Tregua y problemas [privado]

Recuerdo del primer mensaje :

Ya llevamos saliendo mucho tiempo, más de medio año, por eso hoy por fin decidimos decirle a Julia sobre nuestra relación. Tengo la impresión que ella lo sabe, cada vez que me ve me sonríe de esa forma extraña e intencionalmente me excluye del grupo, pero creo que por sentirme un poco culpable no he tenido el valor de decir nada. Además de por sí debemos andar con cuidado, Julien quiere que al menos en su casa estemos tranquilos, y también porque ya no puede seguir mintiendo a Julia.
-Algo me dice que esto no saldrá bien... -suspiré de los nervios y terminé de alistarme para la cena. Solo estaremos nosotros tres y el amigo de Julien, creo que por una parte está bien porque puede amenizar el ambiente, aunque... Julia puede ser algo pesada cuando se molesta, solo espero que no se peleen, no quiero ser la razón por la  que ellos tengan roces- bien -di unas palmaditas en mis mejillas- no seas cobarde, Iskra -tomé mis cosas y salí para abordar el taxi que había pedido, me siento demasiado nerviosa, de hecho creo que me arregle un poco más de lo normal, solo debí ponerme una ropa más o menos adecuada. ¡Pero es que no puedo calmarme! No quiero que Julia se enoje con nosotros, ella me agrada y en serio quiero que entienda lo nuestro, pero también sé lo mucho que detesta que las chicas se acerquen a su hermano, ¡aunque yo no lo pensé así! Bueno, un poquito, pero no creí que en serio fuéramos a terminar saliendo.

Llegué a la casa y respiré hondo antes de tocar la puerta. Revisé mi ropa, pasé mi mano por mi cabello y toqué el timbre. Se me va a salir el corazón, lo juro, hasta siento que me tiemblan las manos.
-Buenas noches -le sonreí a Julien cuando abrió, y me invitó a pasar inmediatamente. El olor de la cena llega rápido a mi nariz, pero más importante... creo que Julia no ha llegado- Julia... -él dice que está por llegar, creo que está tan nervioso como yo y no puedo decirle “oye, cálmate, lo entenderá”, porque definitivamente pienso todo lo contrario- hola, buenas noches -Julien me presentó a su amigo y lo saludé, parece alguien muy amable y tranquilo, al menos estará aquí, dice que a Julia le agrada y por cómo luce, entiendo porqué, a ella le gustan los chicos atractivos y suele ser linda con ellos- ¿quieres que ayude a poner la mesa? -entre Julien y yo acomodamos la mesa para cuatro personas, la cena está casi lista según Asb... ¿Asbjorn? Parece impronunciable su nombre... tal vez debería llamarlo por su apellido, o “amigo de Julien”. No, no, eso suena muy mal educado, además, ¿eso qué importa ahora? Se nota que me muero de los nervios.

Niki:

Ay no, hice mal en tocarlo, ¿verdad? Aunque parece que le agrada, además no es como si yo pudiera mover mucho mi mano porque el solo tenerla sobre esa zona me hace sentir muy nerviosa. Pero creo que no solo yo me siento de esa manera, él evidentemente está disfrutando de esto.
-Oh, no, está bien, yo lo siento -mi pecho está agitado, y lentamente retiré mi mano- ah, bueno... -oh... eso yo tampoco lo sé, es la primera vez que llego tan lejos- yo tampoco sé cómo -sonreí apenada, el habernos separado ha hecho que mi respiración se regule un poco, pero todavía siento mi cuerpo super extraño.
Pensé que él pararía, fue un poco decepcionante pero tampoco se ha movido, y su cuerpo sigue igual de excitado. Me quedé mirando su cara, tengo ganas de besarlo, no creo que alguna vez me canse de eso incluso si después me muero de vergüenza, además si preguntó es porque también quiere, ¿no?
-Solo si tú quieres -no sé nada sobre sexo, y ahora me odio por no haber investigado o al menos haberme visto una porno alguna vez- p-puedes tocarme... puedes, donde quieras -me arde la cara, soy la persona perfecta para decir las cosas más vergonzosas y pervertidas. Bueno, ya sabía que lo era, pero ahora también se lo he demostrado a Julien- yo también quiero... aunque si no te gusta, está bien, no voy a obligarte -¡pues claro que no, idiota! Pero estoy tan atontada que digo puros disparates. Cerré los ojos por la frustración, de nuevo mi pecho se siente pesado por culpa de mis latidos acelerados.

