a segundo termino y mi cuerpo comienza a disfrutar.

He terminado lamiéndolo luego de masturbarlo, siento como si debería probar todo con él antes de que se me escape de las manos. Es una sensación extraña, no sé si puedo describirla como algo agradable porque jamás imaginé que podría tener el pene de un tipo en mi boca, pero sus sonidos y la desesperación que muestra su cara borran las dudas de mi cabeza; mis manos se mueven con naturalidad por las partes más íntimas de su cuerpo. De nuevo trato de recordar lo que experimenté y comienzo a tocarme mientras lo miro, mis manos se ocupan de acariciarlo superficialmente sin entrar, es un límite que no sé todavía por qué deseo atravesar. Pero la imagen de él y acariciarnos es suficiente para que comience a perder el miedo.
-Chupalos -estoy sonriendo mientras sigue ese juego con mis dedos en su boca- tienes que respirar hondo -comencé a tocarlo con mucho cuidado, he dejado un rastro de saliva para dejar la zona más húmeda, y para hacer que el proceso no sea tan doloroso, repartí algunos besos por toda la zona sobre su piel. Voy lento, no me explico cómo puede mi cuerpo mostrar cautela si me siento tan nervioso y con el pecho a punto de explotar.
Pero tocarlo es suficiente para yo comenzar a sentir espasmos más continuos,mi respiración está cada vez más entrecortada y siento ese calor en mi estómago muy intenso. ¿Cómo puedo sentirme satisfecho con solo tocar a alguien?

Nunca imaginé que terminaría haciendo toda esta clase de cosas, pero mi mente está completamente en blanco, solo siento como me envuelve con su boca, y se siente tan bien que no puedo controlar los sonidos de jadeos.

Creo que me voy a volver loco de todo lo que estoy sintiendo y no me importa lo demás, cuando el me dice que lama sus dedos lo hago, cuando me dice que respire profundamente lo hago. Me pongo tenso y siento dolor, y aun así yo mismo busco que se siga moviendo porque sé que el dolor pasará y vendrá el placer.
¿Que diablos me ha poseído para comportarme de esta manera?
No puedo resistir demasiado, el placer es indescriptible, es algo que jamás había sentido y aunque desearía que no terminará no puedo más.
-Ahora entiendo porque les gusta tanto hacerlo- digo apenas con aliento para poder hablar.
Tengo una sonrisa en mi rostro, y me siento cansado y no tardo demasiado en dormirme justo como he quedado en la cama.

Abro los ojos, la cabeza me duele un poco, siento la boca seca, y pese a que ya es de día yo me sigo sintiendo cansado.
Miro un poco el lugar donde esto, no es mi recamara. Los recuerdos de la noche anterior me llegan de golpe.
-Oh... dios- miro en la cama y estoy solo, completamente desnudo... -Fue real- quiero salir, escapar y no ver a Zhi, no sé que se hace ahora, nosotros lo hicimos... por alguna razón una sonrisa boba se forma en mis labios.
-¡No es tiempo de eso!- me reprendo mentalmente y casi desearía no tener una erección matutina, porque me siento culpable, como si por pensar en lo de anoche me estuviera pasando. Solo supongo que estoy algo sensible. Me levanto a buscar mi ropa y poder ir al baño. Mi cuerpo realmente duele.
Entro al baño, orino, le lavo un poco, enjuago como loco mi boca para quitarme esa pastosa sensación.
Al salir me encuentro con Zhi, mi corazón se estruja de inmediato.
-Buenos días, yo... debo ir a prepararme para el teatro- no me atrevo a mirarlo a los ojos, anoche dije e hice cosas tan vergonzosas.

Él no se niega a nada y yo no tengo autocontrol, y después de un rato siento cómo comienzo a venirme. Me falta el aliento y sonrío cuando suelta esa frase, me tumbé a su lado en la cama y sentí la pesadez en mi cabeza, es como si el placer me hubiese cansado al grado de dejarme noqueado.

Por la mañana sentí el frío por todo mi cuerpo, abro los ojos y me levanto de golpe, lo que ocasiona que mi cabeza comience a punzar. Miré a Jia al lado y llevé mi mano a mi boca, siento muchas nauseas y no precisamente por verlo, sino por todos los recuerdos que comienzan a surgir. Casi tuvimos sexo, él y yo, y eso está demasiado mal.
Me levanté para ir al baño y las nauseas me hicieron vomitar, no sé si es el alcohol o la impresión por todo, pero me siento demasiado mal que quisiera morir. ¿Qué carajo hice?, ¿qué haré si él pregunta algo? No sé ni cómo confrontarlo, estoy demasiado consciente de nuestras circunstancias y eso me llena de miedo, porque es… repugnante, ¿no? ¿Pero cómo es que ayer se sintió tan bien? Me siento peor, si al menos hubiese sido una experiencia horrible, no tendría tanta culpa encima.
-Mierda… -abrí la regadera y me di un baño, mi cuerpo está pegajoso por todos lados, y abro al agua fría para hacer que mi cuerpo deje de reaccionar ante los recuerdos.

Salí de la ducha y me envolví en una toalla la parte de abajo, Jia sigue dormido y echo una sábana encima de él, me da tiempo de cambiarme y salir a preparar un café, al menos así puedo pensar en qué decirle o cómo distanciarme a partir de ahora, porque para nada pensé que podría llegar tan lejos.

-Buenos días -estoy avergonzado, creí que seguiría durmiendo- ah, am, entiendo -tengo dos tazas en la mano, le hice un té para la resaca-toma, te hará sentir mejor, bebelo antes de irte -él ya se ha cambiado- ¿no quieres tomar un baño? Puedo prestarte ropa -si fuera cualquier persona podría actuar normal, pero ahora no, ni siquiera puedo verlo a los ojos- es… ¿estás bien? -no debí preguntar, y por fin lo veo a los ojos, ¿por qué mi corazón se acelera?

Tomo el té, la verdad no siento que me vaya a ayudar, no me siento bien, pero doy unos tragos casi como el niño que quiere demostrar que tomó su medicina y ya puede irse a jugar.
-Gracias- lo he bebido casi todo y le devuelvo la taza -No... tengo que pasar a mi casa- ni siquiera avisé que no llegaría, seguro mis padres están preocupados, aunque en realidad lo que quiero es encerrarme en mi recamara, y esperar que el tiempo pase. Al menos cuando vaya al teatro sentiré alivio, porque dejaré de ser yo. Creo que iré a todos los talleres de improvisación que pueda, lo que sea para mantener mi mente en otra cosa.
-No estoy mal... tampoco bien. Nunca he pasado por algo así, creo que necesito tiempo.- no se me ocurre nada más, solo miro sus ojos por un segundo -Adios- me despido sin más y solo camino a la salida de su casa. Obviamente estoy huyendo, pero no se que más hacer.