Encuentros [Privado]

Recuerdo del primer mensaje :

Me encantan las fiestas de disfraces, es cuando más puedo echar a volar la imaginación y ponerme lo que quiera sin tener que ser juzgado. Pero esta vez dejé un poco de lado eso para centrarme en lo importante. Y es que Kajsa ha estado decaída estos días, y obviamente la razón solo puede ser una. Además, ahora que comencé algo con Sora, aunque solo somos amigos, pero… pero aún así, ya no puedo ser esa otra persona que la ayuda a olvidarse del inútil de Takabe. Incluso Hana y ella han comenzado a llevarse un poco, pero parece que para Kajsa no es suficiente.
Le he dejado a Ziba un par de boletos para que lleve a ese idiota y al menos Kajsa pueda tener una noche especial. Sé que puede resultar contraproducente, de hecho es lo más probable, pero me gustaría que estuviera feliz al menos hoy. Y según Ziba, a ese imbécil no le es tan indiferente, y si ella mismo casi lo confirmó, mi plan no puede resultar tan malo.
Terminé de arreglar mi cabello y esperé sentado a que Hana terminara de cambiarse. Pedimos prestado uno de los camerinos ya que no podemos usar mi casa, y también algunos accesorios, cosa que me costará después algunos favores. Obviamente Ziba no sabe que ella va, porque seguro comenzaría a negarse y todo se iría al diablo. Son unos idiotas, no entiendo cómo puede negar algo tan obvio, pero bueno, yo les haré un pequeño favor.

-Tardaste mucho -crucé mis brazos y me puse de pie, luego sonreí- oh… -la miré de arriba a abajo, se ve muy bien. Hice que las tres llevaran el mismo atuendo, y como esperé esto dará buenos resultados- ven, te acomodaré la peluca -me acerqué a ella y acomode el cabello color miel. Así Ziba no se irá antes de tiempo, porque si la reconoce, creo que podría salir corriendo- bien, te ves guapisima -sonreí- ahora, toma tus cosas y vamonos, que aún debemos ir por Kajsa y su hermana.

Salimos y tomamos un taxi para ir a la casa de ellas. Seguramente Kajsa se enojará porque soy la única que no va a juego, pero eso está fuera de mis posibilidades. Ya me inventaré alguna excusa.
Cuando llegamos, esperamos en la sala. Hana parece nerviosa, ¿tal vez esa ropa es demasiado? Pero no es la clase de chica puritana. Y eso que no sabe que Ziba irá con nosotros.

Aine:

Comienzo a reírme de él, los hombres son tan quejumbrosos. Es cosa de acostumbrarse al dolor, ya luego de varias veces ni lo sientes.
-Ya, ya, es por un bien mayor -le digo sin importancia. Él es muy sensible. Aunque cualquier hombre, por muy viril que se vea, se quejaría de algo como esto.
De nuevo parece no querer esto, hasta siento que le estoy haciendo algo malo, pero solo trato de que se guste un poquito. Y bueno, también me sentía animada para hacer un cambio de imagen a alguien fuera del trabajo.
-Lo es, pero llamativo no es malo. Aunque puedes teñirlo sino te gusta, ya te dije -este chico se queja demasiado, es una imagen totalmente diferente a la que me dio hace un rato. Pero no importa, no me molesta realmente. El enojo que me causaron sus palabras se fue en cuanto comencé a meterle mano a su imagen- no van a brillar, no mucho -es para que no luzcan resecos, aunque los de él se ven muy suaves. Me frustra que haya sido bendecido con tan buenos rasgos y no los aproveche- jeje, no te molestes -pero pese a quejarse tanto y poner caras extrañas, ha dejado que yo haga lo que quiera.