Parece que nuestro mayor obstáculo resulta ser la inexperiencia de ambos. Eso me hace sentir más tranquilo, al menos al ser ambos unos ignorantes en el tema, hace que no me sienta tan presionado.
¿Qué si quiero? creo que mi cuerpo delata mis intenciones, y cuando ella me dice que puedo tocarla, de nuevo siento ese fuego que quema en mi pecho.
-Me gusta-me apresuro a contestar, no quiero que ella piense que estoy rechazando esto, es simplemente que es demasiado y no sé como manejarlo.
En cuanto ella cierra los ojos vuelvo a besarla, no lo he podido evitar. Mis manos aunque inseguras se animan a explorar su cuerpo, es la primera vez que toco sus pechos, aunque sea solo porque mi mano pasó por un momento porque sigo conociendo su cuerpo, de nuevo también mi mano baja hasta sus piernas, y poco a poco me doy cuenta de cuanto deseo tocarla sin la sensación de la tela estorbando. Porque incluso sus medias de red ahora comienzan a ser molestas.
-Quiero sentir tu piel- mi mano sube por debajo de su vestido y logro rozar la piel de su cintura. Es tan suave y se siente ardorosa y quiero más. La dejo de besar por un momento y me muevo para con mis manos tomar sus medias y comenzar a bajarlas un poco. Mi mente se ha enfocado tanto en hacer eso, que no he pensado como de costumbre en si debería o no. En cuanto las medias ya no estorban mis manos recorren sus piernas, adoro sus piernas, siempre me ha gustado que use faldas y ese tipo de prendas. Regreso a sus labios mientras mis manos siguen disfrutando de la piel de sus piernas. Mientras lo hago, mi mano roza el interior de sus muslos subiendo tanto como es posible y termino sintiendo de nuevo algo de tela, pero ahora es de su ropa interior. Pero se siente algo fría. De nuevo actúo por mero instinto y mi mano se nueve a esa zona, y siento esa humedad en la prenda. Muevo mis dedos un poco para meterlos y sentir de manera directa lo que ha mojado su ropa. El sentirla ha hecho que mi propio deseo de nuevo crezca.

-No tienes que creerme, ¿pero por que te mentiría?- no es que gane algo por decir eso, solo puedo parecer un idiota algo intenso y fastidioso. Me río por como menciona a los chicos.
-No he ido desde esa vez- le aclaro, aunque siendo ella, seguro que no me cree.

Ella se acerca y rodea mi cuello, puedo tener la seguridad de no iniciar algo, pero no sé si tenga la voluntad de poder resistir si ella toma la iniciativa. No me muevo ni un poco mientras ella se acerca, me siento expectante por poder besarla de nuevo, pero al final no ocurre.
-No he hecho nada- mis brazos le rodean para abrazarla. Pongo mi mano en su cabeza para hacer que la acomode en mi pecho, acaricio su cabello.
Hace un rato su parcial desnudes me tomó por sorpresa, pero ahora el contexto es tan diferente que ahora eso carece de importancia. Quiero que se sienta bien, no quiero solo ser el hombre que la hace sentir rara e incomoda.
-ahora mismo te diría que fueras a tu habitación y que durmieras, pero no quiero que te vayas con él- admito mientras sigo acariciando su cabeza -Se que dije que no iba a hacer nada, pero contigo, siempre termino cambiando de parecer. Puedo intentar conquistarte para que me elijas a mi- lo de Julien, bueno ya hablaré con él, creo que debo dejarle claras mis intenciones con Julia desde ahora. Puede que no le guste nada al inicio, pero no tiene ninguna razón para molestarse, si es por la edad, él está pasando por algo similar, así que con eso puedo defenderme.
Mi mano se desliza para tomarla del mentón y hacerla levantar la cara y que me mire.
-¿Por qué tienes novio?- no se ha ido, de alguna manera pareciera que me ha preferido, por eso no entiendo.

Su respuesta fue rápida y actuó de la misma manera. No fue difícil dejarme llevar, poco a poco me acostumbro a este ritmo al besarnos, creo que después de hoy será difícil no desear esta clase de contacto entre nosotros.
Y sí, yo dije que me tocara pero no creí que en verdad lo haría. Cuando empieza a pasar su mano por mi cuerpo siento que mi pecho se agita, pero trato de controlar mis impulsos por alejar sus manos. Quiero que siga, pero cada vez estoy muriendo cada más por la vergüenza, además que no tengo la misma seguridad que él para tocarlo.
Al parar el beso tomo bastante aire y lo miro, mi cara debe estar muy roja, su voz es tan diferente ahora y solo me queda desviar la mirada. Usualmente es él quien hace eso, pero ahora no sé ni qué responder.
-Ah -llevé mi mano a mi boca para ahogar los jadeos, siento que se me saldrá el corazón, sus manos han empezado a tocar bajo mi vestido y hace que la sensación sea mucho más fuerte que antes.
Moví mis piernas para juntarlas un poco, pero él me hace imposible eso al comenzar a retirar mis medias, y en lugar de pedirle que se detenga, hago que las cosas sean más sencillas para él. Respiré agitadamente y lo miré mientras me tocaba, se siente demasiado caliente pero me gusta su expresión de ahora.  Él continúa besándome y acariciando, y a pesar de sentirme cada vez más mareada por las sensaciones, cierro los ojos y me dejo llevar.
Pero su mano va subiendo, y abro los ojos cuando siento que se va aproximando a mi ropa interior. De nuevo no puedo seguir el ritmo de sus besos, pero… pero… es muy difícil, ni siquiera sé si esto realmente está pasando. Abrí mis piernas por instinto y solté un gemido cuando introdujo sus dedos, llevé mis manos a sus hombros y comencé a respirar con dificultad. Mi cuerpo hormiguea, pero me gusta, me gusta mucho cómo se siente. Por eso creo que voy perdiendo la razón, porque también he comenzado a mover mi cadera deseando más, ni siquiera sé cómo, pero quiero que me toque más.
Mordí mi labio y lo miré, quiero tocarlo también.
-Yo también quiero -mi vestido está completamente levantado, y me abrí paso entre nuestros cuerpos para también introducir mi mano y tocarlo. Hace un momento dijo que no moviera mi mano, pero por culpa del deseo, cuando lo toqué torpemente comencé a acariciarlo sobre su ropa.

No tengo idea de por qué mentiría, puede haber muchas razones. Pero creo que a estas alturas eso ya no tiene tanto sentido, porque sin mucho esfuerzo consigue bajar mis defensas.
-¿Es por mí? -me he sentido muy tonta al preguntarlo, pero si lo menciona debe serlo, aunque es estúpido que no buscara chicas pero tampoco intentara nada conmigo.

Mi cabeza termina recargada en su pecho y cierro los ojos. No parece nervioso, yo estoy con el corazón muy acelerado y él no se escucha de la misma forma. Pero me quedé quieta porque estar así abrazados se siente muy bien. Es diferente de aquella vez que nos besamos, o cuando sentí que estaba muy excitado por mirarme casi desnuda. Ahora lo que siento es algo más que deseo, y con ello viene una punzada molesta a mi pecho que casi me quiere alejar de sus brazos.
-Haz lo que quieras -por dios, este tipo tiene frases tan ridículas, y aún así mi pecho no deja de agitarse por esas frases tontas o la idea de estar a su lado.  Me sorprende que siquiera piense en mandarme a dormir, es un idiota, yo hasta había olvidado que Ziba está en mi habitación- ¿a dormir? No soy una niña -odio que haga eso, sé que hay muchos años de diferencia, pero parece que solo a mí me trata de esta forma.

Levanté la mirada cuando tomó mi barbilla, miré sus labios por unos segundos y pensé en besarlo, pero de alguna forma arruina un poco el ambiente.
-Por nada en particular -desvié la mirada, si ahora le digo que Ziba y yo no vamos en serio, además de regañarme quedaré como tonta- ¿quieres que lo deje? Pensé que te agradaba -no sé para qué he preguntado, si él dice que sí, ¿qué haré? ¿Y si dice que no? Dios, siendo él esa una posibilidad y me enfadaría muchísimo.
Los nervios me ganaron y con tal de evitar una respuesta de su parte, me acerque a sus labios y los besé. Quería actuar normal, pero no pude al sentirlos y recordar aquella noche, y me cuesta ocultar que extrañaba besarlo.