Sonreí por su agradecimiento. No luce tan feliz como pensé. Esperaba un woow, me veo fabuloso, pero solo obtuve un simple gracias de su parte.
-¿Eh? -lo miré fijamente y sentí mis mejillas calientes. No le entendí mal, ¿verdad? Pero, bueno, ¿es una broma? ¿Qué debería decirle? Miré mis manos y comencé a jugar con mis dedos. Acabo de sufrir un rechazo, y él también, ¿es como consolarnos mutuamente? Eso no es buena idea, no quiero salir con un chico que está enamorado de otra. Además todavía está Ziba, por muchas distracciones que tuve, al final llega de nuevo a mi cabeza, ni siquiera he sido capaz de hablar con él. Pero si lo llamo una vez más realmente me veré como una desesperada y acosadora. ¿Qué debería decirle? Pero ¿y por qué lo estoy considerando? Aunque él es guapo y agradable, muy quejumbroso, pero... - amm, bueno. Sí, por qué no -sonreí aún con la vista hacia abajo. Soy una idiota, ni siquiera he superado el pasado, me gusta Ziba un montón y acabo de aceptar una cita de un desconocido- no es una broma, ¿verdad? -levanté la vista. Porque apenas se me ocurrió que tal vez él lo dijo como una broma.

-Supongo que me vería raro tiñéndolo- me rio nervioso, no puedo creer siquiera que eso pase por mi cabeza, ya todo esto es muy raro, no entiendo porque ella se empeña tanto en cambiar mi imagen. Pero el manos ya no me está regañando.
Me pone esa cosa en los labios, es cremosa y tiene un aroma dulzón, más que dejarlo en mis labios me dan ganas de comerlo, así que no puedo evitar lamerlos, pero huele mucho mejor de lo que sabe.
-No me molesto… mas bien das miedo- casi revuelvo mi cabello por inercia pero siento ese gel en mis manos y me detengo, no debo arruinar tan rápido lo que ha hecho.

Abro mis ojos ante la sorpresa, ¿Ella me entendió? no puede ser, tiene que ser una broma, no, es imposible, no dice nada, seguro solo no ha entendido.
-¿Si?- llevo mi mano a mi nuca, ella no me ha rechazado, pero… ¿de verdad lo desea? no soy tonto, no es que ella sienta una atracción por mi, dudo que siquiera me vea de esa manera, porque incluso me ha invitado a dormir en su casa, como si de una amiga se tratara -Sabes coreano- bajo la mirada ahora si que mi cara debe estar colorada por la vergüenza -¿broma? no, no, para nada… pero pensaba que no ibas a entender… porque no creía que fueras a decir que si- creo que es obvio que me cuesta creer que ella aceptó -¿Preferirías que fuera una broma? si eso prefieres, entonces si, es una broma…- mientras mas abro mi boca más inseguro me siento con lo que digo. Entonces recuerdo algo, sus amigos, ese persona que la hace poner esa cara triste -a ti te gusta mucho esa otra persona que comentaste ¿cierto?- realmente ella no fue rechazada, no ha tenido la respuesta de esa persona ¿cierto? no quiero esperanzarme con algo que puede acabar mal con una sola llamada de un idiota, si, le he dicho idiota a una persona que no conozco porque algo debe andar haciendo mal como para que ella piense que fue rechazada -¡si!- exclamo cerrando mis ojos con fuerza -quiero que salgas conmigo- estoy muy nervioso, no puedo creer que lo vuelva a decir, pero ella misma me ha dicho que no sea tan pasivo, probablemente terminará mal pero si aun siendo el lindo y simpatico termina mal. Estuve a nada de decir que fuéramos amigos y que arreglara bien las cosas con esa persona y si entonces él la rechazaba, podríamos tener nuestra cita. Pero no lo haré, esta vez no.

-Al principio te sentirás raro, pero te acostumbras -creo que con los cambios en general siempre sucede eso, naturalmente te vas adaptando a esa nueva fase en tu vida- es la segunda vez que dices que doy miedo, eso no es muy halagador, sabes -hice una mueca y lo miré desilusionada. Debe ser porque estoy borracha, siempre me pongo más apasionada y tosca de lo normal. Aunque me había controlado muy bien, no fue hasta que comenzamos a platicar de cosas más series que me puse más pesada, me arrepiento un poco.

Él lo confirma, entonces lo decía enserio… ¿de verdad? No puedo saberlo, porque se ve nervioso, pero no sé si es porque en verdad quiere salir conmigo o porque tal vez yo interpreté lo que quise, y claro, él es el tipo de chico que dice sí a todo.
-Ah, sí. Mi madre es coreana -sonreí por la extraña coincidencia. Luego levanté mi rostro y lo miré confundida, entonces no era su verdadera intención, lo sabía. Y ahora seguramente viene el rechazo, ¿no? No, bueno, grandioso, rechazo doble en una noche- ¿ah? -mordí mi labio y miré a un lado un poco molesta, aunque me siento miserable. Si él no quiere pues que me diga directamente y ya, no tiene que inventar ninguna excusa- entonces sí era una broma -no llores, Hana, no es su culpa, simplemente no esperaba que las cosas se dieran así. Pero me siento mal, no distingo si él quiere o no salir conmigo. Como si no fuera suficiente con el rechazo de Ziba, conozco otro chico que por un momento pensé que era demasiado lindo, y ahora se le ha escapado una propuesta irresponsable.
Abrí los ojos un poco más, y tomé mucho aire.
-Sí, me gusta. Me gusta pero, me dejó ahí en cuanto pregunté si tenía novia, así que su respuesta es clara -suspiré desanimada. A él le gusta esa ex novia suya, no, la quiere, eso es mucho más complejo y no debería aceptar salir con alguien que está enamorado de otra. Pero me sorprende que acepte, y se escucha más seguro que hace un rato cuando me pidió que fuera una broma si así lo quería. Y de nuevo afirma eso, y el color en mis mejillas se enciende. He levantado en algún momento la vista, no puedo dejar de mirarlo, sus ojos siguen cerrados.
-De acuerdo -mi voz sonó apenada- acepto -me siento tan avergonzada. Casi siento que me han propuesto matrimonio, su pregunta parece demasiado seria- ¿cuándo? -no sé más que su nombre y lo que estudia, también puede que mañana él no lo recuerde. Aunque no lo sé, a mí se me está pasando el efecto del alcohol- Luciel, si no me ves a los ojos, seguiré pensando que es una broma -quiero mirar su rostro, siento mi corazón latir rápido. Hana, eres una tonta, te estás metiendo en un gran agujero tú sola.

-Lo siento- tal vez no me medí con la manera de expresarme, pero tampoco es que ella haya sido la persona más amable. Pero me siento mal por ser un poco insensible con ella. Tal vez es algo directa, pero intenta ayudarme, aunque no entiendo su afán de cambiar mi imagen.

-Mi padre es coreano, mi madre rusa- comento ante la casualidad, debí hablar en ruso, ese ya sabía que no lo entendería pero noooo, tenía que tentar mi suerte -¿Tú que quieres?- hay expectación en mi mirada, no estoy seguro de porque no me ha rechazado, pero creo que le estoy ofreciendo una gran oportunidad para hacerlo ahora, ¿acaso estoy idiota? si, creo que si.
¡Pero claro que le gusta! no le va a dejar de gustar de la noche a la mañana. Suena a una persona que no le interesa para nada el compromiso. Entonces yo no debería hacerme a un lado, si ese tipo lo piensa y decide que mejor si quiere algo con Hana, yo seré el idiota que dejó el camino libre. No quiero seguir teniendo ese papel.

Ella vuelve a aceptar, pero no me atrevo a abrir los ojos, me siento un poco, no que va, muy pero muy apenado con todo esto.
-¡Cuando!- repaso en mi cabeza mis horarios, no soy la persona más ocupada del mundo pero trabajo y estudio, así que a veces mis horarios no son los mejores -Ah, eso- abro mis ojos para mirarla, creo que si, este debe ser el momento en que mi piel debe estar cerca del color de mi cabello -No bromeo- le aseguro mirando sus ojos, debo verme bastante tonto pero no desvío la mirada -¿Que días tienes libres? - creo que será más fácil acoplarme a su horario -¿Te gustaría ir a patinar? ¿O prefieres algo como el cine?- hace mucho no tengo citas, pero mientras sea algo divertido creo que cualquier cosa está bien, no soy de los que piensa en solo cenar y sorprenderla con el dinero de mi familia, eso es mas del estilo de Dima.

Ahora la idea de quedarme no parece tan buena, he declarado abiertamente que ella me gusta y mi interés en algo más que una amistad, no creo que sea prudente pasar la noche juntos, no porque no pueda controlarme, sino porque, no parece lo correcto.
-Tal vez debería irme, no sé si ahora te sentirás incomoda conmigo aquí- llevo mi mano a mi cuello y pellizco un poco la piel de este, no fuerte, solo atrapando mi piel y soltando, es algo más que nada por los nervios.