No sabia que yo podía reaccionar de esta manera, estoy actuando de manera instintiva. No sé como puedo hacer todo esto sin pensarlo, solo reacciono y hago las cosas llevado por el deseo. Todo, absolutamente todo esto es nuevo para mi.
Esta clase de placer era completamente desconocido para mi. Estoy abrumado por esto, pero se siente tan bien que no puedo pensar con claridad.

Mis dedos apenas le acarician, pero ella reacciona al instante. ¿Por qué es tan excitante algo como esto? No puedo entender este instinto natural, pero por primera vez, no me preocupa el entender, solo quiero mas.
Siento su humedad y mis dedos se animan a acariciar un poco mas su intimidad. Es mi primera vez tocando a una mujer y trato de ser delicado.
Ella se mueve y consigue hacer que su mano vuelva a tocarme. Jadeo por ese contacto, pero esta vez no le pido que deje de hacerlo, aunque tampoco es que importe demasiado, porque solo un poco más del movimiento de su mano y siento aquella descarga de placer acompañada de humedad.
-lo siento- le digo avergonzado ocultando mi rostro, me siento muy tonto, pero no pude resistir más, fue demasiado.
Me percato de la humanidad en mi pantalón y me muevo para ver si no he manchado si vestido, parece que no.
-lo arruine, pero no lo pude evitar. Es que no sabía que se sentía tan bien- le explico aun apenado.

Su pregunta hasta parece tierna. Aunque a veces la respuesta parece muy clara, siempre se siente bien recibir una confirmación para no quedar con ninguna duda. A final de cuentas nadie puede ser tan bueno entiendo a otros si no es por comunicarse con sinceridad.
- si, por ti- no me importa ser claro, no soy de los que se avergüenza por algo como esto. Ya no soy un niño como para reaccionar tan infantil por confesar que alguien me gusta y hago cosas por ella.

Me río por su respuesta, se que le molesta que la trate como niña, pero no lo hago, solo que ella siempre lo ve de esa manera, creo que tiene algo de complejo por nuestra diferencia de edades.
-se que no lo eres, aunque a veces te comportes como una- le digo riendo un poco.

Su respuesta solamente me anima más, parece que no tiene sentimientos fuertes por él.
- pues obviamente yo - no puedo terminar de responder porque ella se acerca y me besa.
Como ya lo sabía, no me resisto ni un poco. Al menos esta vez tengo la seguridad de que esto no pasa solo por culpa del alcohol. Solo se que esta noche me ha servido para despejar muchas dudas y darme seguridad para no seguir temiendo sobre lo que pueda pasar.
Aunque quiero seguir el beso tanto como sea posible, me separo de ella.
-yo quiero que tú estés con la persona que quieres- se que no es él y puede ser que al final ni siquiera yo lo sea, pero siempre espero que las personas que me importan sean felices.

No creí que el placer hiciera que dejara de pensar, estoy haciendo cosas vergonzosas e incluso lo estoy tocando, pero no me detengo y busco un poco más de estas sensaciones. Pero repentinamente siento algo húmedo en mi mano y dejo de moverme, aún estoy agitada y no capto muy pronto lo que ha pasado. Respiré hondo y alejé mi mano de su pantalón, y por su disculpa puedo enterarme que él se vino con apenas unos segundos de haberlo tocado.
-Es-está bien -sonreí avergonzada, no puedo ver su rostro y empieza a venir toda esa vergüenza de golpe- ¿qué? ¡No! No lo arruinaste, si yo... yo, bueno, yo creo que ya... -mi cara está completamente roja- yo también manché tu mano, lo siento -él ya debería saber que yo también me sentí igual, porque... oh, por dios, no puedo creer que me comporté de ese modo, ¡no puedo creer que me tocó ahí! Quiero meterme en algún lugar porque no sé cómo encararlo, hice y dije cosas demasiado comprometedoras, me siento muy avergonzada.