Wow, ahora entiendo, la combinación hace que sus rasgos sean muy bonitos.
-Mi padre es americano -digo señalándome. Pero eso no importa ahora, ha sido raro que hayamos estado en la misma sintonía accidentalmente, con la frase equivocada, ¿o indicada? Todavía no lo sé.
Cuando por fin me miró me puse más nerviosa. Su cara se ve un poco colorada, se ve lindo, aunque seguro yo estoy igual, tengo una facilidad increíble para avergonzarme.
-Tengo mis dudas. No tiene que ver contigo, sino con el hecho de que me gusta alguien más, y tú también quieres a esa chica -suspiré, no es como si fuéramos a ser novios de inmediato, solo vamos a salir porque a él se le ocurrió proponerlo- pero me agradas mucho, y eres un chico atractivo. Además no sabemos qué va a pasar, así que, ¿por qué no intentarlo? -sonreí. Esto será complicado, pero si me niego seguro me arrepentiré después. Y si las cosas no son como esperamos, todavía podemos ser amigos, no es como que él me desagrade, hasta pensaba pedirle su número de contacto para después.

Pero una vez aclara que realmente quiere, dejo de sentirme tan insegura sobre si lo hace solo porque se le salió.
-Cuándo… debo revisar mi agenda -me levanté a buscar mi teléfono- tengo libres los domingos, pero a veces me piden ir al trabajo… -me senté de nuevo y comencé a buscar- la próxima semana y la siguiente tengo libres ese día, ¿está bien para ti? -estoy comenzando a ponerme nerviosa, hace mucho que no salgo en una cita- ¡patinar! Eso suena divertido -me gustan las películas, pero hace mucho que no voy a patinar, aunque no lo hago muy bien.
Me sorprendió que quisiera irse, pero pensándolo bien, no sé qué más podría decirle ahora, y ya no estoy tan cómoda como hace un rato. Sé que él no me va a atacar ni nada, es porque no dejaré de darle vueltas y puede que termine actuando mal o diciendo tonterías de nuevo.
-No es eso, pero… me siento un poco apenada -le hice un montón de cosas, me siento estúpida. Me sorprende que luego de eso él me esté invitando a salir- pediré un taxi para ti -mandé un mensaje y esperé que confirmaran el número del vehículo. Hay un silencio incómodo ahora- uhm, ¿ya no te sientes tan mareado? -eso me preocupaba hace un rato, y también tenía pereza de moverme, por eso no le pedí el taxi.

No es común conocer a un matrimonio de razas mixtas, sobre todo cuando una de las partes es coreana o asiática en general, al menos en los años de mis padres era mal visto ese tipo de relaciones. Aunque bueno, parece que recientemente hay un poco más de apertura, pero aun así sigue siendo algo poco aceptado principalmente por personas mayores.
-Que casualidad- pero gracias a eso es que ella logró entenderme.

-Bien, me gusta como piensas- digo más tranquilo, porque al menos así me ha dado una oportunidad -sobre todo eso de intentarlo- me rio un poco nervioso
Ella comienza a ver cuando tiene tiempo, que cheque su agenda me hace notar que tiene mucho trabajo, y por lo que me obligó a hacer, supongo que le gusta mucho.
-Si, perfecto- contesto de inmediato como si por tardarme un segundo más la fecha que dice fuera a ser ocupada. Ella elige lo de ir a patinar y solo pienso que al menos será una cita entretenida.

-Yo también lo estoy, y mucho-no sé si haga falta que lo aclare, me costó mucho hasta mirarla a los ojos -Ya casi no. Me siento mucho mejor- ella también parece estar mejor. Mientras esperamos el taxi le pido su número porque sería algo idiota irme sin haberle pedido su contacto.
-Bueno, me voy… te llamaré… - la miro un por unos segundos, esta despedida se siente un poco incomoda por lo nervioso que sigo -Buenas noches- me despido con un robótico movimiento de mi mano y subo al taxi. Me siento feliz y emocionado. Supongo que mi historia con Niki no debía continuar, lo pasé mal hace rato por ella, pero de no ser así, no habría conocido a Hana.