Cuando se levantó yo me senté en la cama, mi mano aún está húmeda y no es lo único mojado, no puedo creerlo. Además mis medias están en el suelo, ¿debería agacharme y recogerlas? Tengo que ir al baño, necesito... ay dios, me siento tan pervertida y a la vez estúpida.
]-¿Puedo usar tu baño? -mi mirada está en el suelo, no puedo verlo a la cara luego de lo que hice. Recogí mis medias y me di cuenta que están rotas, debería tirarlas o algo, tan solo tocarlas me hace sentir de lo más tonta- voy... bueno -abrí la puerta con la mano que sostenía las medias, no me da asco su semen, pero no creo que sea buena idea tocar los pomos de la puerta así.
Escuché voces en la sala y me metí rápidamente al sanitrario, creo que no podré ver a la cara a su quien sea que esté ahí, ¿nos habrán escuchado? No tengo idea, pero creo que hice algunos ruidos raros.
-Ja, no pasa nada, no es como si ellos nunca lo hubieran hecho... -me lavé las manos y me limpié un poco, tengo que llegar a casa y darme un baño- solo actúa normal -cuando terminé, me coloqué las medias, no se ve muy bien ese agujero en la pierna, pero sería más raro llevarlas en la mano.
Salí del sanitario, respiré muy hondo y toqué de nuevo a su puerta. Me he lavado la cara, peinado un poco y obviamente limpié otros lados, creo que si me veo casi igual que cuando llegué...

Me molesta que lo diga tan seguro de sí mismo, no se pone nervioso ni duda en expresar lo que siente. Tal vez debería hacer lo mismo, de todos modos él ya sabe que me gusta y me vio actuar como una  tonta hoy y aquel día.
-Ya veo -apreté mis labios para no sonreír, porque  aunque deseo no reaccionar ni sentir nada, me emocionó mucho que respondiera eso.
Fruncí el ceño cuando dijo que me comporto como una niña, eso no es así, pero obvio al señor perfecto y maduro debe parecerle porque no entiendo ni por qué, con él he sacado lo peor de mí. Aunque me siento aliviada, y a la vez sigo sin entender qué diablos le gusta de mí. La gente no me conoce y por eso le agrado, pero una vez que empiezo a comportarme egoísta ellos se alejan de mí. Pero la diferencia entre esa pequeña muestra de mi personalidad y lo mucho que me he abierto con Asb, es grande, en serio este tipo debe estar mal de la cabeza.

-Eso es tan típico de ti -solo me alejó de él para soltar esa ridícula y cursi línea. ¿Acaso no es obvio? Si quisiera estar con Ziba entonces no lo habría seguido, no estaría aquí con él. ¿Es estúpido? Cualquiera pensaría que es raro que mi novio le importa demasiado poco que me he tardado, pero él creo que no, y aunque me lancé a besarlo y le dije esas cosas tan cursis, todavía sale con sus tonteras- piensa un poco, por dios -alejé mis manos de su cuello y recargué mi espalda en el sofá.
Escuché la puerta de la recámara abrirse, miré pensando que sería Ziba pero parece que era Julien o Iskra.
-¿Qué harás si Julien sale y me encuentra así? -a mí no me importa mucho, pero sé que mi hermano no reaccionará muy bien, él es taan cuadrado, aunque me extraña que no hayan salido de su habitación.

Miro mi mano por lo que ella menciona, siento un pequeño cosquilleo en mi estomago y suelto una risita, no sé porque, creo que ha sido por los nervios.
-Está bien- de nuevo río algo nervioso.

-Adelante- le digo para que pueda ir al baño y yo me quedo solo -Debo cambiarme- suspiro, la verdad me gustaría darme un baño, porque ahora me comienzo a sentir incomodo. Me quito la ropa que he ha ensuciado y me limpio con un poco de papel, al terminar me pongo ropa limpia.
Abro la puerta cuando llaman, y dejo que pase.
-Hola- bien, no sé porque he dicho hola, me siento muy nervioso por lo que ha pasado. No fue nada malo, es algo normal en un apareja pero, para mi ha sido un avance muy grande. Creo que debería comenzar a informarme un poco más. Mi único conocimiento es el aprendido en la escuela y eso creo que no es mucho.
-¿Quieres que te lleve a tu casa?- al menos ahora pregunto algo con sentido -Solo debo pasar al baño- me meto al baño solo para hacer un poco más cuidadosa la limpieza que realicé antes.
Me miro un momento en el espejo cuando termino de lavar mis manos y al cruzar por mi mente los recuerdos sonrío. Es extraño, es como conocer una nueva expresión en mi. Al salir regreso a buscarla para que nos vayamos, pero al avanzar se cruza una idea por mi cabeza. La verdad no quiero que se vaya, quiero estar mas con ella, ¿y si le pido que se quede esta noche? No, debo controlarme, no puedo comenzar a actuar de manera irracional solo por mis sentimientos, aunque ella dijo que podía ser mas impulsivo, esto entra en esos parámetros ¿no? -¿No te gustaría quedarte?- pregunto con demasiada inseguridad.

Me río por la forma en que toma mis buenos deseos para ella.
-¿Yo soy el que tiene que pensar?- pregunto riendo un poco -Julia, tu eres la que complica todo- no puedo quitar mi sonrisa, ella puede pensar que me burlo, pero la verdad solo se trata de que me siento feliz. Pero aun si ya me confirmó que yo le gusto, no significa nada. La vida no es así de simple, puedo gustarle, pero ha dicho que no sabe lo que quiere, o sea que tal vez no quiere estar conmigo.

Escucho aquel sonido en el pasillo, y luego la pregunta de Julia, y solo le sonrío.
-Bueno, puedo hacer muchas cosas- digo sin ponerme nervioso -Puedo mentir y decir que peleaste con tu novio y que por eso saliste así y te estoy consolando, o puedo decir la verdad, que saliste de tu habitación así para seguirme y reclamarme por interrumpir a tu novio y a ti antes de tener sexo- no me siento inseguro porque tampoco es como que Julien me vaya a agarrar a golpes o algo así -así que tranquila, por mi que nos vea- es verdad que antes le daba todo poder a ella porque no sabía lo que sentía por mi, pero ahora que lo sé, no creo poder mantenerme al margen como antes.
-¿Tú quieres que tú hermano te vea así?- No es que Julien tenga una imagen de inocencia de Julia, pero creo que como a toda persona una cosa es saber que los demás tienen sus vidas y eso, y otra es confirmarlo, como lo sería al ver a Julia así.

De nuevo abre la puerta y su forma de saludar se siente rara, peor me he reído y agachado la cabeza, y al entrar me quedé de pie quietesita.
-Sí, claro, gracias -pasé mi cabello tras mi oreja y asentí, es vergonzoso mirarlo, aunque él sigue actuando muy amable.

Al salir él yo solté un gran suspiro, estoy muriendo de los nervios, y miro la cama solo para recordar de nuevo esas cosas que hicimos. Cubrí mi cara y sonreí mucho, siento mi pecho agitado pero ahora es diferente., esto es desconocido para mí y por eso no tengo idea de cómo actuar o qué hacer. No sé si ser indiferente y casual, o expresar cómo me siento. Solo verlo me hace sentir pequeñita porque... bueno, él me tocó en lugares inimaginables. Claro que esperaba ocurriera algún día, pero no pensé que avanzaríamos hoy y tan rápido solo por una pequeña charla, eso fue tan intenso que creo me afectará por los próximos días.
Él regresó y le sonreí de nuevo, comencé a jugar con mis manos y al casi salir de su habitación lanzó esa pregunta.
-¿En serio? -mi pecho comenzó a ponerse loco, ¿me invitó a quedarme? ¿Eso quiere decir que dormiremos juntos? No sería la primera vez, pero... ahora definitivamente ocurrirá algo, ¿no? Ay no, él no es así, por dios... bueno, hoy he visto una cara que no conocía de Julien, tal vez sí piensa en hacer más de esas cosas- sí, me encantaría -ay, dios, he dejado obvio que yo también quiero más momentos así, soy una desvergonzada.
Lo miré a los ojos por fin, mi cara se puso roja de repente pero luego de un incómodo silencio, me reí.
-Lo siento, estoy... bueno, es un poco raro... pero no digo que raro malo, sabes, de hecho fue muy bueno... jajaja ah... -rasqué mi cabeza y desvié la mirada, pude decir algo inteligente pero no, tenía que ser tan estúpidamente honesta. Se nota que soy una niña, aunque él tampoco había hecho nada así y eso me alegra, el avanzar juntos es muy agradable.

Pues sí, lo complico pero es su culpa, si él no fuera tan raro y “considerado” con otros, creo hace mucho me habría valido caer o no. Aunque también esa parte me gusta de él, supongo que lo hace interesante, más o menos.
-¿Realmente crees que soy tan complicada? Porque te ves super seguro. Y todavía vienes y dices eso de irme con quien quiero, por dios -no puedo evitar enojarme, me estoy portando como la niña malcriada que él dice, ¡pero él me hace ser así! Es horrible lo mucho que me  controla y , cielos, creo que lo sabe, no hay una pizca de inseguridad en cómo se expresa.
Ni siquiera cuando le pregunté sobre mi hermano duda un poco, se ha pensado rápidamente una solución.
-Claro que no, seguramente me fastidiaría mucho. Además seguro ya querrá darme un sermón sobre Ziba... oh, Ziba -lo recordé sin mucha importancia, no porque me desagrade, pero sé que él no vendrá a hacer una escena de celos, de hecho me sorprende que no se haya ido, ¿se habrá quedado dormido? ¿Se estará masturbando o algo así? Debería volver y disculparme, pero la tonta yo quiere estar lo más posible junto a este tipo idiota- será mejor que me vaya a poner algo de ropa, no quiero que Julien me vea -lo miré esperando que me detuviera, pero obviamente no lo hará- la habitación de mis padres está vacía -no, ¿qué rayos estoy haciendo?-¿quieres quedarte? -debe pensar que estoy loca, pero lo de Ziba ni siquiera sé si le dé celos, ya debe sospechar que él y yo no tenemos algo serio.

Tal vez no debí hacer la invitación, puede ser algo incómodo para ella, debí ser más prudente y no hacerlo.
-Solo si quieres, no te tienes que quedar, yo te llevo a tu casa si eso prefieres- digo con torpeza tratando de arreglar mi error -¿Si? pensé que tal vez te habría incomodado lo que dije. Pero es que no quiero que te vayas… no podemos pasar mucho tiempo juntos- explico la razón de mi atrevimiento.

Cierro la puerta ahora que ha dicho que se quedará y pienso en que hacer.
-Amm, te puedo prestar una de mis pijamas, y ammm, ¿Te gustaría darte un baño? es que yo me quiero dar uno. No digo que lo tomemos juntos, solo que si quieres, puedes tomar un baño- sugiero.
-Raro, pero no raro malo- sonrío por esas palabras, cualquier otro día habría pensado que son palabras un poco absurdas, pero en este momento las entiendo a la perfección -Lo sé- le doy la razón.
Camino para buscar entre mi ropa, lo que ella pueda usar, le va a quedar algo grande, pero aun así le doy las dos piezas de la pijama y una toalla limpia.
-Puedes bañarte primero si quieres.

Mientras ella se va a dar un baño, yo aprovecho para empezar a leer algunos artículos e informarme, pero entonces me doy cuenta de un detalle que había olvidado por completo.
-Preservativos…- no puedo ser tan idiota como para querer tener sexo sin protección, ¿pero en que estaba pensando? Bueno no es que necesite que pase esta noche, dormir con ella la vez pasada también fue agradable, raro… pero no raro malo.

Ahora sus actitudes me parecen mucho más lindas que antes, porque ahora veo lo que provoco en ella, no solo se trata de reacciones a las cuales no encontraba sentido.
-Si estoy seguro, pero saber que te gusto no significa que querrías estar conmigo- como siempre para ella todo es o blanco o negro, para mi, todo es más complejo que solo dos opciones.

Me río un poco cuando recuerda a su novio. Parece no ser tan importante, comienzo a cuestionar un poco la forma de su relación, es obvio que hay algo, iban a tener sexo cuando los interrumpí, pero no se sienten como si realmente fueran una pareja.
Asiento cuando dice que irá a ponerse algo de ropa, hace un rato que el ruido en el pasillo se escucha libre, así que Julien e Iskra deben estar haciendo algo. Espero que sea mas que platicar o sino esos dos van a morir sin haber perdido la virginidad.
Julia no se ha ido a poner ropa, de hecho menciona la habitación de sus padres.
-De acuerdo- ni siquiera lo dudo, solo acepto esa oferta que ha salido de repente -¿Cual es?- la casa no es muy grande es prácticamente obvio cual es la habitación de sus padres, y es tan obvio, como mi manera de buscar que ella me lleve -Es que no me quiero perder- me río de mi mismo.